Una novela sobre la libertad
Entre las presentaciones de libros destacadas de la pasada FIL, está la de Eduardo Iglesias y su novela "El vuelo de los charcos"
El uso de la distopía como una defensa de la libertad individual y social contra las tiranías, es el tema sobre el cual gira “El vuelo de los charcos” (Trama Editorial), la nueva novela del escritor español Eduardo Iglesias Berredi, presentada en la pasada Feria Internacional del Libro (FIL).
“La libertad para mi es una de las grandes retos que tenemos como individuos”, consideró Iglesias. “Esta es una novela sobre la libertad en todos los sentidos, tanto conceptualmente como estructuralmente”.
En su obra, el autor recurre a una narración fragmentada y no lineal donde, a través de pequeños relatos aparentemente desordenados, el lector reconstruye los hechos que suceden sobre una ciudad amurallada futurista, donde las libertades se han restringido, y un grupo de rebeldes se opone ante esa ciudad y busca una sociedad más igualitaria y menos desigual.
“El lector se hace también escritor de la novela porque la hace suya, y la fragmentación me parece muy interesante porque es cambiarle registros al lector para que esté atento y entretenido, y a la vez le haga pensar”, explicó Iglesias, nacido en San Sebastián, ciudad del País Vasco (España).
Otra de las inquietudes del autor, presentes en “El vuelo de los charcos” y en obras anteriores como “Tarifa” (2004), es la lucha por la fraternidad entre las personas y la inclusión de los otros. Según Iglesias, en el mundo actual hay algunos avances en la libertad y la igualdad, pero asuntos públicos como el trato a los migrantes centroamericanos en México le hacen ver que la humanidad no ha progresado en la fraternidad.
“El mundo es de todos, no puedes poner puertas al campo, y menos ahora que te puedes desplazar a cualquier parte. Tenemos que ser más acogedores y hospitalarios con la diversidad”, manifestó.
“El vuelo de los charcos” también representa un homenaje a la naturaleza, vista como una alternativa para recuperar la humanidad de las personas y un modo de alejarse de los mecanismos de control y poder existentes en las grandes sociedades.
“La gente se está olvidando del campo y la naturaleza, en esta novela hay un canto a la naturaleza y de que podamos volver a ella siendo cívicos. La civitas no es solo con otros ciudadanos, sino también ser civil con la naturaleza, no ser un salvaje hacia ella”, resumió Iglesias.
El escritor donostiarra es uno de los mejores exponentes de la novela negra en su país, y ha escrito otros libros como “Cuando se vacían las playas” (2012), cuya trama retoma para “El vuelo de los charcos”; “Los Elegidos” (2014) y “Aventuras de Manga Ranglan” (1992).