México

Tren parlamentario

Prendiendo la mecha

La Cámara de Diputados comenzó a dar la bienvenida a la propuesta de reforma fiscal del senador Manlio Fabio Beltrones.  “Extraordinaria, porque significa un buen punto de partida para seguir construyendo la reforma integral”, así la recibió el diputado federal panista Mario Alberto Becerra Pocoroba.  “Mentirosa”, “tramposa”, “electorera”, así la toparon, ayer mismo, diputados de los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y del Trabajo (PT).

Y también la juzgaba con los mismos calificativos de los petistas el senador del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Torres Origel.

Entre las bienvenidas que le predigan a la propuesta de Beltrones está incluido un silencio cada vez más pesado de la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados.  

El PT y PRD se preguntaban ayer hasta dónde realmente va a llegar, en torno de este tema, el grupo parlamentario que pastorea Francisco Rojas Gutiérrez, uno de los alfiles priistas de San Lázaro, quien está claramente al servicio político de Enrique Peña Nieto, gobernador del Estado de México.

Y quién no sabe en este mundo que Peña y Beltrones han arreciado las patadas bajo la mesa por la candidatura del PRI a la Presidencia de la República, en la elección de 2012.

¿Qué contempla la iniciativa?

La reforma fiscal que ha planteado Beltrones está en San Lázaro desde la semana pasada, pero será este martes, en su sesión ordinaria, cuando el Pleno la dé por presentada y turnada a la Comisión que se erigiría en su dictaminadora, la de Hacienda, presidida por el panista Mario Alberto Becerra Pocoroba.

El manojo de cuartillas que Manlio Fabio pergeñó  en la argumentación de su propuesta fiscal, estará sujeta al vaivén de una gran polémica. He aquí:

Propone, fundamentalmente, bajar gradualmente el Impuesto Sobre la renta (ISR) a personas morales, de 30 a 25%; reducir el Impuesto al Valor Agregado (IVA) de 16 al 13 a través de un mecanismo que no tendrían al alcance todos los contribuyentes, no al menos los más pobres; y la inclusión de alimentos procesados en el pago de dicho impuesto al consumo.

Igual de controvertido que lo anterior es el hecho de que no se plantea que sean revisados algunos regímenes especiales, como el Régimen de Consolidación Fiscal, por cuya reforma tanto han pugnado estos años legisladores del PRD, PT y algunos desbalagados del PRI.

Este lunes, además del silencio pernicioso del PRI de San Lázaro en torno de la propuesta beltronista, llamaron la atención las actitudes distintas entre sí que plantearon los panistas Mario Alberto Becerra Pocoroba (diputado) y Ricardo Torres Origel (senador).

Distintas opiniones

“Es un extraordinario punto de partida”, declaró Rivera. Y apostillaba: “No significa que sea la propuesta perfecta, porque por ejemplo hay rubros que en ella no se tocan, como algunos regímenes especiales, como tampoco la Ley del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) ni el Código Fiscal de la Federación, pero sí es un cimiento, un principio importante”.

El senador panista Ricardo Torres Origel tildó desde de plano a la reforma de Beltrones como “falsa” y “engañosa”. Y se refería, concretamente a la reducción aparente del IVA de 16 a 13 por ciento.

“La propuesta sostiene la tasa generalizada de 16 % en alimentos y medicinas, salvo el caso de la canasta básica, y habla de que será el contribuyente quien a manera de incentivo, para obtener un descuento en el IVA de 3%, tendría que solicitar a la Secretaría de Hacienda la devolución de ese porcentaje”.

Y he aquí la “trampa”, insistía Origel, porque “para que todo lo anterior se pueda llevar a cabo, primero la persona deberá estar registrada como contribuyente ante Hacienda y, segundo, la dependencia federal después de revisar la veracidad de los documentos procederá a depositar, junto con la declaración anual, la devolución de 3% del IVA en su cuenta bancaria”.
Justamente en este punto, coincidieron, por separado, petistas y perredistas.

Mario di Costanzo, del PT, se preguntaba ayer cómo tendría que hacerle un productor del campo para la devolución de 3%, si ni siquiera tiene bancos cercanos a su vida de trabajo. “Lo que pretende Beltrones”, decía, “regalar otro negocio más a los bancos, que ganarán más comisiones todavía”.

El diputado perredista Vidal Llerenas Morales tildó la propuesta de marras, desde la entrada, de “regresiva”, porque “busca gravar la mayor parte de los alimentos y propone regresar parte del impuesto a las personas que tienen más ingresos; es decir, a quien tenga cuenta bancaria”.

Estaban, desde la víspera, abriendo de hecho un debate que se recrudecerá dentro y fuera de los ámbitos del Congreso de la Unión. Y dentro y fuera del PRI.
Beltrones estaba prendiendo la mecha.

Veremos qué gestos hace hoy el PRI de San Lázaro.
Síguenos en

Temas

Sigue navegando