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Revancha y redención en 'La Voz...México'

Un nuevo contendiente tapatío se suma a los elegidos este fin de semana

GUADALAJARA, JALISCO (24/MAY/2016).- Si algo prometió “La Voz... México” en su quinta temporada es que las nuevas voces a descubrir dejarían un buen sabor de boca en el público y se está logrando.

Aunque todavía no concluye la etapa de audiciones, el concurso ha revelado a personajes que prometen marcar estilo no sólo por la técnica ante el micrófono, sino por las historias que hay detrás de cada participante.

Laura Caro es la sonorense que, si bien ya era conocida por participar en otro concurso una década atrás, retorna a los escenarios buscando una nueva oportunidad de demostrar su talento, al igual que César D’alessio, hijo de una gran estrella femenina, que intentará ganarse el reconocimiento del público por mérito propio.

El sueño sigue

Pese haber sido la cuarta expulsada de la primera generación de “La Academia” y tratar de consolidar una carrera lejos de los reflectores, Laura Caro retoma el camino sumándose a “La Voz... México” gracias a J. Balvin, coach que tras analizar su interpretación decidió integrarla a su equipo luego de que la ex académica mostrará un nuevo rango de interpretación como muestra de la experiencia que ha tenido en Europa bajo su propuesta pop fusionada con blues y jazz.

“Decidí aventurarme, hice casting como todos los demás. Ahora soy una mujer renovada, tengo 32 años y puedo presumir que tengo cierta experiencia cantando, quiero mostrarme con una nueva imagen, canto diferente a como lo hacía antes”.

Aunque cantar en público no es algo nuevo para Laura Caro, la cantante confiesa que los nervios se apoderaron de ella al instalarse sobre el escenario de La Voz y saber que cuatro estrellas internacionales juzgarían su empeño y así, determinar parte de su futuro y hacer frente a las críticas que su pasado pueda desatar.

“La respuesta del público fue buena, ya estoy curada de espantos de las críticas negativas, todo lo que viene es bueno para mí. He estado trabajando en mi música, con el lanzamiento de ‘Que te vaya bien’, aprovechando las oportunidades”.

Guadalajara sigue presente

Apasionado por la música regional, Enrique García es un tapatío más que logra incorporarse a las batallas de “La Voz... México” y que para su sorpresa Gloria Trevi es la coach que ha decidido encaminarlo por el sendero del éxito.

El tapatío reconoce que sus intentos por sumarse a “La Voz... México” surgen desde hace cinco años, pero que por diversas circunstancias no había podido participar plenamente y demostrar que su voz tiene un estilo especial que puede desatar la locura del público.

“En aquellos tiempos tenía 12 años y me decían que no era posible, pero uno de mis sueños ha sido estar en un reality show pero estaba en una edad en la que no podía participar ni en las versiones para niños ni para adultos, pero seguí insistiendo hasta que llegó esta oportunidad”.

Y aunque su preferencia por el género banda supondría que Enrique cautivaría rápidamente y con mayor facilidad a Los Tigres del Norte, el participante se dice sorprendido de la confianza que Gloria Trevi ha puesto en él para explotar los atributos de su voz y arriesgarse a nuevos ritmos y estilos.

Lucha propia

Emprender su carrera de manera autónoma es el reto de César D’alessio, hijo de la llamada “Leona dormida” Lupita D’alessio, que ha decidido a quitarse los estigmas de la fama de su madre y demostrar que su talento es capaz de marcar camino propio teniendo la ayuda de una plataforma como “La Voz... México”.

“Me propusieron que audicionara pero yo nunca he sido muy fan de los reality de canto, pero en ese momento me enteré que iba a ser papá y hubo algo que me motivó a probar esta oportunidad”.

Aunque César ha sido de los participantes que ha logrado girar la silla de los cuatro coaches, el cantante destaca que decidirse por sumarse al equipo de J. Balvin tiene que ver con las expectativas y planes que visualiza a un futuro ante el alcance internacional que el intérprete de “Ginza” tiene en el mundo de la música.

“La Voz es un escenario que impone muchísimo, eso lo puede decir cualquier artista. Tienes que respirar y tranquilizarte, no soy el cantante más experimentado pero he trabajado lo suficiente para poder manejar la situación, solo esperar que los coaches volteen en la silla, cada segundo de la canción se hace eterno”.

César expresa que llevar el nombre de su mamá es un arma de dos filos que, por un lado genera confianza del talento en su ADN y por otro se cree que llega por influencias.
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