Jalisco
Persiste autogobierno en Puente Grande
En el complejo estatal hay internos con privilegios, mientras otros ejercen el control sobre el resto de la población penitenciaria
GUADALAJARA, JALISCO (21/JUL/2015).- La figura de autogobierno en el complejo penitenciario de Puente Grande persiste. “Tenemos algunos grupos que controlan, pero es un control que hemos ido poco a poco recuperando... disminuyendo”, acepta la fiscal de Reinserción Social del Estado, Marisela Gómez Cobos.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ventiló en su informe de 2013 que existía un “deficiente control por parte de los servidores públicos dentro del Centro de Reinserción Social del Estado en relación a la seguridad y a las actividades que realizan los reclusos al interior, lo que da lugar a un autogobierno”. La administración estatal no ha logrado controlarlo.
La Comisión Nacional también detectó áreas de privilegios, de objetos y sustancias prohibidas, así como la existencia de internos que ejercen control sobre el resto de la población. A tres años, la situación no ha cambiado.
En la última revisión, en marzo de 2015, la Fiscalía confiscó tabletas electrónicas, 12 teléfonos celulares y bandas anchas de conexión a internet, más de 50 litros de tequila, cerveza, pastillas, polvo blanco, mariguana, objetos punzocortantes y hasta 106 mil pesos en efectivo.
La CNDH dio a conocer deficiencias en la supervisión del funcionamiento del Centro por parte del titular, al no haber un registro de la supervisión; mientras que el personal de seguridad y custodia es insuficiente para traslados, cubrir ausencias, vacaciones e incapacidades, así como presencia de cobros por parte de los custodios para protección, asignación de estancia y plancha para dormir.
La fiscal admite el déficit de personal de seguridad y reconoce que se las han tenido que arreglar apenas con dos mil custodios en todo el Estado.
El otro problema, que a decir de Gómez Cobos es una de las mayores deficiencias, es la sobrepoblación y hacinamiento: “En los 14 centros estatales tenemos 17 mil 600 reclusos… en Puente Grande tenemos 13 mil”.
Las cárceles de Jalisco mantienen el tercer lugar nacional en número de población recluida que excede la capacidad que tienen los complejos penitenciarios. Tan sólo el complejo de Puente Grande tiene más del doble de personas de las que caben.
Sobre el Reclusorio Metropolitano, con capacidad para mil 700 personas, aseguró que hay 200 reclusos, pero el centro sigue en construcción.
LA VOZ DEL EXPERTO
Despresurizar las cárceles, el gran pendiente
Luis Carlos Sáinz (experto en temas de seguridad).
Aunque el fin no debe ser la certificación sino buscar las mejores condiciones para que el principio de reinserción se cumpla, las autoridades estatales están obligadas a despresurizar sus cárceles, a conseguir más recursos para éstas, así como no dejar de lado otros problemas internos, como el autogobierno (las figuras de autoridad representadas por internos y no por los custodios).
El periodista Luis Carlos Sáinz, especialista en temas de seguridad, explica que si bien esta administración ha intentado restar poder al autogobierno, las tareas aún quedan a deber.
“No sólo se dejaba de hacer algo al respecto, sino que se les daba manga ancha. En esta administración se ha tratado de recuperar el control. Antes no había casetas y hoy ya hay custodios, aunque estén un poco de adorno, resguardando las zonas”.
Dice que, al final, contar con un sistema de gobierno paralelo al de la autoridad sí ha incidido en contener la violencia dentro de espacios con sobrecupo, y con presos de personalidades duras y distinta forma de pensar. “Claro que eso no justifica, pero ha permitido que haya cierta tranquilidad”.
Las 34 prisiones en todo el territorio estatal se han diseñado para contener a 10 mil personas. El corte más reciente, al pasado mes de mayo, es de más de 18 mil 300 personas.
¿La conclusión? Sí es obligado acelerar los esfuerzos para despresurizar, especialmente considerando la avanzada etapa de construcción en la que se encuentra el Reclusorio Metropolitano en Puente Grande.
