Economía

Apreciaciones divididas ante probable aumento del ISN

Ni entre empresarios ni entre organismos en obras sociales hay unanimidad en apoyar un Impuesto Sobre Nómina de 2.3 por ciento

GUADALAJARA, JALISCO.- El proyecto para aumentar de 2.0 a 2.3% el Impuesto Sobre Nómina (ISN) en Jalisco, que ahora se encuentra en estudio en el Congreso del Estado para incorporar en el Presupuesto de Egresos estatal para 2009 la constitución de un fideicomiso que administre un estimado de entre 236 millones y 270 millones de pesos para el próximo año, obedece a un intento de proteger a organizaciones asistenciales que son vistas con simpatía por los empresarios del grupo promotor, que están sufriendo una fuerte caída en sus ingresos por el rigor que recientemente ha adquirido el fisco y, sobre todo, porque las condiciones de desaceleración económica propician una baja significativa en donativos de empresas y personas.

El proyecto para incrementar el ISN y crear un fondo de recursos es impulsado por la Fundación Social del Empresariado Jalisciense AC (Fejal), con el nombre de Iniciativa para la Prosperidad Social de Jalisco, que también promueve que sean empresarios, y no funcionarios públicos, los que gobiernen el destino del fondo.

La fundación está integrada por los reconocidos empresarios Luis Aranguren Tréllez (Arancia y Corn Products International), César de Anda Molina (Avicar), Julio García Briseño (Laboratorios Julio), Ramiro Gaxiola Oropeza (Genexport), José Luis González Íñigo (constructor, presidente de la Junta de Gobierno del Instituto Jalisciense de Asistencia Social, IJAS), Carlos González Lozano (Calzado Dione), Salvador Ibarra Álvarez del Castillo (Constructora San Carlos), Arturo Jiménez Bayardo (Laboratorios Sophia), José Palacios Jiménez (Estíbaliz Joyas, presidente del Consejo de Directores de Guadalajara 20-20), Jaime Reyes Robles (director del Instituto para el Desarrollo Sostenible del Tecnológico de Monterrey, campus Guadalajara), Juan Mario Sahagún (desarrollo turístico Hacienda San Francisco, en Tapalpa) y Lorenzo Servitje Montull (Grupo Bimbo).

“Hay que observar que en el grupo promotor del proyecto se encuentran hombres de negocios muy destacados, identificados con defender el compromiso social del empresariado, pero también con proyectos de acción social asistencialistas, a menudo vinculados con instituciones conservadoras de inspiración católica”, dice un empresario jalisciense que pide el anonimato para evitarse conflictos en el gremio.

Advierte que todos tienen reconocimiento público en convocar a atender las graves carencias sociales, que han manifestado públicamente su compromiso social con diversas causas, pero que también acumulan poder e influencia para impulsar su causa, que en muchos casos abruma a otros empresarios y hasta a los organismos de representación patronal.

“Su fin es bueno, eso hay que resaltarlo, pues buscan apoyar nobles causas sociales, como el combate a las adicciones a drogas o la atención a viejos en situación de abandono. Lo que es más cuestionable es que el avance de su proyecto sea elevando impuestos”, explica.

La promoción del proyecto en espacios políticos y empresariales genera declaraciones de aceptación y aprobación, gracias al prestigio y la influencia que ejercen, pero en corto muchos expresan dudas. Entre ellas, la posibilidad de que en el futuro el incremento al ISN sea absorbido para el gasto ordinario del Gobierno, como ya ocurre con lo que ya se capta por ese impuesto, que legalmente sólo debe destinarse a capacitación de trabajadores, pero que no sucede así.

Pero la oposición más contundente se manifiesta al consultar a pequeños y medianos empresarios, que contundentemente se oponen a que se incremente el impuesto, así sea para necesidades sociales. “Ya no podemos pagar más. Nos están orillando a irnos a la economía informal por los márgenes de utilidad reducidos que ya tenemos”, responden cuando se les explica la iniciativa y se les pregunta su opinión.

