Las víctimas de la dictadura militar que gobernó Argentina entre 1976 y 1983, y la impunidad en la que vivieron los victimarios de aquel gobierno, es el acontecimiento sobre el cuál gira la novela "El libro de las mentiras", del autor argentino Gastón García Marinozzi, publicado por Editorial Alfaguara. El escritor, radicado en México desde hace diez años, considera aquel periodo de la vida política como un gran trauma, equivalente a la Guerra Civil en España o la lucha contra el narcotráfico en México, en donde el común denominador es la lucha por la justicia y la verdad por parte de las víctimas de estos acontecimientos. "Son temas que no se olvidan nunca porque no acaba de haber justicia alrededor de todos estos temas, hay víctimas, traumas, un dolor profundo que no acaba de curarse", explicó García, quien recordó que muchos argentinos no han recibido justicia, sobre todo a raíz de la derogación de las condenas promulgadas en el Juicio a las Juntas militares de mediados de los ochenta, debido a la presión del ejército pampero. "El libro de las mentiras" cruza las vidas de Mike y Mía, estudiantes universitarios que además de vivir una historia de amor, buscan exhibir a Eugenio, un genocida impune de la dictadura militar argentina, mediante el escrache -un tipo de manifestación surgido en los noventa en la que las personas acudían a los domicilios de los victimarios de la dictadura para evidenciar sus delitos-. De acuerdo a García Marinozzi, la propuesta de amnistía planteada por Andrés Manuel López Obrador, presidente electo, puede conllevar impunidad para quienes cometieron actos graves en temas como el narcotráfico, similar a lo que pasó en Argentina con los militares. "El perdón y olvido no se dan por decreto o por ley o por mandato presidencial, es cuestión de la sociedad que pueda hacer su propio proceso. Me parece riesgoso creer que, por voluntad personal de alguien, pueda haber perdón y olvido de ciertos temas. Sólo las víctimas pueden perdonar", señaló. Respecto a la novela, el también autor de "Viaje al fin de la memoria" dibuja personajes muy complejos, capaces de ejecutar actos buenos y malos a la vez. "Me gusta que los personajes no sean maniqueos, y que haya inquietud ante un personaje tierno e hijo de puta a la vez. Todos tenemos blancos y negros, y quería que la historia pudiera presentarlos así". García Marinozzi también refleja en su obra la dificultad de la transición entre la juventud y la edad adulta, y las preguntas que se plantean los personajes ante este cambio, reflejado en la frase de Jaime Gil de Biedma, citada en el libro: "Que la vida iba en serio. Uno lo empieza a comprender más tarde". El escritor argentino ha pasado su vida entre Argentina, España y México, y su condición de migrante le permite tener una postura muy clara en contra de la estigmatización y el racismo con las que ciertos sectores de la sociedad mexicana han juzgado a las caravanas migrantes de centroamericanos, quienes actualmente cruzan nuestro país hacia la frontera con Estados Unidos. "Es el gran desafío de la humanidad, los movimientos migrantes aquí y en diversas partes del mundo son inevitables, van a seguir creciendo y el desafío es lo que está en juego es la humanidad", dijo el novelista. "No hay muchos caminos sino el odio o la inclusión, lo que nos toca como ciudadanos es no seguir propagando el odio que se ha legitimado en esta época". LS