Se le pregunta si hay un riesgo latente en Puente Grande, tomando en cuenta la coyuntura actual con el escape de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”. En su opinión: lo hay.
RIESGO POR FUGAS
Cambiarán protocolos de seguridad
Marisela Gómez Cobos reconoce que siempre existirá el riesgo de una fuga. Sin embargo, adelanta que se cambiarán y reforzarán las medidas de seguridad.
“Por instrucciones del fiscal Eduardo Almaguer ya iniciamos la revisión de los protocolos en los 14 centros del Estado”.
En este proceso se analizan los puntos vulnerables para definir “qué tenemos que reforzar, modificar, cuáles son los recorridos que tenemos que ampliar, y hasta dónde tenemos que ampliar nuestro margen de revisión (en las cárceles)”.
Una vez que se concluya la revisión de los protocolos se presentará una propuesta al fiscal, “para que pueda elevarla y dependiendo del diagnóstico ya analizaríamos qué debemos mejorar”.
Mientras tanto y después de la fuga de Joaquín Guzmán Loera del penal de Almoloya de Juárez, en Puente Grande se incrementaron los mecanismos de revisión e inspeccionan “todas las zonas perimetrales centímetro por centímetro… ya terminamos la revisión de los juzgados, la parte de los internos y revisamos perfectamente bien las protecciones”.
Entre los cambios que se plantearán destaca el reforzamiento de algunas áreas, la preparación y capacitación de los custodios y el cumplimiento de las normas de seguridad por parte del personal.
Sobre los fraccionamientos construidos a menos de un kilómetro de distancia de Puente Grande: conformados por mil 528 viviendas, la fiscal aseguró que conocen el exhorto del Congreso (para prohibir la urbanización en esa distancia) “pero será muy difícil (cumplirlo)”.
“Hay construcciones que ya estaban… son terrenos particulares, aquí en la parte de enfrente no hemos permitido las construcciones, pero finalmente ellos se van a amparar porque son sus terrenos”.
La Fiscalía ha detectado tres fraccionamientos que rodean al Centro de Reinserción Social del Estado: a 60 metros (atrás del Reclusorio Metropolitano) en el antiguo camino a El Salto, “ahí tenemos cuatro casas en construcción”; a 250 metros está otro fraccionamiento de interés social y uno más a 300 metros.
FUE "INAUGURADO" EN 2013 POR EMILIO GONZÁLEZ
Amparos frenan traslado de internos a nuevo reclusorio
Mientras los complejos penitenciarios en Puente Grande sufren por la sobrepoblación, en el Reclusorio Metropolitano, inaugurado en febrero de 2013, sólo tienen a 200 presos en un lugar habilitado para mil 700.
El motivo es por la tardanza en los trámites para reubicar a los internos y los amparos que han presentado algunos de ellos para no ser trasladados, informa el fiscal general del Estado, Eduardo Almaguer Ramírez.
“Hay un proceso para que (el nuevo reclusorio) funcione y sea utilizado debidamente como lo necesitamos”. Los traslados no son “sólo un tema de decir: ‘Los de allá vénganse para acá’. Lleva un proceso y algunos de ellos se amparan para no ser trasladados”.
Sin embargo, asegura, desde que tomó posesión en la titularidad de la Fiscalía General del Estado se reunió con la fiscal de Reinserción Social, Marisela Gómez Cobos, para revisar la situación de los reclusorios. “Hasta el momento ha estado todo en calma”, aunque Almaguer Ramírez reconoció que se debe reforzar la infraestructura de las penitenciarías.
Por su parte, la fiscal de Reinserción Social confirma que el Reclusorio Metropolitano aún está en construcción. Detalla que las constructoras siguen en el lugar y no acabarán, por lo menos, en este año, por la falta de recursos. Describe que el nuevo centro cuenta con un sistema de sensores de movimiento para detectar cualquier desplazamiento anormal en los terrenos, tanto en la superficie como en el subsuelo. También se tienen sensores para celulares. “En el Metropolitano se invirtió más en tecnología, los otros reclusorios datan de 34 años atrás, son antiguos, cuyos sistemas son muy diferentes. El Reclusorio Metropolitano es diferente: más moderno, tiene más sistemas de seguridad, pero todavía está en construcción”.
