Tapatíos postulan 86 árboles patrimoniales
Los existentes proveen servicios ambientales valuados en unos 8.3 millones de pesos anuales debido a sus características biológicas
Grupos técnicos, asociaciones civiles y tapatíos postularon 86 árboles para incluirlos dentro de las 11 vacantes patrimoniales que abrió el Ayuntamiento de Guadalajara.
Con esto, se busca sensibilizar a la ciudadanía sobre su valor biológico y cultural.
Para cuidarlos, la Unidad de Arbolado Urbano los monitorea cada tres meses para verificar su salud.
El titular de esa dependencia, Pablo García, resaltó la corresponsabilidad de los habitantes y el Gobierno municipal para conservarlos, sin importar si se encuentran dentro de casas, en banquetas, camellones o parques.
De acuerdo con el Manual del árbol, los nueve árboles patrimoniales tapatíos proveen servicios ambientales valuados en 8.3 millones de pesos anuales debido a sus características biológicas de captura de carbono, disminución de escorrentía, producción de oxígeno y reducción de la temperatura ambiental.
Estos se encuentran en Vallarta y Nelson, Bosque de Los Colomos, Colomos II, Panteón de Belén, Parque Agua Azul, Alameda y Monte Cáucaso, San Uriel y Ermita, Río Paraná y Tuberosa y Avenida La Paz, entre Lope de Vega y Calderón de La Barca.
El límite para postular árboles de gran porte o que tienen historias ligadas con las colonias es el 30 de junio.
En el Bosque de Los Colomos se resguarda uno de los más antiguos de Guadalajara: un ahuehuete de 150 años de edad que se ubica en el ingreso de ese espacio.
Se resaltó que presta servicios ambientales excepcionales como alta liberación de oxígeno, captura de carbono y captación de agua en la zona de protección hidrológica con la recarga de los mantos acuíferos.
Este mes, el Gobierno de Guadalajara sumó al “árbol del vampiro” a los ejemplares patrimoniales. Se encuentra en el Panteón de Belén y tiene 130 años.
“Este camichín tiene más de un siglo y una historia. Así como este, seguramente hay más que tienen algo que contar”, subrayó Paulina Cervantes, directora de Medio Ambiente del municipio.
Alistan plan para atrapar toneladas de contaminantes
- Se prevé que Corredores Verdes capturarán 36.72 toneladas de dióxido de carbono.
- Los pasillos de vegetación se enlazan con bosques urbanos, ecosistemas y hábitats.
Los 21 mil árboles de los 50 Corredores Verdes que se plantan en las principales avenidas de Guadalajara podrían capturar 36.72 toneladas de dióxido de carbono, el principal gas de efecto invernadero.
El impacto en el medio ambiente de los Corredores Verdes a lo largo de 240 kilómetros de vialidades equivale a la energía eléctrica consumida por cuatro casas durante un año, la carga completa de 4.4 millones de celulares o 15 mil litros de gasolina.
Estos pasillos de vegetación se enlazan con los bosques urbanos, ecosistemas y hábitats en una estrategia dentro de las acciones a favor del clima contempladas en el convenio con la Red de Ciudades C40, una alianza de ciudades a favor del cambio climático.
De acuerdo con el jefe de la Unidad de Arbolado Urbano del Ayuntamiento de Guadalajara, Pablo García Becerra, previo a la plantación de los corredores se identificaron las islas de calor.
“Se identificaron los sitios en donde hay aumentos de temperatura con ausencia de vegetación y se fijaron los corredores que favorezcan la conectividad entre las manchas verdes que existen para hacer una interconectividad de las manchas para fauna, mitigar las islas de calor”, detalló el funcionario municipal.
Se estima una supervivencia de 95% para los árboles de los Corredores Verdes. De acuerdo con la Unidad de Arbolado Urbano, la alta tasa de supervivencia se debe a factores como la plantación de especies propias de la región durante el temporal cuando los árboles ya están consolidados.
Con la plantación de 21 mil árboles se disminuirá el impacto de los mil 346 árboles derribados o removidos durante la construcción de la Línea 3 del Sistema de Tren Eléctrico Urbano (Siteur). En el tramo que recorre el tren de Zapopan, Guadalajara y Tlaquepaque se removieron tres mil 133 ejemplares.
A partir de 2015 se perdieron 42 especies, principalmente de laurel de la India, jacarandas, fresnos, ceiba, casuarina y guamúchil de diferentes dimensiones y edades.
MQ