Deportes
Vetan a ganadería queretana de la Nuevo Progreso
Análisis ''post mortem'' aplicados a los bureles de Jaral de Peñas revelan astas manipuladas
GUADALAJARA, JALISCO (21/FEB/2014).- El Ayuntamiento de Guadalajara emitió una notificación a la ganadería queretana Jaral de Peñas y un veto de cuatro años en la Nuevo Progreso debido a que los exámenes ''post mortem'', aplicados por parte de médicos veterinarios del Ayuntamiento tapatío, revelaron, según el parte de la notificación, que las astas de los toros marcados con los números 139, 169, 175 y 143, fueron manipuladas.
El cronista y crítico taurino que colabora en esta casa editorial, Francisco Baruqui, en su espacio “De los Toros...con Verdad” publicado el 9 de febero bajo el título ''Sobró cantidad...faltó calidad'', señaló las sospechas del despuntado de varios toros; ayer, su hipótesis se confirmó.
La notificación afirma que los pitones de los toros fueron manipulados por la mano del hombre, y confirma que se utilizaron escofinas y lijas. Cabe resaltar que la autoridad municipal, en este caso el juez de plaza, no hizo anotación alguna de la duda que podría existir sobre los pitones de los astados, siendo él el encargado, desde días antes a la corrida, de aprobar la integridad de los toros.
Dicha acción infringe los artículos 64, párrafo III y 68, párrafo I, del Reglamento vigente para el Municipio de Guadalajara, considerándose como faltas graves. El análisis fue realizado por los veterinarios del municipio de Guadalajara, Luis Roberto Bourguetts y José Francisco Rodríguez.
Si bien el Ayuntamiento, mediante la autoridad correspondiente, ya emitió dicha notificación a la ganadería; la empresa de la Plaza Nuevo Progreso, hasta el cierre de esta edición, no estaba enterada de dicho veto, por lo cual no podían emitir una postura.
El cronista y crítico taurino que colabora en esta casa editorial, Francisco Baruqui, en su espacio “De los Toros...con Verdad” publicado el 9 de febero bajo el título ''Sobró cantidad...faltó calidad'', señaló las sospechas del despuntado de varios toros; ayer, su hipótesis se confirmó.
La notificación afirma que los pitones de los toros fueron manipulados por la mano del hombre, y confirma que se utilizaron escofinas y lijas. Cabe resaltar que la autoridad municipal, en este caso el juez de plaza, no hizo anotación alguna de la duda que podría existir sobre los pitones de los astados, siendo él el encargado, desde días antes a la corrida, de aprobar la integridad de los toros.
Dicha acción infringe los artículos 64, párrafo III y 68, párrafo I, del Reglamento vigente para el Municipio de Guadalajara, considerándose como faltas graves. El análisis fue realizado por los veterinarios del municipio de Guadalajara, Luis Roberto Bourguetts y José Francisco Rodríguez.
Si bien el Ayuntamiento, mediante la autoridad correspondiente, ya emitió dicha notificación a la ganadería; la empresa de la Plaza Nuevo Progreso, hasta el cierre de esta edición, no estaba enterada de dicho veto, por lo cual no podían emitir una postura.
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