El reclusorio inaugurado el 13 de febrero de 2013, con un costo de mil 700 millones de pesos.
SOBREPOBLACIÓN PENITENCIARIA
Las cárceles de Jalisco mantienen el tercer lugar nacional en número de población recluida que excede la capacidad que tienen los complejos penitenciarios. Tan sólo el complejo de Puente Grande (el Centro de Reinserción Social, el Reclusorio Preventivo y el Femenil) tienen más del doble de reclusos de los que caben: cuenta con una capacidad total de seis mil 456 prisioneros, pero se encuentra superada con 13 mil 601 internos.
El Centro de Reinserción Social fue construido en los ochenta para dos mil 274 reclusos, pero alberga a seis mil; el Preventivo tiene capacidad para tres mil 800 y mantiene a siete mil internos; mientras que en el Reclusorio Femenil caben 382 mujeres, pero hay 601 reclusas, según datos de la Fiscalía General.
El Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) no se queda atrás: tiene capacidad para alojar a mil reclusos, pero en 2013 tenía mil 589. Hace cuatro meses la fiscal Gómez Cobos, no hizo más que aceptar que la población carcelaria ha aumentado en casi dos mil personas en lo que lleva de la actual administración.
Reconoce que una de las principales deficiencias del sistema es la sobrepoblación y hacinamiento, aunque la novedad es que en lo que va del año la sobrepoblación se ha reducido en 400 personas. “Por un lado, los beneficios a través de los jueces de ejecución de penas que ya empezaron a trabajar normalmente y entonces estamos obteniendo más beneficios; por otro lado nos ha bajado la población en donde ya se han implementado los juicios orales, eso también nos está ayudando mucho para que la gente que deba quedarse se quede y la que no, salga con las medidas cautelares”. El otro problema es la falta de personal. Hay dos mil custodios para vigilar 17 mil 600 reclusos.
ESCALA DEL 1 AL 10
Evaluación del núcleo estatal de Puente Grande
La calificación del centro de readaptación social federal en Puente Grande es de 7.7.
Rubros evaluados Promedio
Aspectos que garantizan la 6.59
integridad física y moral del interno
Aspectos que garantizan una estancia digna 8.5
Condiciones de gobernabilidad 8.72
Reinserción social del interno 7.93
Grupos de internos con requerimientos específicos 6.75
Calificación promedio de los centros penitenciarios de Jalisco
2006 7.08
2007 6.88
2008 7.65
2009 7.96
2010 8.37
2011 7.54
2012 7.22
2013 7.00
Centro federal (Cefereso)
La calificación general del Centro de Reinserción
Social del Estado es de 6.6.
Rubros evaluados Promedio
Aspectos que garantizan la 5.67
integridad física y moral del interno
Aspectos que garantizan una estancia digna 7.97
Condiciones de gobernabilidad 5.31
Reinserción social del interno 7
Grupos de internos con requerimientos específicos 7.33
Fuente: Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2013. Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Comparativo
Cefereso (cárcel federal):
Capacidad 1,021 presos
Población actual 1,589 presos
Población penitenciaria
(internos) en Jalisco
2001 6,734
2006 13,591
2015 17,600
Complejo estatal de Puente Grande
Centro Capacidad Población
Reclusorio Preventivo 3,800 7,000
Centro de Reinserción Social 2,274 6,000
Femenil 382 601
Total 6,456 13,601
Fuente: Fiscalía General (2015).
Equipamiento del Metropolitano
Cuatro mil dispositivos electrónicos.
900 puertas automáticas.
500 cámaras.
Ingresos con sistemas de rayos X.
Lectura de tarjetas.
Sistemas de barreras y bolardos.
Sistemas de intercomunicación (para menor uso de radios y celulares).
