Mujer al volante

GUADALAJARA, JALISCO (12/JUN/2010).- Siempre tuve la clara idea de que los espacios de accesorios eran recintos exclusivos para las mujeres, hoy me queda claro que no, pues encontré el espacio ideal en el que los amantes de los automóviles –sexo indistinto- pueden darse a la tarea de adquirir cualquier cosa imaginable para su vehículo.

El interés de la visita se dio, como se dan muchas cosas, motivado por una necesidad; los limpiabrisas de mi auto ya requerían el cambio y justo me percaté de ello el día de la dichosa tormenta (el martes).

Sin más ya estaba siendo acosada por los vendedores de los cruceros, quienes ofrecían hacer el cambio por 120 pesos, muy razonable, pensé, entonces cuánto costarán estos artefactos en una tienda bien establecida, que paga impuestos, personal y prestaciones. De la duda vino la oportunidad de hacer escala en uno de estos sitios que ya con anterioridad había visto.

Estacioné el coche y ya estaba en una gran cochera llena de accesorios: parrillas, canastillas, estribos. Una vez que llegué la mostrador me preguntaron en qué podían ayudarme, estaba atónita porque en ese momento la lista de necesidades de equipamiento de mi auto se limitaban a los limpiabrisas, pero después de ver la gran oferta de productos – a meses sin intereses- desde luego quería saber qué tanto podían hacer por mi, y por mi auto en este lugar.

Amablemente Javier –detrás del mostrador- me mostró los limpiabrisas y los colocó en un santiamén, por una módica cantidad de 100 pesos, después recordé que necesitaba unos tapetes nuevos porque se avecinan las lluvias y son éstos los que protegen la tapicería; enseguida recordé que podía ponerle una burrera al auto, que desde luego serviría para protegerme de todos aquellos personajes que no saben estacionarse y que de adelante para atrás golpean los autos.

La lista de necesidades creció  y creció, los presupuestos también fueron llegando, luego atrajeron mi atención los equipos de sonido;  en la vitrina había muchos estéreos de diferentes marcas con precios que iban de los 500 a los cinco mil 900 pesos.

Los diferentes tipos de polarizados para evitar que el sol haga estragos en la piel de los brazos, un sinfín de recomendaciones que puede arreglar un tapicero… la lista de lo que aquí se puede encontrar es muy larga, porque si no lo tienen a la vista seguramente te lo consiguen o te dan alternativas prácticas para resolver las necesidades del usuario.

Me mostraron una amplia gama de alarmas con sistemas muy novedosos y controles estilo BMW, las cuales estaban en promoción. En fin la lista de artículos para embellecer el auto es casi inagotable pues además te ofrecen el servicio de tapicería.

En el concepto femenino esta es una boutique completa pero con especialidad en autos, aquí vas a encontrar todo lo que el auto necesita para verse bien, si crees que no lo necesita la invitación está hecha pues en la ciudad hay varias, muchas de ellas “woman friendly”.

Anímate a descubrir todas las posibilidades de accesorizar el auto, aunque sólo sea para comprar unos limpiabrisas, seguramente saldrás de ahí con algo más y con energía renovada para darle un nuevo aspecto al auto.