Internacional
Gerry Adams recupera su libertad
Peter Robinson, principal ministro norirlandés, calificó de propias de matones las acusaciones de Adams
La PSNI indicó que puso en libertad a “un hombre de 65 años”, quien queda ahora “pendiente de un informe” que se enviará a la Fiscalía de la provincia británica.
La Policía norirlandesa remitirá a la Fiscalía un informe para dejar en sus manos la decisión de imputarle en relación con el asesinato de una mujer católica perpetrado por el ya inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA) en 1972.
Según los expertos, la PSNI puede tardar un tiempo en elaborar ese informe, que los fiscales estudiarán en detalle antes de tomar cualquier decisión, por lo que se prevé que el caso no se cerrará en breve.
Adams afrontó su cuarta jornada consecutiva de interrogatorio en una comisaría de Antrim, Norte de Belfast, donde se presentó voluntariamente el miércoles para colaborar con la PSNI en la investigación de un crimen en el que niega su implicación.
Jean McConville, viuda de 37 años y madre de 10 hijos, fue asesinada por el IRA por espiar para las fuerzas británicas, una acusación que resultó ser falsa, y su cuerpo no fue hallado hasta 2003, cuatro años después de que la banda reconociese su autoría y diese pistas sobre el paradero.
El arresto de Adams enfureció al Sinn Féin, que acusó a “elementos oscuros” de la Policía norirlandesa PSNI de conspirar, sin tener pruebas, para dañar el proceso de paz y las aspiraciones electorales del partido nacionalista en los comicios locales y europeos de este mes.
Su “número dos” y viceministro principal norirlandés, Martin McGuinness, advirtió que su partido estaría dispuesto a “revaluar” su apoyo a la PSNI si se acusa a Adams por ese asesinato, lo que podría crear una grave crisis en el proceso de paz.
Gerry Adams criticó la manera en la que se manejó su arresto y sostuvo que enviaba “una mala señal” para el proceso de paz.
“Aquellos que autorizaron (este arresto) no tomaron la buena decisión estratégica”, declaró Adams en el Balmoral Hotel en Belfast poco después de su liberación. “Es absolutamente una mala señal”.
Por su parte, el ministro principal norirlandés, el unionista Peter Robinson, calificó de “despreciables” las acusaciones vertidas por el Sinn Féin contra las fuerzas del orden.
Robinson denunció que esas “amenazas” constituyen un intento de “chantaje” desde “las más altas instancias del Sinn Féin”, un comportamiento que el dirigente protestante tachó de “despreciable” y propio de “matones”.
El arresto, un motivo de tensión política
La PSNI obtuvo el viernes una orden judicial para extender en otras 48 horas el primer periodo de detención, un plazo que expiró ayer a las 19.00 horas, con lo que Adams recuperó su libertad.
Según declararon a la BBC fuentes cercanas a Adams, el líder republicano fue interrogado durante 17 horas al día, si bien, según estas fuentes, la Policía no tenía nuevas pruebas contra él, motivo por el que el enfado del Sinn Féin fue en aumento y su apoyo hacia la PSNI se vio comprometido.
Tras la firma del acuerdo del Viernes Santo en 1998, que puso fin a casi 30 años de conflicto armado, el proceso de paz avanzó con dificultades por las reticencias del Sinn Féin para reconocer la autoridad de la Policía y el sistema judicial de la provincia.
Cuando por fin dio ese significativo paso en 2007 se sentaron las bases para que la formación republicana y el DUP, liderado entonces por el reverendo Ian Paisley, decidieran formar un Gobierno de poder compartido.
Robinson recordó que la PSNI debe poder actuar con “total libertad” para “investigar todas las pruebas” y para decidir, “libre de cualquier consideración política”, si un “sospechoso debe ser acusado o no”.
FRASE
"Decidí acudir a la Policía para acabar con la avalancha de especulaciones en los medios de comunicación, que era parte de una campaña sostenida, maliciosa e incierta para vincularme a este caso "
Gerry Adams, al salir de la Policía.
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