Aylín Contreras, con 15 años de edad, ganó dos reconocimientos de bronce en el certamen Playa del Carmen Ballet & Contemporary Dance Competition. Tras su regreso a Guadalajara, la joven platicó del esfuerzo detrás del éxito obtenido: “Requiere mucha preparación, antes y durante. Voy al gimnasio, voy todos los días al ballet, entreno más o menos seis horas y media, más una y media de gimnasio. Requiere mucha disciplina alimenticia, y también mentalmente es bastante exigente. Pero es muy padre estar en el escenario: toda esa preparación vale la pena por el tiempo que estamos en el escenario”.Alumna de la Academia de Danza Doris Topete, Aylín recordó cómo vivió los momentos en el escenario: “Traté de concentrarme mucho, pensando en todo lo que me han ayudado mis papás y mis maestros. Después se siente muy gratificante obtener el reconocimiento al esfuerzo que se hace”. Su tercer lugar en contemporáneo y entre los diez primeros puestos del ballet clásico le generaron varias propuestas para estudiar en el extranjero: “Hay varias en Canadá y en Rusia. Creo que Rusia va ganando, solo que necesitamos recursos económicos, porque no es nada barato”. Aylín espera que con las competencias por venir pueda obtener el ofrecimiento de becas para continuar con sus estudios.Ya con los planes para continuar sus estudios en el extranjero, Aylín rememoró sus inicios en la disciplina, que conoció gracias a su abuelo que la llevó a ver las clases de ballet para ocupar su tiempo: “Vi a las niñas, estaban en la clase de avanzadas, vi cómo bailaban, cómo lo disfrutaban. Allí nació mi amor por la danza”. De su experiencia propia, resaltó: “Yo empecé a los siete años, más como un hobby. En realidad a esa edad no tenemos consciencia de lo grande que es. Tengo más o menos tres años que lo tomé en serio, cuando dije que me quiero dedicar a esto”. De lo que la movió para tomar esta decisión, Aylín dijo: “Vi a bailarines profesionales que me inspiraron a ser como ellos. También me motivó mucho saber que a través de este arte se puede ayudar a otras personas, inspirarlos y motivarlos”.Entre los profesionales del ballet que más la han motivado a seguir aprendiendo están su maestra, “me inspira mucho y motiva a seguir. Constantemente me levanta. De bailarinas mexicanas Elisa Carrillo me ha inspirado mucho. Sé que tiene una asociación para ayudar talentos”. En la Academia de Danza Doris Topete su maestra ha sido Monserrat Martínez. Conocer estas figuras profesionales la ha hecho ver que el camino no es fácil, pero que se puede recorrer con esfuerzo y sacrificio: “Sí son bastantes sacrificios, hasta familiares: mayormente estoy más en el ballet, convivo más con las personas del ballet que con la familia. Pero es interesante, los del ballet se convierten en familia. Lo que más me ha costado trabajo es lo mental, saber todo con lo que nos vamos a enfrentar, al ser una persona entre muchas otras”.Aunque pase buena parte del día en las clases, la bailarina tiene presente a su familia en todo momento, pues gracias a ellos está allí: “Afortunadamente mi familia siempre ha estado para apoyarme. Sí he escuchado casos en los que la familia se opone a los sueños de sus hijos. Es importante escucharlos, porque finalmente es lo que amamos hacer”.La competencia en Playa del Carmen fue su primera internacional, previamente asistió “a una nacional en octubre de 2019, otra en Ciudad de México. Obtuve el primer y tercer lugar. Se siente mejor, se va ganando experiencia y voy aprendiendo a no cometer errores, mejorar en muchas cosas”. Tras la competencia Playa del Carmen Ballet & Contemporary Dance, realizada en los primeros días de este 2020, Aylín Contreras tiene más certámenes en su calendario: del 22 al 25 de enero estará en otro concurso internacional, ahora en Miami; mientras que en abril irá a Quebec. De las piezas que ya tiene trabajadas para presentar en ambos concursos nos comentó: “Voy a bailar contemporáneo, ‘Don Quijote’ y ‘La bella durmiente’. Todos son solos”.Del repertorio clásico, Contreras enumeró algunos de sus números favoritos que ya ha tenido oportunidad de presentar en el escenario: “Me gusta mucho el ballet de ‘Romeo y Julieta’. También he interpretado ‘Don Quijote’, ‘Giselle’”. En contemporáneo Aylín ha bailado piezas más libres, con coreografías adaptadas para ella (de la coreógrafa Carolina Lagunes en el caso del certamen en Playa del Carmen).Competir nacional e internacionalmente conlleva el aprendizaje en el escenario y fuera de él: “Es increíble ver a personas de Japón, Estados Unidos, Perú. Ver cómo es, medirme con ellas. Ha sido muy bonito convivir con diferentes culturas”.