GUADALAJARA, JALISCO (04/MAR/2017).- Imaginemos por un momento la calma del desierto. Ese silencio que solo es perturbado por las rachas de viento. El sol está sobre nuestras cabezas, pero el clima del fin del invierno aún permite disfrutar este paraje de manera placentera.Frente a nosotros una magnífica pista de pruebas, diseñada en forma de un circuito y un óvalo con curvas de inclinación de 35 grados. De repente se escucha, a lo lejos, un rugido, aullido, zumbido, conjuntados en un solo sonido. Ahí está, el monstruo aparece saliendo de la curva peraltada a casi 300 kilómetros por hora. Éxtasis.La espera había terminado, tanto para nosotros que fuimos a Phoenix a manejarlo, como para los entusiastas mexicanos adinerados. El monstruo nipón, el ya famoso Godzilla, está presente.El Nissan GT-R, ese monstruo devorador de asfalto llega por primera vez a México con el propósito de conquistar, o más bien, despedazar el mercado de los superdeportivos en nuestro país, propósito que hasta se antoja demasiado fácil para la bestia sobre ruedas que es.Es un monstruo, sí, pero uno que mezcla el estilo del doctor Jekyll y el señor Hyde con el de ese reptil imparable que es Godzilla. Un caballero refinado que se puede convertir en un devorador de asfalto, con el toque de un botón o algo de presión sobre un pedal.Fuimos invitados al centro de pruebas de Nissan en Arizona, Estados Unidos, un excelente complejo de pruebas que cuenta con prácticamente todas las condiciones de manejo que un vehículo puede experimentar. Obviamente que, para las pruebas de manejo que íbamos a hacer en el Nissan GT-R, también había disponible una pista de circuito, un óvalo de muy alta velocidad y una plancha de concreto para pruebas de aceleración, frenado y slalom.Este super deportivo es un coupé de cuatro plazas con un altísimo desempeño. Y cuando hablamos de desempeño nos referimos a algo solo equiparable con no más de 10 rivales de producción en serie a escala mundial.El Nissan GT-R está propulsado por un motor ensamblado a mano. Es un seis cilindros en “V”, con 3.8 litros de desplazamiento que genera 565 caballos de fuerza y un torque de 463 libras-pie, gracias a su sistema de sobrealimentación con dos turbocargadores gemelos. Esta potencia puede no impresionar a muchos, sobre todo si vemos otras motorizaciones en este segmento, pero la magia del monstruo no proviene solo de su motor, sino de un sistema de tracción en las 4 ruedas y la manera impresionante de cómo se pone en el pavimento cada unidad de torque y potencia que este motor genera.Esto se hace a través de neumáticos Dunlop de alto desempeño, con especificaciones 255/40ZR20 adelante y 285/35ZR20 en el extremo trasero. La mecánica del Nissan GT-R se complementa con una transmisión automática de 6 velocidades y doble embrague, así como frenos desarrollados en conjunto con la prestigiosa casa Brembo.Las especificaciones mecánicas del Nissan GTR hacen que el auto sea capaz, muy capaz. De hecho, es mucho más capaz que la mayoría de sus competidores. Prácticamente no existe retraso en la entrega de potencia del motor turboalimentado. Cuenta con tres modos de manejo que modifican la calibración de motor, suspensión, transmisión y el sistema de tracción integral que son: “Save” o ecológico; Normal y modo “R”, siendo este ultimo el más radical y divertido.Éste modo fue el que nos permitió lograr aceleraciones de 0 a 100 kilómetros por hora en menos de 3 segundos y velocidades tope cercanas a los 300 kilómetros por hora, gracias a la magnífica pista, pero también gracias a un coeficiente aerodinámico de 0.26, lo que es menor que sus competidores (un Porsche 911 tiene 0.30, por ejemplo).Las curvas son sus presasMas allá de aceleración y frenadas, el desempeño más sobresaliente del GT-R es en las curvas. El manejo y las sensaciones de control que transmite son excepcionales. Es un auto que permite llevarlo a su límite y no sentir la intrusión de las asistencias electrónicas de una manera molesta. Al contrario, hasta los conductores experimentados las agradecemos, dado que exprime la potencia del auto a niveles que ningún ser humano sin dicho apoyo lo podría hacer.La parte noble de este monstruo es la gran facilidad que ofrece para convivir con él en el día a día. Las comodidades son más que suficientes para un deportivo: manejo cómodo en modo normal y condiciones de calle; los asientos forrados en piel; un excelente sistema de sonido firmado por Bose, etc. Incluso los asientos traseros son funcionales, aunque para trayectos cortos, pero acomodan a dos personas de tamaño promedio.Celebramos la decisión más que esperada de Nissan de haber traído el GT-R a México. Y lo hará con un precio aproximado de 2.6 millones de pesos, que es inferior a autos con menor desempeño. Con una capacidad y resultados superiores a casi toda su competencia además de una tradición legendaria, podemos decir que nos no nos asusta tener a Godzilla devorando nuestros caminos. De hecho nos alegra tener a este monstruo entre nosotros.
