Internacional
Bahréin decreta estado de emergencia
El monarca, anunció que se podría recurrir al mando de las fuerzas de seguridad, así como a la Guardia Nacional para que se respete el mando de emergencia
MANAMA, BAHRÉIN (15/MAR/2011).- Las autoridades de Bahréin decretaron el estado de emergencia en todo el país para intentar acallar las protestas políticas que se vienen desarrollando en este reino desde hace un mes, informó la agencia oficial bareiní, BNA.
La medida, que durará tres meses, se suma a la llegada de ayer, de tropas enviadas por los países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) para apoyar a las fuerzas de seguridad bareiníes en el mantenimiento del orden en ese pequeño reino del golfo Pérsico.
La decisión fue adoptada por el rey de Bahréin, Hamad bin Isa al Jalifa, para hacer frente a los disturbios "que han puesto en peligro los bienes y la vida de los ciudadanos" de ese país del golfo Pérsico, con un millón de habitantes.
El monarca, según la agencia oficial, ordenó al mando de las Fuerzas de Defensa que adopten "las medidas necesarias para aplicar" el decreto de estado de emergencia en todo el país, de tan sólo 760 kilómetros cuadrados.
Los militares bareiníes podrán recurrir a las fuerzas de seguridad, la Guardia Nacional y "otras fuerzas, si fuera necesario", para que se respete el estado de emergencia que fue aprobado por el monarca.
El decreto lamenta que los disturbios registrados en Bahréin hayan afectado la vida y los bienes de los bareiníes, y sostiene que los hospitales se han convertido "en focos de terror e intimidación".
El anuncio se produce mientras continuaban los choques entre manifestantes de la oposición y fuerzas policiales, que estallaron el 14 de febrero pasado al calor de las rebeliones populares de Túnez y Egipto.
Un soldado bareiní murió al haber sido atropellado por un vehículo, pero este incidente no parece estar relacionado con las manifestaciones. Durante estas protestas públicas, la oposición de Bahréin, un país con mayoría chií gobernado por una minoría suní, exige la instauración de una monarquía parlamentaria, con una nueva Constitución que permita al pueblo elegir un gobierno y un Parlamento independiente.
La medida, que durará tres meses, se suma a la llegada de ayer, de tropas enviadas por los países miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) para apoyar a las fuerzas de seguridad bareiníes en el mantenimiento del orden en ese pequeño reino del golfo Pérsico.
La decisión fue adoptada por el rey de Bahréin, Hamad bin Isa al Jalifa, para hacer frente a los disturbios "que han puesto en peligro los bienes y la vida de los ciudadanos" de ese país del golfo Pérsico, con un millón de habitantes.
El monarca, según la agencia oficial, ordenó al mando de las Fuerzas de Defensa que adopten "las medidas necesarias para aplicar" el decreto de estado de emergencia en todo el país, de tan sólo 760 kilómetros cuadrados.
Los militares bareiníes podrán recurrir a las fuerzas de seguridad, la Guardia Nacional y "otras fuerzas, si fuera necesario", para que se respete el estado de emergencia que fue aprobado por el monarca.
El decreto lamenta que los disturbios registrados en Bahréin hayan afectado la vida y los bienes de los bareiníes, y sostiene que los hospitales se han convertido "en focos de terror e intimidación".
El anuncio se produce mientras continuaban los choques entre manifestantes de la oposición y fuerzas policiales, que estallaron el 14 de febrero pasado al calor de las rebeliones populares de Túnez y Egipto.
Un soldado bareiní murió al haber sido atropellado por un vehículo, pero este incidente no parece estar relacionado con las manifestaciones. Durante estas protestas públicas, la oposición de Bahréin, un país con mayoría chií gobernado por una minoría suní, exige la instauración de una monarquía parlamentaria, con una nueva Constitución que permita al pueblo elegir un gobierno y un Parlamento independiente.
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