Monitoreo que permite conocer si se enciende un teléfono celular y que identifica a la compañía operadora.
Evaluación del núcleo estatal de Puente Grande
Escala del 1 al 10
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¿Qué opina del autogobierno que prevalece en el núcleo penitenciario de Puente de Grande?
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La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ventiló en su informe de 2013 que existía un “deficiente control por parte de los servidores públicos dentro del Centro de Reinserción Social del Estado en relación a la seguridad y a las actividades que realizan los reclusos al interior, lo que da lugar a un autogobierno”. La administración estatal no ha logrado controlarlo.
La Comisión Nacional también detectó áreas de privilegios, de objetos y sustancias prohibidas, así como la existencia de internos que ejercen control sobre el resto de la población. A tres años, la situación no ha cambiado.
En la última revisión, en marzo de 2015, la Fiscalía confiscó tabletas electrónicas, 12 teléfonos celulares y bandas anchas de conexión a internet, más de 50 litros de tequila, cerveza, pastillas, polvo blanco, mariguana, objetos punzocortantes y hasta 106 mil pesos en efectivo.
La CNDH dio a conocer deficiencias en la supervisión del funcionamiento del Centro por parte del titular, al no haber un registro de la supervisión; mientras que el personal de seguridad y custodia es insuficiente para traslados, cubrir ausencias, vacaciones e incapacidades, así como presencia de cobros por parte de los custodios para protección, asignación de estancia y plancha para dormir.
La fiscal admite el déficit de personal de seguridad y reconoce que se las han tenido que arreglar apenas con dos mil custodios en todo el Estado.
El otro problema, que a decir de Gómez Cobos es una de las mayores deficiencias, es la sobrepoblación y hacinamiento: “En los 14 centros estatales tenemos 17 mil 600 reclusos… en Puente Grande tenemos 13 mil”.
Las cárceles de Jalisco mantienen el tercer lugar nacional en número de población recluida que excede la capacidad que tienen los complejos penitenciarios. Tan sólo el complejo de Puente Grande tiene más del doble de personas de las que caben.
Sobre el Reclusorio Metropolitano, con capacidad para mil 700 personas, aseguró que hay 200 reclusos, pero el centro sigue en construcción.
LA VOZ DEL EXPERTO
Despresurizar las cárceles, el gran pendiente
Luis Carlos Sáinz (experto en temas de seguridad).
Aunque el fin no debe ser la certificación sino buscar las mejores condiciones para que el principio de reinserción se cumpla, las autoridades estatales están obligadas a despresurizar sus cárceles, a conseguir más recursos para éstas, así como no dejar de lado otros problemas internos, como el autogobierno (las figuras de autoridad representadas por internos y no por los custodios).
El periodista Luis Carlos Sáinz, especialista en temas de seguridad, explica que si bien esta administración ha intentado restar poder al autogobierno, las tareas aún quedan a deber.
“No sólo se dejaba de hacer algo al respecto, sino que se les daba manga ancha. En esta administración se ha tratado de recuperar el control. Antes no había casetas y hoy ya hay custodios, aunque estén un poco de adorno, resguardando las zonas”.
Dice que, al final, contar con un sistema de gobierno paralelo al de la autoridad sí ha incidido en contener la violencia dentro de espacios con sobrecupo, y con presos de personalidades duras y distinta forma de pensar. “Claro que eso no justifica, pero ha permitido que haya cierta tranquilidad”.
Las 34 prisiones en todo el territorio estatal se han diseñado para contener a 10 mil personas. El corte más reciente, al pasado mes de mayo, es de más de 18 mil 300 personas.
¿La conclusión? Sí es obligado acelerar los esfuerzos para despresurizar, especialmente considerando la avanzada etapa de construcción en la que se encuentra el Reclusorio Metropolitano en Puente Grande.
Se le pregunta si hay un riesgo latente en Puente Grande, tomando en cuenta la coyuntura actual con el escape de Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”. En su opinión: lo hay.
