Cine sin fantasías
El cineasta Carlos Saura busca reflejar a México y su folclor en un largometraje que tendrá al bailarín tapatío, Isaac Hernández, como protagonista de “El rey del mundo”
Hacer cine basado en el pasado no es un gusto para Carlos Saura, el cineasta español que prefiere arraigarse en el presente y explorar lo inesperado.
El director de las “Bodas de sangre” ha dejado en claro que gracias a su pasión musical ha logrado establecer una íntima relación con su forma de hacer cine y en esta constante búsqueda su admiración por el legado sonoro de México ahora lo impulsa a un proyecto ambicioso y único: reflejar a México y su folclor en un largometraje que tendrá al bailarín tapatío, Isaac Hernández, como protagonista de “El rey del mundo”.
“Ya hay un guion, todo está en trabajo con mucho material ya realizado, estamos hablando con coreógrafos y bailarines para cuando se oficialice el rodaje. Confiamos en que Isaac sí sea el protagonista, tiene una agenda muy repleta y se pueden complicar las cosas, pero la idea es que esté”.
Aunque Saura también está a la espera de que la actriz mexicana KarlaSouza dé a luz a su primogénito para integrarla al rodaje, el cineasta tiene la firme intención de que las grabaciones tengan escala en Guadalajara y lugares emblemáticos del país con una selección musical muy precisa que acompañe la trama.
“Esto es un homenaje a la música y la danza. En mi educación la música mexicana siempre ha estado presente, en mi película ‘Antonieta’ -rodada en México y Francia en 1982- ya había investigado sobre los corridos, todo lo revolucionario de esa época y me fui a Madrid con 50 canciones rancheras y eso me dejó claro que hay muchas posibilidades musicales. El problema puede ser la selección con tantas opciones, en una película es limitado combinar la historia, los personajes y en lo musical no puedo poner 20 números, no me puedo equivocar en eso”.
Si bien, el también director y ganador del Goya por “¡Ay, Carmela!”, no ha detallado la historia que sus protagonistas tendrán a lo largo del filme que consolidan más de 60 años de trayectoria, sí revela que el folclor mexicano que desea exponer romperá con los moldes y estereotipos acostumbrados al apostar por una vanguardia que no caiga en lo predecible.
“Mi idea es tomar al folclore pero yendo más allá, aunque las canciones son ya conocidas quiero darles otra mirada. El folclor es muy hermoso pero quiero otra cosa con los trajes, los rituales, los personajes regionales, ver cómo pueden adaptarse a los chicos de ahora, actualizar canciones que parecen del pasado y que ahora sean más contemporáneas”.
Escena en movimiento
Aunque Carlos Saura no ha tenido la oportunidad de interactuar directamente con el bailarín Isaac Hernández, el cineasta confía en el control y la perfección escénica del tapatío y el estilo particular de su danza que lo ha convertido en el bailarín principal del English National Ballet.
“Eso lo sabré hasta que tengamos los ensayos con él, todo depende si bailará ballet clásico o integrará bailes más populares, es lo que quiero sabiendo que es un bailarín maravilloso, también tenemos a Julio Bocca, un bailarín argentino de la misma categoría y nivel que es capaz de bailar tango y otras cosas (…) para mí es importante, con la cámara, participar en la coreografía, tienes la opción de enfocarte en los pies, en los gestos, ya he trabajado mucho en piezas musicales, es algo precioso y difícil de hacer en el cine, tienes que tener cuidado de no repetirte”.
Sobre la participación que Karla Souza tendría en “El rey del mundo”, Carlos Saura externó que no ha tenido mayor acercamiento con la actriz mexicana más que pláticas previas, confiando en que el desempeño de la protagonista de “¿Qué culpa tiene el niño?” sea de excelencia, aunque reconoció hasta el momento no haber visto ninguna película de la actriz.
Fuera de la fantasía
Durante su visita a la 33 edición del Festival Internacional de Cine de Guadalajara (FICG), Carlos Saura compartió algunos momentos con el tapatío Guillermo del Toro, al que reconoce como una persona creativa por su capacidad de maniobrar historias con monstruos en mundos de fantasía y realidad, algo que para el cineasta español está muy distante de incluir a su filmografía.
“Sí me gusta la imaginación, pero la mía es mucho más realista. Yo no sueño con monstruos, estoy un poco en contra de hacer un cine de hadas, eso está bien pero a mí no me interesa, creo que entre más sencillo es algo es más adulto. La mente humana es una complejidad enorme donde se mezclan los deseos, el pasado, el presente y quizá el futuro y me interesa ese juego continuo, de cómo se modifica el recuerdo, que nunca fue lo que se dice, solamente las fotografías con recuerdos, lo demás es creado por nosotros, se fantasía con el pasado”.
Aunque la carrera cinematográfica de Carlos Saura ha sido imparable sumando ya más de 40 filmes y trabajado en al menos 108 guiones, el director señala que no le ha sido posible trabajar en todos los proyectos que se ha planteado.
“Hay cosas que no he hecho porque no les han interesado a los productores o por dificultades, no he hecho lo que he querido, podría haber hecho mucho más”, sentenció.
Formación crítica
¿De qué sirven los premios en el cine si algunos cineastas con preseas internacionales no logran llegar a la proyección pública?Para Carlos Saura no existen fórmulas que garanticen el éxito de una película aunque sea la más premiada del mundo, y señala que falta una reestructuración de la cartelera comercial que se oferta en los medios más masivos como la televisión y las pantallas privadas.
“Vivimos en un momento muy interesante para el cine pero también es dramático. Hoy cualquiera puede hacer una película con una cámara digital, no hay un problema de talento, pero pueden hacerse filmes maravillosos y no les ve nadie. Ahora hay miles de directores haciendo cine, no sabemos cuáles son los mejores o los peores, antes no pasaba eso, no sabemos qué pasará en el futuro”.
El cineasta español destaca que si bien la televisión pública es el medio más inmediato para el consumo masivo, los compromisos comerciales dificultan la concentración del espectador cuando películas no comerciales son proyectadas en este formato.
“Siempre funcionará el contar una historia. Yo veo una salida en la televisión, desgraciadamente la televisión pública de México o también la de España y Estados Unidos son terroríficas, transmiten una película y cada tres minutos está castigada con publicidad que destruye toda concentración y por eso se ponen películas más ligeras, de acción, de las que no importan si te distraes, creo que algún día habrá un canal de televisión dedicada a cosas más serias. Vivimos en un mundo globalizado, no me gusta esa palabra, pero todo es igual en París, Nueva York, Moscú, Madrid o México”.
DR