México

‘‘Juanito’’: El desafuero

¡Quién lo dijera!

¡Quién lo dijera! Resulta que todos aquellos que hace cinco años fueron víctimas del “perverso” desafuero contra el “mesías tropical”; que denunciaron por todos los medios groseras venganzas políticas y el uso del poder contra los adversarios; que hicieron actos de fe contra los abusos de poder, son los mismos que hoy preparan la destitución de Rafael Acosta.

¡Quién lo hubiese imaginado! Picados de amnesia, los mismos a los que persiguió el foxiato bajo “la perversa” fórmula del “desafuero”, hoy preparan la “destitución” —equivalente al desafuero— del delegado de Iztapalapa. Más aún, utilizan idénticos argumentos. Además, lo acusan de “ratero, traidor y afectado de sus facultades mentales”, cuando hace meses era vitoreado por valiente, congruente y solvente líder social.

¿Ante qué estamos, cuando las reses de ayer son los carniceros de hoy? En efecto, ante la política al revés. Es decir, que en el caso “Juanito” el PRD de hoy y su clase política se comportan igual que ayer lo hicieron el Gobierno de Fox y su claque azul en el caso del desafuero del “mesías”. Lo curioso es que la guerra entre el guanajuatense y el tabasqueño enfrentó a la derecha y la izquierda. Y hoy guerrean “hermanos” de esa dizque izquierda.

Todos saben que el desafuero de abril de 2005 fue una venganza política de Fox contra su adversario tabasqueño. Pretendía sacarlo de la contienda presidencial. Hoy, la anunciada destitución de Rafael Acosta es una venganza política del tabasqueño y su claque, contra el Frankenstein que ellos crearon. Visto desde otra lente, Rafael Acosta pretende ser sacado de Iztapalapa, porque no obedece dictados e intereses del mesías. No es lo mismo, pero es igual.

Pero más allá de los intríngulis de la moderna versión del desafuero, la gran pregunta parece estar en otra dirección.

¿Quién, de los intelectuales, ideólogos y creyentes de esa izquierda, será el valiente de iniciar el proceso de autocrítica de una izquierda que en su vida cotidiana supera las prácticas de lo peor y lo que siempre cuestionó del PRI, y lo que siempre censuró de la derecha panista?

¿Dónde están las conciencias críticas y la autocrítica; dónde están aquellos ideólogos con solidez admirable que rebatían con argumentos e ideas los panfletos y los excesos del PRI y el PAN? ¿Qué hacen ante farsas como las del PRD, PT y Convergencia, ante vergonzosos teatros como el de “Juanito” y “Clarita”? ¿Será que ideólogos, intelectuales y próceres de la izquierda también se enamoraron de su secuestrador? Al tiempo.

En el camino

Nobleza obliga, una disculpa a todos. El senador que puntea las preferencias en Sinaloa se llama Mario López Valdez, no Velarde.
Síguenos en

Temas

Sigue navegando