Tecnología
Australia busca a tiburón que mató a estadounidense
Las soleadas playas de Rottnest permanecerán cerradas hasta el lunes como precaución
CANBERRA (23/OCT/2011).- Cazadores de tiburones colocaron anzuelos en la costa suroeste de Australia el domingo con la esperanza de atrapar a un gran tiburón blanco que mató a un buzo estadounidense, en el tercer ataque fatal reciente en la zona.
Tony Cappelluti, gerente del Departamento de Pesca, dijo que el personal dio el extraordinario paso de colocar seis hileras de anzuelos en la costa del pintoresco paraíso turístico de la isla Rottnest, donde testigos vieron a un tiburón de tres metros (10 pies) de largo golpear su bote de buceo después de que el estadounidense George Thomas Wainwright, de Texas, muriera el sábado.
Wainwright, de 32 años, había estado viviendo en un suburbio junto a la playa de la ciudad costera de Perth, al oeste, durante varios meses con una visa de trabajo. La policía dio a conocer su identidad el domingo pero no su lugar de origen en Texas.
Cappelluti dijo que los anzuelos fueron retirados del agua después de que seis horas de cacería no rindieron frutos y por el temor de que los atunes muerdan y atraigan más tiburones al área. La cacería se reanudará si el personal del bote que patrulla el área detecta a un tiburón que sospeche sea el que mató a Wainwright.
"No ha habido avistamientos y eso probablemente indica que el tiburón dejó el área", dijo Cappelluti a The Associated Press.
Las soleadas playas de Rottnest permanecerán cerradas hasta el lunes como precaución, informó.
Los científicos han alertado sobre una reacción exagerada al tercer ataque fatal de tiburón en la costa suroeste en menos de dos meses. El promedio de ataques en Australia es de más de uno por año.
El ministro de Pesca, Norman Moore, previó nuevas regulaciones que permitirán la cacería de cualquier tiburón que represente una amenaza a la vida humana en cualquier playa.
"Si amenaza la vida de las personas o ataca a alguien y podemos destruirlo, entonces lo haremos", dijo Moore a los reporteros.
Tony Cappelluti, gerente del Departamento de Pesca, dijo que el personal dio el extraordinario paso de colocar seis hileras de anzuelos en la costa del pintoresco paraíso turístico de la isla Rottnest, donde testigos vieron a un tiburón de tres metros (10 pies) de largo golpear su bote de buceo después de que el estadounidense George Thomas Wainwright, de Texas, muriera el sábado.
Wainwright, de 32 años, había estado viviendo en un suburbio junto a la playa de la ciudad costera de Perth, al oeste, durante varios meses con una visa de trabajo. La policía dio a conocer su identidad el domingo pero no su lugar de origen en Texas.
Cappelluti dijo que los anzuelos fueron retirados del agua después de que seis horas de cacería no rindieron frutos y por el temor de que los atunes muerdan y atraigan más tiburones al área. La cacería se reanudará si el personal del bote que patrulla el área detecta a un tiburón que sospeche sea el que mató a Wainwright.
"No ha habido avistamientos y eso probablemente indica que el tiburón dejó el área", dijo Cappelluti a The Associated Press.
Las soleadas playas de Rottnest permanecerán cerradas hasta el lunes como precaución, informó.
Los científicos han alertado sobre una reacción exagerada al tercer ataque fatal de tiburón en la costa suroeste en menos de dos meses. El promedio de ataques en Australia es de más de uno por año.
El ministro de Pesca, Norman Moore, previó nuevas regulaciones que permitirán la cacería de cualquier tiburón que represente una amenaza a la vida humana en cualquier playa.
"Si amenaza la vida de las personas o ataca a alguien y podemos destruirlo, entonces lo haremos", dijo Moore a los reporteros.
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