Al interior de las cámaras y organismos empresariales, muchos cuestionan el proyecto. En la reunión semanal del Consejo de Cámaras Industriales de Jalisco (CCIJ) del 27 de agosto, siete de los 30 dirigentes agrupados manifestaron su oposición al proyecto. Este tipo de resistencias ha hecho que dirigentes como Javier Gutiérrez Treviño (CCIJ), Mario Gutiérrez Treviño (Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Comce Occidente) y Pablo Lemus Navarro (Centro Empresarial de Jalisco, CEJ), hayan modificado sus posturas iniciales hacia el proyecto, de aprobación contundente a asentimiento con asegures, reconociendo que no hay consenso claro a favor de la medida entre sus representados y sugiriendo, incluso, que ese fondo se constituya con recursos gubernamentales.

Entre legisladores estatales, responsables de aprobar o rechazar legalmente la medida, tampoco hay completa aceptación. Algunos han reconocido el riesgo de que el proyecto, por más que esté justificado socialmente, genere reprobación de empresarios. El presidente de la Mesa Directiva del Congreso, Enrique Alfaro, ha sido enfático en que los promotores deben probar que hay consenso general a favor del proyecto, para considerar su aprobación.

Orillados por el fisco

En la mesa de debate que convocó EL INFORMADOR hace dos semanas (cuyo resultado se publicó el 26 de agosto), José Luis González Íñigo expuso la urgencia de atender la caída en el flujo de donativos de empresas por la reforma fiscal de 2007. “El Gobierno ha buscado atacar la evasión fiscal con el IETU (Impuesto Empresarial a Tasa Única), pero esto ha afectado los donativos, que se han reducido”.

Luis Gómez Chávez, socio director del Área Fiscal de Deloitte Guadalajara, confirmó este aspecto. “Con el Impuesto Sobre la Renta (ISR) no había límite para que las empresas otorgaran donativos deducibles de impuestos. Esto cambió al reformarse el artículo 31, fracción I, de la ley del ISR en 2008, que puso un requisito adicional. Ahora los donativos de los contribuyentes no pueden rebasar 7% de la utilidad fiscal para el ejercicio”.

Esta limitación se refleja en el IETU, que implica la obligación de cumplir con lo reglamentado para ISR.

De acuerdo con lo que se maneja en el Instituto Jalisciense de Asistencia Social (IJAS), el volumen de donativos a organismos acreditados en este órgano descentralizado del Gobierno de Jalisco ya se resiente desde hace dos meses, y esperan que se vuelva más severo el próximo año. “Los afiliados nos dicen que ya se ha caído la colaboración en 30%”, puntualiza Ángela Orozco Martínez, psicóloga y empresaria, quien dirige la Comisión de Asistencia del IJAS y que junto con González Íñigo se han encargado de promover el proyecto de la Fejal entre las 570 asociaciones afiliadas, como tabla de salvación para las obras que realizan.

Estela de Alba, directora de Mi Gran Esperanza –una de las tres organizaciones mencionadas por Fejal como posibles beneficiarias del fideicomiso que se quiere constituir con los fondos del ISN adicional, junto con ONI y MAMA— también expresó su preocupación por el severo descenso en los donativos que están enfrentando, y manifestó que han asistido a reuniones del IJAS, donde se les ha explicado la situación y la conveniencia de impulsar la iniciativa para crecer el ISN y establecer el fideicomiso, administrado mayoritariamente por empresarios. Ángela Orozco, quien es parte de la Junta de Gobierno del IJAS, reconoció que eso ha pasado, y que José Luis González Íñigo ha sido uno de los integrantes de la Junta de Gobierno más activos en ello.

En el resumen del informe financiero de 2007, el Movimiento de Apoyo a Menores Abandonados (MAMA), el organismo da cuenta de la caída en recursos. “¡Pum! En el 2007, mucho menos dinero (…) ¿Qué pasó y, sobre todo, cómo sobrevivimos? Es claro, la misión de MAMA, sus programas y servicios, cuestan más que los ingresos fijos. Es claro que no hemos podido multiplicar nuestra base de donantes fijos. Los donantes que caen del cielo son los que salvan a MAMA (Lo mismo pasa en la mayoría de las instituciones), que llegan como una bendición, pero no son predecibles o planificables. En el 2007 no nos visitó nuestro ‘ángel de la guarda’ que en el 2006 había llegado con 761 mil pesos”.

En 2007, MAMA dice haber recibido ingresos totales por cinco millones 111 mil 313 pesos y operar con un déficit presupuestal de un millón 395 mil 499 pesos.

Para este trabajo se buscó a Rogelio Padilla, director de MAMA, y a Renee Hubart, directora de ONI, pero no fue posible contactarlos.


