Deportes
Oscar Pistorius, al alcance de una presea
El corredor sudafricano clasifica en una cuarteta que avanzó con un récord nacional
DAEGU, COREA DEL SUR (02/SEP(2011).- Oscar Pistorius, el corredor que compite con prótesis, se clasificó el jueves a su primer final de una gran cita, al largar como la primera posta del relevo 4x400 de Sudáfrica, en el Mundial de Atletismo.
La cuarteta avanzó con un récord nacional y se asoma con pretensiones de subir al podio.
Pistorius hizo un buen primer relevo al correr en el difícil carril interior. Le pasó el bastón a Oftentse Mogawane, quien le dio la ventaja transitoria al equipo, que al final quedó tercero con tiempo de 2 minutos y 59.21 segundos.
“Es increíble ser parte de uno de los cuatro nombres que conforman la lista de un grupo que estableció un récord nacional”, dijo Pistorius. “Estoy muy orgulloso. Ser finalista me pone mucho más contento”.
Ya había sido notable el haber avanzado a las semifinales de los 400 con sus protésis de fibra de carbono, pero el jueves resultó ser un desempeño mucho mejor para el corredor, a quien le amputaron las piernas cuando era un bebé.
“Esperábamos clasificarnos, pero este récord nacional es un premio adicional”, dijo su compañero Willem De Beer.
Estados Unidos y Jamaica encabezaron las eliminatorias, con Sudáfrica en el tercer lugar. Esta es una señal de que Pistorius podría aspirar a una medalla para hoy.
Dos latinoamericanos suben al podio
Javier Culson tiene otra medalla, aunque no fue el oro que anhelaba. Catherine Ibargüen consiguió otro bronce para Colombia. Estados Unidos deliró al darse un baño dorado durante un lapso de media hora.
Fue un jueves vibrante para Latinoamérica en el Mundial de aAtletismo, gracias a los podios de Culson en los 400 metros con vallas e Ibargüen en el salto triple.
Estados Unidos se despegó al frente del cuadro de medallas tras embolsarse tres de oro, cada una con notas sobresalientes. La más inesperada fue la que atrapó Jennifer Barringer Simpson, la primera mujer estadounidense que gana los 1,500 desde Mary Decker-Slaney en 1983. Jesse Williams se consagró en el salto de altura, prueba en la que habían pasado dos décadas desde la última conquista de un atleta de su país, la de Charles Austin en Tokio 1991. Lashinda Demus cerró el triplete de la noche al imponerse en los 400 con vallas femeninos con el tercer tiempo más rápido de la historia: 52.47 segundos.
La cuarteta avanzó con un récord nacional y se asoma con pretensiones de subir al podio.
Pistorius hizo un buen primer relevo al correr en el difícil carril interior. Le pasó el bastón a Oftentse Mogawane, quien le dio la ventaja transitoria al equipo, que al final quedó tercero con tiempo de 2 minutos y 59.21 segundos.
“Es increíble ser parte de uno de los cuatro nombres que conforman la lista de un grupo que estableció un récord nacional”, dijo Pistorius. “Estoy muy orgulloso. Ser finalista me pone mucho más contento”.
Ya había sido notable el haber avanzado a las semifinales de los 400 con sus protésis de fibra de carbono, pero el jueves resultó ser un desempeño mucho mejor para el corredor, a quien le amputaron las piernas cuando era un bebé.
“Esperábamos clasificarnos, pero este récord nacional es un premio adicional”, dijo su compañero Willem De Beer.
Estados Unidos y Jamaica encabezaron las eliminatorias, con Sudáfrica en el tercer lugar. Esta es una señal de que Pistorius podría aspirar a una medalla para hoy.
Dos latinoamericanos suben al podio
Javier Culson tiene otra medalla, aunque no fue el oro que anhelaba. Catherine Ibargüen consiguió otro bronce para Colombia. Estados Unidos deliró al darse un baño dorado durante un lapso de media hora.
Fue un jueves vibrante para Latinoamérica en el Mundial de aAtletismo, gracias a los podios de Culson en los 400 metros con vallas e Ibargüen en el salto triple.
Estados Unidos se despegó al frente del cuadro de medallas tras embolsarse tres de oro, cada una con notas sobresalientes. La más inesperada fue la que atrapó Jennifer Barringer Simpson, la primera mujer estadounidense que gana los 1,500 desde Mary Decker-Slaney en 1983. Jesse Williams se consagró en el salto de altura, prueba en la que habían pasado dos décadas desde la última conquista de un atleta de su país, la de Charles Austin en Tokio 1991. Lashinda Demus cerró el triplete de la noche al imponerse en los 400 con vallas femeninos con el tercer tiempo más rápido de la historia: 52.47 segundos.
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