Cultura
Libro muestra la grandeza de George Orwell
La mayor parte de los escritos de esta obra, son de largo aliento, en los que el autor hace gala de su capacidad de observación sobre múltiples temas
CIUDAD DE MÉXICO.- Expresiones fuertes, afirmaciones contundentes y aseveraciones construidas con una evidente inteligencia, claridad de ideas y desinterés por quedar bien, además de actuales, son algunas de las bondades que contiene el libro "Matar a un elefante y otros escritos" , de George Orwell, que recién apareció en el mercado editorial mexicano.
Publicado por el Fondo de Cultura Económica (FCE) y Turner, el ejemplar bellamente editado, de 389 páginas, reúne una serie de artículos y ensayos, la mayor parte de ellos de largo aliento, en los que el autor de "1984" y "La rebelión en la granja" hace gala de su capacidad de observación sobre múltiples temas, tamizada por la inteligencia profunda.
El libro recoge algunos de los textos que el escritor británico publicó semanalmente en el impreso "Tribune" , bajó el epígrafe de "A mi antojo" , teniendo como uno de sus atractivos principales la aparición por primera vez en español de "La política y la lengua inglesa".
Pero sobre todo, a lo largo de las lecturas que se ofrecen, 10 para ser exactos, la inteligencia y profundidad de ideas de Orwell (1903-1950) , cuyo nombre real era Eric Blair, se disfrutan y llevan de la mano al lector de principio a fin de cada texto sin el deseo de pestañear.
Así, se pueden encontrar observaciones acuciosas, visionarias, y aseveraciones como "yo había tomado ya la determinación de que el imperialismo era mala cosa" , o "a menudo me pregunté si algunos de ellos (los birmanos) de que lo hice (matar a un elefante) tan sólo para no quedar como un idiota".
También, "una de las experiencias esenciales de la guerra es la absoluta imposibilidad de huir de los repugnantes olores de origen humano" , o "se tiende a olvidar que un soldado cerca de la línea de frente suele pasar demasiada hambre, o demasiado miedo, o demasiado frío, o, sobre todo, demasiadas fatigas, para que le importen las causas políticas que hayan originado la guerra".
Igualmente, "en lo que respecta a las masas populares, los extraordinarios movimientos pendulares de la opinión que hoy en día se producen, las emociones que se abren y cierran como si de grifos se trataran son resultado de la hipnosis a las que las ha sometido la prensa y la radio" o "la impresión que se tiene es que la verdad pasa a ser mera falacia en cuanto es el enemigo quien la expresa alto y claro".
Asimismo, "a los piadosos, desde el Papa hasta los yoguis de California, les entusiasma esa idea de `cambio espiritual', mucho más tranquilizador desde su punto de vista, que un cambio del sistema económico vigente".
Otras de las ideas de Orwell recogidas en este libro, y que al igual que las anteriores pueden ser aplicables a la actualidad, son: " nuestra civilización está en decadencia, y nuestra lengua -según este argumento- participa inevitablemente del desplome general ", o " pensar con claridad es por fuerza un primer paso hacia la regeneración política".
Además de " en nuestra época, es una verdad muy extendida que la escritura de textos políticos es escritura de mala calidad " y " el gran enemigo de una lengua clara es la falta de sinceridad".
Es por todo lo anterior que Arcadi Espada, autor del prólogo del libro, señala: " creo que sus lecciones, algunas realmente visionarias, nos ayudarán durante mucho tiempo... Porque es en esa literatura donde se puede apreciar uno de los rasgos del clásico. La voz. La voz de Orwell se oye, íntimo siempre, hasta en la arenga". En fin, un libro indispensable.
Publicado por el Fondo de Cultura Económica (FCE) y Turner, el ejemplar bellamente editado, de 389 páginas, reúne una serie de artículos y ensayos, la mayor parte de ellos de largo aliento, en los que el autor de "1984" y "La rebelión en la granja" hace gala de su capacidad de observación sobre múltiples temas, tamizada por la inteligencia profunda.
El libro recoge algunos de los textos que el escritor británico publicó semanalmente en el impreso "Tribune" , bajó el epígrafe de "A mi antojo" , teniendo como uno de sus atractivos principales la aparición por primera vez en español de "La política y la lengua inglesa".
Pero sobre todo, a lo largo de las lecturas que se ofrecen, 10 para ser exactos, la inteligencia y profundidad de ideas de Orwell (1903-1950) , cuyo nombre real era Eric Blair, se disfrutan y llevan de la mano al lector de principio a fin de cada texto sin el deseo de pestañear.
Así, se pueden encontrar observaciones acuciosas, visionarias, y aseveraciones como "yo había tomado ya la determinación de que el imperialismo era mala cosa" , o "a menudo me pregunté si algunos de ellos (los birmanos) de que lo hice (matar a un elefante) tan sólo para no quedar como un idiota".
También, "una de las experiencias esenciales de la guerra es la absoluta imposibilidad de huir de los repugnantes olores de origen humano" , o "se tiende a olvidar que un soldado cerca de la línea de frente suele pasar demasiada hambre, o demasiado miedo, o demasiado frío, o, sobre todo, demasiadas fatigas, para que le importen las causas políticas que hayan originado la guerra".
Igualmente, "en lo que respecta a las masas populares, los extraordinarios movimientos pendulares de la opinión que hoy en día se producen, las emociones que se abren y cierran como si de grifos se trataran son resultado de la hipnosis a las que las ha sometido la prensa y la radio" o "la impresión que se tiene es que la verdad pasa a ser mera falacia en cuanto es el enemigo quien la expresa alto y claro".
Asimismo, "a los piadosos, desde el Papa hasta los yoguis de California, les entusiasma esa idea de `cambio espiritual', mucho más tranquilizador desde su punto de vista, que un cambio del sistema económico vigente".
Otras de las ideas de Orwell recogidas en este libro, y que al igual que las anteriores pueden ser aplicables a la actualidad, son: " nuestra civilización está en decadencia, y nuestra lengua -según este argumento- participa inevitablemente del desplome general ", o " pensar con claridad es por fuerza un primer paso hacia la regeneración política".
Además de " en nuestra época, es una verdad muy extendida que la escritura de textos políticos es escritura de mala calidad " y " el gran enemigo de una lengua clara es la falta de sinceridad".
Es por todo lo anterior que Arcadi Espada, autor del prólogo del libro, señala: " creo que sus lecciones, algunas realmente visionarias, nos ayudarán durante mucho tiempo... Porque es en esa literatura donde se puede apreciar uno de los rasgos del clásico. La voz. La voz de Orwell se oye, íntimo siempre, hasta en la arenga". En fin, un libro indispensable.
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