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Dos mujeres son las protagonistas
Dos mujeres representan una forma de producir conocimientos en el centro de las Orientaciones Fundamentales del ITESO
Shiva era una destacada física de India que estudiaba en Canadá cuando fue interpelada por un movimiento de mujeres que se oponían a la deforestación de los bosques en su país natal. Desde entonces se comprometió con las causas de las mujeres, los agricultores y el medio ambiente. Su trabajo es tan importante que, además de ganarse el sobrenombre de “la Gandhi de las semillas”, se ha convertido en una de las voces más prominentes del Foro Social Mundial, que critica la globalización capitalista y, en especial, el régimen de agricultura industrial basado en patentes de semillas y especies animales.
Por su parte, Judith Butler desde el ámbito de la filosofía ha construido una obra que problematiza las reglas de género —qué significa ser hombre, mujer—, reglas en las que se excluye cualquier comportamiento que no sea “normal”. Su obra, que tiene como centro la aspiración de que todos los seres humanos florezcan tal como son, ha sido fundamental para las causas de las mujeres.
Al margen de los diferentes ámbitos en los que se han desenvuelto en el mundo, tanto Shiva como Butler representan una forma de producir conocimientos que está en el centro de las Orientaciones Fundamentales del ITESO (OFI): procurar que la excelencia académica sea socialmente relevante. O dicho de otra manera: que el conocimiento esté al servicio de la sociedad, especialmente de los grupos más excluidos.
La publicación también presenta un reportaje de Mario Gutiérrez Vega sobre los documentos que están en el Archivo General de la Nación y donde quedó registro del espionaje del que era objeto el ITESO desde su fundación y durante los 30 años siguientes.
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