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Sudoración excesiva puede ser tratada: experto

La hiperhidrosis constituye un problema no sólo físico sino social y emocional para quien la padece

GUADALAJARA, JALISCO (10/FEB/2014).- El especialista del IMSS, Rubén Santoyo Ayala, dijo que la hiperhidrosis, caracterizada por sudoración excesiva aún en ambientes frescos, constituye un problema no sólo físico sino social y emocional para quien la padece.

El experto adscrito al Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social ( IMSS) en Jalisco, dijo que los sitios en que más se evidencia la sudoración en personas con hiperhidrosis, es en axilas, manos y pies, acompañado además de mal olor.

Afirmó que estas personas tienden a sudar de cuatro a cinco veces más en comparación con alguien que no padece esta afección, pero además se trata de un sudor más lechoso que líquido y de aroma fétido, "y son los obesos los más propensos a presentar esta enfermedad".

Comentó que existen estudios en los cuales se revela que al margen del factor físico, hasta 95 por ciento de quienes padecen hiperhidrosis desarrollan problemas de baja autoestima y en 77 por ciento tienden a aislarse socialmente.

"Prefieren evitar la interacción con las personas sobre todo el saludo de manos, ya que éstas y su cuerpo se encuentran húmedos y les causa incomodidad y vergüenza", puntualizó.

Expresó que estas personas también desarrollan con más facilidad trastornos de ansiedad y depresión e inseguridad en ellos mismos, lo cual afecta de manera significativa su calidad de vida.

Recomendó ingesta abundante de líquidos debido a la pérdida importante de éstos por su sudoración excesiva, "se aconseja al paciente bañarse con frecuencia, hasta tres veces al día y utilizar antritranspirantes, así como, talcos y zapatos lo más ventilados posible".

Precisó que otras opciones en el tratamiento de hiperhidrosis incluyen la aplicación de soluciones a base de cloruro de aluminio, en especial en axilas, e inclusive de toxina botulínica para un bloqueo temporal de las terminaciones nerviosas que estimulan la sudoración.

Subrayó que en casos extremos, se procede a una simpactectomía que es una cirugía hecha bajo anestesia, en la cual las raíces nerviosas que estimulan la sudoración se cortan, aunque la mayoría responde muy bien a los tratamientos más sencillos".
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