Salón del automóvil de Detroit: Batalla de pickups
La Jeep JT y la Ford Lobo se robaron la escena en el más tradicional de los salones
El Huntington Place, antiguo Cobo Hall, ya no se viste de gala como solía hacer a cada año para recibir a casi todas las marcas fabricantes de autos del mundo, que se peleaban un espacio en el salón, en la agenda y en el corazón de periodistas, invitados y el público que venía de todas partes para conocer los autos que manejaríamos mañana. Pero al menos para las marcas locales, Detroit sigue siendo su casa y hasta por honor se mantiene su salón del automóvil, sin la belleza romántica e incómoda de la nieve de enero, pero con dos pickups y dos SUV importantes.
Ya esperábamos los cambios en la JT desde que Jeep cambió el Wrangler. Y claro, muchas de las novedades son las que descubrimos en el todoterreno más conocido del planeta. Hablamos de la nueva parrilla, cuyas siete ranuras verticales son un poco menos altas. Vistas de lejos, se percibe al vehículo más rudo, con esa parrilla pintada en color negro. Pero sigue siendo esencialmente reconocible como un Jeep. Los rines también son nuevos y, claro, varían su diseño según la versión. La Willys tiene ahora bloqueo de diferencial trasero, al igual que la Mojave, mientras la Rubicon mantiene el bloqueo en ambos ejes.
Por dentro hay mayor refinamiento y seguridad, con la nueva pantalla vertical de 12.3 pulgadas que, en Estados Unidos, puede venir equipada con mapas de rutas off-road previamente cargados. Hay bolsas laterales ahora, para ambas filas de asientos, lo que se agradece mucho. El motor se mantiene el V6 Pentastar de 3.6 litros con 285 HP con caja manual de seis cambios o automática de ocho. También una versión PHEV llamada 4xe.
Lobo cambia la piel
El vehículo más vendido en Estados Unidos en los 41 años más recientes también cambió. En el frente los faros, cuando están prendidos, ahora recuerdan un poco la versión eléctrica Lightening. Su motor básico pasa a ser un EcoBoost de 2.7 litros y habrá un híbrido, llamado PowerBoost. Pero la mayor novedad de la inmensamente popular pickup es la tapa de la caja. Ahora, la parte central de ésta puede abrirse verticalmente para acceder a la batea, además de mantener, claro, la apertura vertical tradicional, que es completamente eléctrica. Hay un escalón plegable para hacer más fácil subirse a ella. Deberá llegar a México en el primer semestre de 2024.
Lincoln mostró la renovada Aviator, con detalles de diseño que recuerdan al desaparecido sedán Continental, como las manijas “escondidas” en el marco inferior de los cristales de las puertas, pero en color negro en lugar del cromado del sedán. Nuevos rines, parrilla y equipo de seguridad, conforman la SUV.
Y GMC, marca de camionetas por excelencia, volvió a crecer; la Acadia, que en su modelo 2024 es nada menos que 26.92 centímetros más larga, tiene 21.34 centímetros más de distancia entre ejes y el espacio para equipaje es 36% mayor. Después de despreciar la tercera fila, la marca vuelve a darle importancia y ahora la Acadia puede transportar siete u ocho pasajeros, e incluso adultos caben en la tercera fila.
Cadillac también reveló el nuevo sedán CT5, que llegará al mercado como modelo 2025 con motor de gasolina y 33 pulgadas de pantallas en su interior, similar a la Escalade. Hubo presencia de otras marcas, pero a través de sus distribuidores, como Kia, VW o Toyota. Detroit, alguna vez el más importante salón del mundo, se volvió, quién lo fuera a decir, una exhibición local.
Sergio Oliveira/Detroit