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Ang Lee rompe todas las reglas con nuevo filme
El cineasta tuvo que insistir mucho para conseguir llevar a la pantalla la novela de Yann Martel
"Hay algunos trucos clásicos en el cine: nunca hacer una película con animales, con niños, con agua o con 3D. Las hemos ignorado todas", bromeó el realizador estadounidense de origen taiwanés durante la proyección de la cinta en la apertura de la 50 edición del Festival de Cine de Nueva York.
El cineasta, que cuenta con dos Oscar (Mejor Director por "Brokeback Mountain" en 2006 y Mejor Película Extranjera en 2001 por "Tigre y dragón") tuvo que insistir mucho para conseguir llevar a la pantalla la novela de Yann Martel, editada en 2001.
La historia, centrada en un joven náufrago indio llamado Pi que intenta sobrevivir en un bote salvavidas en compañía de un tigre de Bengala, supuso, en primer lugar, un problema de casting. Además, el tema central de la película -la búsqueda de Dios- tampoco forma parte de los clásicos de Hollywood.
La primera respuesta de Lee llegó con Suraj Sharma, un desconocido de 17 años llegado desde Delhi para acompañar a su hermano a la audición, y que resultó ser el elegido entre tres mil candidatos.
"Era mi hermano. Él tenía que ir a la audición y yo vine con él", declaró el protagonista este viernes en Nueva York.
Para su película, Lee pensó a lo grande, creando una producción internacional financiada por Hollywood que parece tan fantástica como la misma historia.
La primera parte de la película fue filmada en Pondichery (India). Alrededor de cinco mil 500 figurantes fueron contratados para las suntuosas escenas de la vida en las calles y para las ceremonias religiosas.
El cocinero francés: Gerard Depardieu
Después, mientras la segunda mitad de la película de dos horas se desarrolla en el mar, Lee decidió filmar en Taichung, en su Taiwán natal. Es allí donde armó su depósito gigante de 70 metros por 30, capaz de albergar 6,4 millones de litros de agua. Un generador de olas artificiales fue concebido especialmente para la película. "Creamos nuestro propio Hollywood", declaró Lee.
De ahí surgen las espectaculares escenas que se prestan especialmente bien a la experiencia 3D, donde se pueden percibir peces voladores proyectados fuera de la pantalla, así como viajes surrealistas de la cámara a unas profundidades marinas pobladas de medusas luminosas y ballenas.
Tras haber encontrado a su protagonista y a un buen número de refuerzos, entre ellos un cocinero francés y grosero interpretado por Gerard Depardieu, a Lee sólo le faltaba encontrar al principal actor secundario: el tigre.
El animal, que lleva el nombre de Richard Parker, es el resultado, en gran medida, de los efectos especiales. Sin embargo, todos los rasgos físicos importantes que fueron la base para los efectos se obtuvieron de cuatro tigres bien reales.
El adiestrador de animales Thierry Le Portier, a quien se le deben especialmente las escenas de "Gladiator" que implicaban a grandes felinos, seleccionó a tres de estos tigres en Francia y al otro en Canadá.
Según Lee, un gran macho francés que responde al nombre de King es el modelo principal para Richard Parker, mientras que dos hembras, también francesas, fueron utilizadas para modelar los movimientos más agresivos del tigre.
Los episodios más suaves, como cuando Richard Parker sufre mareos en el mar, los modeló el tigre canadiense, extrañamente cariñoso.
Sharma, que interpreta a Pi, aseguró que enseguida se sintió "en casa" en el depósito de agua. Para su papel, se entrevistó con el exnáufrago y autor de la novela "Adrift" (A la deriva), Steve Callahan.
Su interpretación del íntimo vínculo surgido entre su personaje aterrorizado y un tigre hambriento fue filmada, sin embargo, en presencia de un animal invisible.
"El barco estaba totalmente vacío", bromeó el actor. "No había ningún tigre".
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