Cómo hacer huevos de Pascua en casa
La leyenda sobre un conejo testigo de la Resurrección de Jesús dio origen a esta tradición anglosajona
Los huevos de Pascua se han vuelto una tradición gastronómica del Domingo de Resurrección. Forman parte de las celebraciones anglosajonas relacionadas con la Semana Santa. Según cuenta la leyenda, un conejo quedó atrapado en el sepulcro de Jesús, observó cómo la gente lloraba su muerte, lo que afectó al animal, quién entristeció por la muerte de Cristo. Se cuenta que el conejo fue testigo de la resurrección. Al no poder hablar y comunicar la noticia, comenzó a repartir huevos dorados entre la población.
En los primeros años del cristianismo, consideraron al huevo como un símbolo de la resurrección de Jesús por lo que en la Edad Media comenzaron a volverse parte de las tradiciones de Pascua. Te decimos cómo hacerlos de manera rápida y sencilla.
Ingredientes
- 500 g de chocolate con leche
- Moldes de huevo de pascua
- Chocolate blanco (opcional)
- Confites de chocolate (opcional)
- Confites frutales (opcional)
Instrucciones
- Corta el chocolate con leche en trozos medianos y derrite 375 gramos a baño María. Mezcla constantemente para atemperar el chocolate. Añade el resto del chocolate y mézclalo hasta que se derrita e incorpore.
- Tiene que quedar liso y sin grumos.
- Una vez que esté listo, aplícalo con la ayuda de un pincel en el molde.
- Una vez puesta la primera capa, refrigera durante 10 minutos.
- Saca y añade con el pincel, otra capa de chocolate. Regresa al refrigerador por otros 10 minutos más.
- Repite el proceso por tercera vez pero, en esta ocasión, déjalo en el refrigerador por un mínimo de 30 minutos.
- Pasado el tiempo, desmolda y empareja las rebabas con un cuchillo. Pinta los bordes con chocolate fundido para evitar que se noten. Coloca confites dentro y/o alguna sorpresa si lo deseas. Une ambas mitades.
- Refrigera durante 10 minutos para que los huevos sequen completamente.