Un laberinto llamado Sinaloa
¿Cómo se sale del embrollo que se ha armado en Sinaloa? A estas alturas no hay salida sin costo para el gobierno de Claudia Sheinbaum. El señalamiento de la Fiscalía General de la República de que el diputado Cuén fue asesinado en el mismo lugar donde secuestraron a Zambada para ser llevado a Estados Unidos donde lo detuvieron no hace sino refrendar, por segunda ocasión, la versión del “Mayo”. El único elemento que queda aún en el aire es si el gobernador Rubén Rocha estuvo en el lugar y fue parte de la trampa que los hijos del “Chapo” pusieron al socio y compadre de su papá.
Como parte de la guerra que libran los seguidores del “Mayo” contra los seguidores de los hijos del “Chapo”, en estos días avionetas aventaron volantes en el que acusan al gobernador, a su familia y a los miembros de su gobierno de ser cómplices de los “Chapitos” y piden a la población denunciar a un teléfono específico (que cambia según la zona) cualquier intento de extorsión o cobro. Más allá de las acusaciones de corrupción, hay una declaración de guerra de “la Mayiza” el MF, el Mayito Flaco, contra el gobernador.
Para la presidenta, la violencia en Sinaloa es culpa de las agencias estadounidenses que secuestraron y detuvieron ilegalmente al narcotraficante. Pero ¿Y si Rocha fue parte de ello? ¿Si el gobernador morenista al que ella misma fue, junto con López Obrador, a darle su apoyo es parte del complot y el acuerdo con el gobierno estadounidense?
Aunque la misma presidenta pida a los medios que mejor volteemos la mirada a Guanajuato, donde gobierna el PAN, Rubén Rocha es ya un dolor de cabeza para el gobierno de Morena. No solo se trata del estado que más violencia genera, donde el conflicto entre las bandas de crimen organizado pone en riesgo constante a la población y altera la vida cotidiana desde hace varios meses, sino que a estas alturas ya no está claro si el gobierno federal puede o no confiar en el gran amigo del expresidente.
A quererlo o no, sostener a Rocha en la gubernatura significa tomar partido en esta guerra. Procesarlo también. Tampoco está claro que tipo de complicidad tiene Rocha con las agencias estadounidenses, ni el papel que jugó el gobierno vecino en la operación. En tres ocasiones la presidenta ha acusado la falta de información del gobierno de EU sobre la detención del Mayo y el acuerdo para liberar a uno de los hijos del Chapo.
Sinaloa es un laberinto sin salida construido a base de abrazos. Para donde se mueva la presidenta se espina y si no actúa, también.