Economía

Déficit de EU, en máximo de seis años por China y México

El saldo negativo del vecino del Norte con nuestro país suma 65 mil 683 millones; la balanza desfavorable es vista por Donald Trump como argumento para reestructurar el TLCAN

El déficit comercial de Estados Unidos (EU) creció 3.2% en noviembre de 2017 y quedó en un saldo total de 50 mil 500 millones de dólares, lo que marca su punto más alto en casi seis años, desde enero de 2012, según el Departamento de Comercio, con China y México entre los principales responsables.

Entre enero y noviembre de 2017, los datos más recientes de los que dispone el Departamento de Comercio, el déficit en el comercio de bienes y servicios de EU ha aumentado 11.6 % con relación al mismo periodo de 2016, un auge de 53 mil 400 millones de dólares.

Esto se debe a aumentos tanto de las importaciones, que se incrementaron en 166 mil 100 millones de dólares en esos meses, equivalente a 6.7%, como de las exportaciones, que subieron 112 mil 700 millones de dólares o 5.6 % con respecto al mismo periodo de 2016.

En el caso de China, el déficit se incrementó en mil 500 millones de dólares, hasta los 35 mil 400 millones de dólares, con lo que el saldo comercial negativo para la Unión Americana desde enero se eleva a los 344 mil 400 millones.

En cuanto a México, el déficit comercial se redujo levemente en noviembre, hasta los cinco mil 980 millones de dólares, frente a los seis mil 600 de octubre, con lo que el saldo negativo en lo que va de año suma los 65 mil 683 millones.

Ese persistente saldo comercial negativo con México es uno de los principales argumentos esgrimidos por el presidente estadounidense Donald Trump para exigir una renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) entre Estados Unidos, México y Canadá, el acuerdo comercial más grande del mundo.

Trump considera el déficit comercial una señal de debilidad económica y ha culpado por ello a los acuerdos comerciales con otros países que, a su juicio, son la raíz de la pérdida de empleos en el sector de la manufactura en Estados Unidos.

El presidente ha llegado a tildar este acuerdo de “desastre” para los intereses nacionales, por lo que está forzando una dura negociación en la que busca, entre otras cosas, reducir el déficit comercial, y existe la posibilidad de que Washington acabe por salirse del tratado si no logra un resultado favorable.

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