Humor como herramienta para aprender
La ilustradora Luci Gutiérrez presenta “English is not easy”, un libro para disfrutar las lecciones para dominar un nuevo idioma
Si bien a muchos se les da con más facilidad el aprender el idioma inglés, para otros como Luci Gutiérrez no fue tan sencillo, por eso la ilustradora de publicaciones como “The New Yorker” y “The New York Times”, encontró la manera de aprender a su manera, divirtiéndose a partir de sus propios dibujos, contextualizándolos en experiencias cotidianas para retener con más facilidad sus lecciones de inglés. Y todo este esfuerzo se convirtió en el libro “English is noteasy” editado por Planeta.
“Hice (esto) porque me aburría mucho estudiando inglés, y necesitaba hacerme un manual o juntar todas las reglas que se enseñan en un libro para que me pudieran funcionar a mí”. Explica que entonces, partiendo de una necesidad propia, habrá gente que coincida con ella con lo que se expresa en esta obra gráfica en la que ella comprendió el idioma inglés desde su perspectiva y a su ritmo.
“Yo estuve unos meses viviendo en Nueva York y estuve estudiando inglés. Cuando regresé a Barcelona tenía material de mis clases junto con dibujos que hice de gente en la calle y de lugares de la ciudad. Así que pensé que podría juntar las dos cosas para hacer un manual para intentar memorizar lo que había aprendido, o lo que no había llegado a aprender, fue una coincidencia que me encajaran todas las piezas y así fue como hice el libro”. Gráficamente predominan los tonos rojos y negros en la obra, lo que le otorga una estética bastante peculiar.
“Al ser dibujos naturales, son situaciones cotidianas que yo veía que pasaban a mi alrededor y aunque no las dibujaba al momento, sí que se me quedaban en la cabeza y cuando volvía a casa las dibujaba, pero sí, son escenas que día a día te puedes encontrar (en la calle)”.
El libro, reitera fue un proyecto personal, por lo que no hizo equipo con alguien más, desconocía si se iba a publicar, pero sí era la intención una vez que estuviera armado, “pero mientras lo desarrollaba, sí hacía consultas, mi profesora de inglés me hizo correcciones y una vez que ya se iba a lanzar el libro, los expertos hicieron un repaso para que todo estuviera correcto”.
Cabe señalar que el libro está dividido en 17 lecciones, por lo que se le preguntó a la ilustradora ¿cuál fue la parte más complicada de ese aprendizaje? A lo que ella respondió: “Creo que los condicionales, como indica el dibujo de entrada al tema, que es una niña aterrorizada como de póster de película de terror de serie B. También los Phrasal Verbs, que diría que son la pesadilla de todos los que intentamos aprender inglés”.
En cuanto a que si el libro es de bolsillo o de consulta, expresa la creadora, que la idea en principio era recolectar las lecciones que se enseñan en los cursos de inglés con las reglas y vocabulario básico. La diferencia que tiene con los libros de texto que son específicos para aprender el idioma, es que “English is not easy” parte del humor y lo anecdótico para conectar con la audiencia.
JL