Uber seguía a sus conductores que usaban iPhone: NYT
Indican que la idea de violar las reglas de Apple para prevenir fraudes surgió en el 2014
GUADALAJARA, JALISCO (24/ABR/2017).- En el 2014, Travis Kalanick, director ejecutivo de Uber, ordenó que se rastreara a los conductores de la aplicación que usaran un iPhone en Estados Unidos para prevenir fraudes, seguimiento que continuaba incluso después de borrar la aplicación, reveló esta semana un reportaje del New York Times.
A inicios del 2015, Kalanick fue citado en las oficinas centrales de Apple, luego de que su director Tim Cook supo de las violaciones a la privacidad que estaba realizando Uber.
"Me enteré de que has roto algunas de nuestras reglas. Detente o la aplicación de Uber será vetada de la App Store", le habría dicho Cook a Kalanick según el NYT.
Ante el temor de dejar ir a millones de usuarios de Apple y de las pérdidas económicas que representaría, Kalanick accedió a detener el rastreo.
El NYT apunta que la idea de violar las reglas de Apple para prevenir fraudes surgió en el 2014, pues en ese año enfrentaba muchos casos de engaño en China.
Puesto que Uber daba un incentivo económico a los choferes que realizaban más viajes, los conductores comenzaron a comprar iPhones robados en los que creaban cuentas de usuarios falsos para solicitarse viajes ellos mismos.
Para detenerlo, los ingenieros de Uber usaron la práctica de "fingerprinting" en la que le asignaban un código único a cada iPhone que no podía ser eliminado aún cuando al teléfono le borraran todos sus datos, lo que rompe las reglas de privacidad de Apple.
Uber aplicó esta técnica a choferes de Estados Unidos que utilizaban un iPhone con sistema operativo anterior al iOS 9 para así rastrearlos aunque borraran la aplicación de Uber.
Y para pasar inadvertido a los radares de Apple, Kalanick le pidió a sus programadores que crearan un tipo de cerca digital en una locación determinada, por lo que los empleados en Cupertino no podían detectar la violación.
Sin embargo, Tim Cook se enteró gracias a otros trabajadores de Apple ubicados en otras oficinas.
"En su empeño de convertir a Uber en la aplicación líder de servicios de transporte, Kalanick abiertamente ha roto muchas reglas, deteniéndose sólo cuando lo descubren", apunta la investigación del NYT.
"Se ha burlado de las regulaciones y se ha valido de los vacíos legales para ganar ventaja en el negocio, creando una empresa presente en más de 70 países y con un valor de más de 70 billones de dólares."
En un extenso reportaje, el diario de Nueva York revela que desde el inicio de Uber en el 2010 en San Francisco California, Kalanick ignoró las leyes y regulaciones en la ciudad que indicaban que los servicios de taxi debían tener ciertor permisos, una base y otras medidas de seguridad y concluye que el director ejecutivo de Uber no se detiene ante ningún límite para expandir su negocio.
EL INFORMADOR / MARÍA JOSÉ VILLANUEVA