RIESGO POR FUGAS
Cambiarán protocolos de seguridad
Marisela Gómez Cobos reconoce que siempre existirá el riesgo de una fuga. Sin embargo, adelanta que se cambiarán y reforzarán las medidas de seguridad.
“Por instrucciones del fiscal Eduardo Almaguer ya iniciamos la revisión de los protocolos en los 14 centros del Estado”.
En este proceso se analizan los puntos vulnerables para definir “qué tenemos que reforzar, modificar, cuáles son los recorridos que tenemos que ampliar, y hasta dónde tenemos que ampliar nuestro margen de revisión (en las cárceles)”.
Una vez que se concluya la revisión de los protocolos se presentará una propuesta al fiscal, “para que pueda elevarla y dependiendo del diagnóstico ya analizaríamos qué debemos mejorar”.
Mientras tanto y después de la fuga de Joaquín Guzmán Loera del penal de Almoloya de Juárez, en Puente Grande se incrementaron los mecanismos de revisión e inspeccionan “todas las zonas perimetrales centímetro por centímetro… ya terminamos la revisión de los juzgados, la parte de los internos y revisamos perfectamente bien las protecciones”.
Entre los cambios que se plantearán destaca el reforzamiento de algunas áreas, la preparación y capacitación de los custodios y el cumplimiento de las normas de seguridad por parte del personal.
Sobre los fraccionamientos construidos a menos de un kilómetro de distancia de Puente Grande: conformados por mil 528 viviendas, la fiscal aseguró que conocen el exhorto del Congreso (para prohibir la urbanización en esa distancia) “pero será muy difícil (cumplirlo)”.
“Hay construcciones que ya estaban… son terrenos particulares, aquí en la parte de enfrente no hemos permitido las construcciones, pero finalmente ellos se van a amparar porque son sus terrenos”.
La Fiscalía ha detectado tres fraccionamientos que rodean al Centro de Reinserción Social del Estado: a 60 metros (atrás del Reclusorio Metropolitano) en el antiguo camino a El Salto, “ahí tenemos cuatro casas en construcción”; a 250 metros está otro fraccionamiento de interés social y uno más a 300 metros.
FUE "INAUGURADO" EN 2013 POR EMILIO GONZÁLEZ
Amparos frenan traslado de internos a nuevo reclusorio
Mientras los complejos penitenciarios en Puente Grande sufren por la sobrepoblación, en el Reclusorio Metropolitano, inaugurado en febrero de 2013, sólo tienen a 200 presos en un lugar habilitado para mil 700.
El motivo es por la tardanza en los trámites para reubicar a los internos y los amparos que han presentado algunos de ellos para no ser trasladados, informa el fiscal general del Estado, Eduardo Almaguer Ramírez.
“Hay un proceso para que (el nuevo reclusorio) funcione y sea utilizado debidamente como lo necesitamos”. Los traslados no son “sólo un tema de decir: ‘Los de allá vénganse para acá’. Lleva un proceso y algunos de ellos se amparan para no ser trasladados”.
Sin embargo, asegura, desde que tomó posesión en la titularidad de la Fiscalía General del Estado se reunió con la fiscal de Reinserción Social, Marisela Gómez Cobos, para revisar la situación de los reclusorios. “Hasta el momento ha estado todo en calma”, aunque Almaguer Ramírez reconoció que se debe reforzar la infraestructura de las penitenciarías.
Por su parte, la fiscal de Reinserción Social confirma que el Reclusorio Metropolitano aún está en construcción. Detalla que las constructoras siguen en el lugar y no acabarán, por lo menos, en este año, por la falta de recursos. Describe que el nuevo centro cuenta con un sistema de sensores de movimiento para detectar cualquier desplazamiento anormal en los terrenos, tanto en la superficie como en el subsuelo. También se tienen sensores para celulares. “En el Metropolitano se invirtió más en tecnología, los otros reclusorios datan de 34 años atrás, son antiguos, cuyos sistemas son muy diferentes. El Reclusorio Metropolitano es diferente: más moderno, tiene más sistemas de seguridad, pero todavía está en construcción”.