Para el Gobierno estatal, la asistencia social no es prioridad

En el IJAS hay afiliados 570 organismos de acción social, en diferentes programas y atención de población. Ángela Orozco, integrante de la Junta de Gobierno de la institución, reconoce que la situación es tan grave que ella misma está impulsando el sorteo de una casa, con el fin de allegarse recursos que no están recibiendo por los conductos tradicionales.

Dice que está en total acuerdo con el proyecto promovido por José Luis González Íñigo y el resto de los integrantes de la Fejal. “¿Y los organismos afiliados al IJAS?”, se le pregunta. “Bueno, la mayoría está de acuerdo”, responde. Se le explica entonces que el Congreso del Estado está pidiendo un consenso claro en Jalisco para impulsar el proyecto, que todavía no se aprecia. “No bueno, es que no están informados. La verdad es que 100% de los organismos en el IJAS estamos de acuerdo con que se haga el fideicomiso”, expresa.
Explica que a ellos les han dicho que para el próximo año podría haber 270 millones de pesos por incremento del ISN, administrados en un fideicomiso.

Desconoce lo que ha pasado con otros impuestos, como la tenencia a autos nuevos y seminuevos, aprobada para financiar los Juegos Olímpicos de México 68, que se quedó como permanente, o que hace 20 años se aprobó en Jalisco el Impuesto Sobre Nómina a las empresas, exclusivamente para financiar necesidades de los trabajadores. En ambos casos, los ingresos se han integrado al gasto ordinario de los gobiernos.

Expresa que reciben apoyos económicos del Gobierno federal, a través de la Sedesol, pero no del Gobierno estatal. “¿Sabe de los excedentes y los recursos económicos aplicados por el Gobierno estatal de manera discrecional?”, se le pregunta, a lo que contesta que no. Asegura que en el IJAS no han recibido ningún apoyo económico del Estado. “La asistencia social no es una prioridad para el actual Gobierno” de Emilio González Márquez, concluye, matizando que esto último es un comentario personal.


Más que fideicomiso, piden transparencia en los recursos públicos

Los empresarios que impulsan el fideicomiso para financiar organizaciones asistenciales con el aumento del Impuesto Sobre Nóminas (ISN) en Jalisco están buscando proteger a las asociaciones y entidades con las que simpatizan, pero no beneficiarán a todo el conjunto de organismos privados que atienden necesidades sociales en el Estado, dice Lourdes Angulo Salazar, del Centro de Apoyo para el Movimiento Popular de Occidente (Campo), un organismo que realiza proyectos sociales entre mujeres y campesinos.

“Estos empresarios sólo dan dinero de sus negocios a sus propias organizaciones”. Ahora que el fisco se los está restringiendo, explica, porque ya no son deducibles de impuestos, están promoviendo este fideicomiso, pero sólo están pensando en las obras que ellos ya impulsan.

Angulo asegura que hay muchas organizaciones de acción social en diferentes aspectos que no están de acuerdo con el proyecto que se ha dado a conocer a través de la prensa, porque el interés del proyecto se destinará sólo a algunas, pero que prefieren no hablar o pronunciarse en público porque pueden cerrarse puertas para apoyos gubernamentales o privados.

“Para apoyar a la gente necesitada no creo que haga falta el fideicomiso, sino una política pública clara en favor de las necesidades de la sociedad, y para ello lo que debe haber es transparencia en el uso de todos los recursos públicos para este fin, pues hay mucha corrupción en este sector”, asegura Angulo.


TABLA

Para apoyos, 1.7% del presupuesto del IJAS

Ingresado y ejercido en el IJAS en 2008*
(Cifras en pesos)

Total de Ingresos 18’163,700

Total de Egresos 15’851,500
Remuneraciones al personal 10’410,000 (65.7%**)
Rectoría Administrativa 1’087,000 (6.9%)
Materiales y suministros 985,700 (6.2%)
Descuentos por Pensiones Vehículos 857,700 (5.4%)
Otros gastos 835,100 (5.3%)
Servicios generales 734,000 (4.6%)
Rectoría Asistencial 673,200 (4.2%)
Subsidios a organismos afiliados 140,000 (0.9%)
Organismos subsidiados 128,700 (0.8%)

* Hasta marzo.
** Porcentaje del total de egresos.
FUENTE: IJAS
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