El reclusorio inaugurado el 13 de febrero de 2013, con un costo de mil 700 millones de pesos.
SOBREPOBLACIÓN PENITENCIARIA
Las cárceles de Jalisco mantienen el tercer lugar nacional en número de población recluida que excede la capacidad que tienen los complejos penitenciarios. Tan sólo el complejo de Puente Grande (el Centro de Reinserción Social, el Reclusorio Preventivo y el Femenil) tienen más del doble de reclusos de los que caben: cuenta con una capacidad total de seis mil 456 prisioneros, pero se encuentra superada con 13 mil 601 internos.
El Centro de Reinserción Social fue construido en los ochenta para dos mil 274 reclusos, pero alberga a seis mil; el Preventivo tiene capacidad para tres mil 800 y mantiene a siete mil internos; mientras que en el Reclusorio Femenil caben 382 mujeres, pero hay 601 reclusas, según datos de la Fiscalía General.
El Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) no se queda atrás: tiene capacidad para alojar a mil reclusos, pero en 2013 tenía mil 589. Hace cuatro meses la fiscal Gómez Cobos, no hizo más que aceptar que la población carcelaria ha aumentado en casi dos mil personas en lo que lleva de la actual administración.
Reconoce que una de las principales deficiencias del sistema es la sobrepoblación y hacinamiento, aunque la novedad es que en lo que va del año la sobrepoblación se ha reducido en 400 personas. “Por un lado, los beneficios a través de los jueces de ejecución de penas que ya empezaron a trabajar normalmente y entonces estamos obteniendo más beneficios; por otro lado nos ha bajado la población en donde ya se han implementado los juicios orales, eso también nos está ayudando mucho para que la gente que deba quedarse se quede y la que no, salga con las medidas cautelares”. El otro problema es la falta de personal. Hay dos mil custodios para vigilar 17 mil 600 reclusos.
ESCALA DEL 1 AL 10
Evaluación del núcleo estatal de Puente Grande
La calificación del centro de readaptación social federal en Puente Grande es de 7.7.
Rubros evaluados Promedio
Aspectos que garantizan la 6.59
integridad física y moral del interno
Aspectos que garantizan una estancia digna 8.5
Condiciones de gobernabilidad 8.72
Reinserción social del interno 7.93
Grupos de internos con requerimientos específicos 6.75
Calificación promedio de los centros penitenciarios de Jalisco
2006 7.08
2007 6.88
2008 7.65
2009 7.96
2010 8.37
2011 7.54
2012 7.22
2013 7.00
Centro federal (Cefereso)
La calificación general del Centro de Reinserción
Social del Estado es de 6.6.
Rubros evaluados Promedio
Aspectos que garantizan la 5.67
integridad física y moral del interno
Aspectos que garantizan una estancia digna 7.97
Condiciones de gobernabilidad 5.31
Reinserción social del interno 7
Grupos de internos con requerimientos específicos 7.33
Fuente: Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2013. Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Comparativo
Cefereso (cárcel federal):
Capacidad 1,021 presos
Población actual 1,589 presos
Población penitenciaria
(internos) en Jalisco
2001 6,734
2006 13,591
2015 17,600
Complejo estatal de Puente Grande
Centro Capacidad Población
Reclusorio Preventivo 3,800 7,000
Centro de Reinserción Social 2,274 6,000
Femenil 382 601
Total 6,456 13,601
Fuente: Fiscalía General (2015).
Equipamiento del Metropolitano
Cuatro mil dispositivos electrónicos.
900 puertas automáticas.
500 cámaras.
Ingresos con sistemas de rayos X.
Lectura de tarjetas.
Sistemas de barreras y bolardos.
Sistemas de intercomunicación (para menor uso de radios y celulares).
Monitoreo que permite conocer si se enciende un teléfono celular y que identifica a la compañía operadora.
Evaluación del núcleo estatal de Puente Grande
Escala del 1 al 10
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