La perfección cada vez más cercana

GUADALAJARA, JALISCO (10/DIC/2011).- Qué difícil describir el BMW de la Serie 3, sin caer en una interminable listado de adjetivos. Porque si ya era el mejor sedán de su categoría, con la nueva generación abre aún más la distancia sobre sus rivales directos, refrendando con creces el título que sostiene desde hace muchos años.

Al llegar a su sexta generación, luego de haber vendido más de 12 millones de unidades desde su lanzamiento en 1975, el Serie 3 celebra creciendo en tamaño, ya que es 9.3 centímetros más largo que su antecesor, al igual que un centímetro más alto (nueve milímetros, para ser exactos). La distancia entre ejes es igualmente mayor, en cinco centímetros y todo esto va a favor de los pasajeros del asiento posterior, que ahora disponen de estos 50 milímetros para las piernas y la altura para la cabeza de los pasajeros atrás creció ocho bienvenidos milímetros.

La cajuela también fue beneficiada con el mayor tamaño y el coche dispone ahora de un espacio de carga de 480 litros en lugar de los 460 anteriores.

Por fuera, el auto se percibe más sólido y dinámico. En su límite frontal, tiene una inclinación muy fuerte hacia abajo, desde el cofre, que le confiere una gran deportividad. La parte trasera se mantiene dentro lo que está haciendo BMW recientemente, con calaveras asimétricas entre las laterales y la tapa de la cajuela. Por su forma, el auto se ve más ancho que el anterior y esto le ayuda.

Más espacio, mismos terminados

El interior usa los mismos materiales a los que ya nos tiene acostumbrados BMW. Son todos buenos y la construcción es perceptiblemente correcta. Sin embargo, algunas marcas de volumen ya se ven tan bien como éste Serie 3, por lo que la marca bávara aún debe terminados de mayor lujo, que muestren coherencia entre a superioridad de ingeniería que el coche claramente tiene sobre sus competidores.

Lo que sí es mucho mejor es la pantalla del sistema de navegación, que ahora es de alta definición. Ya hay cámara de reversa y otras amenidades que, claro, varían según la versión, que ahora son tres: Sport, Luxury y Modern.

El coche gana equipos que antes no estaban disponibles en su Serie, sólo en los de mayor categoría de la marca. Uno de ellos es el “Head-Up Display”, que proyecta en el parabrisas información importante como la velocidad, el sistema de navegación e incluso, dependiendo del nivel de información disponible en cada lugar, puede mostrar los límites de velocidad permitidos en cada tramo del camino, al igual que si es no permitido rebasar, por ejemplo. Además, la proyección es en colores, no monocromática como en la mayoría de los vehículos que usan sistemas similares. También las cámaras instaladas en las laterales de las salpicaderas delanteras son una opción que antes no existía en el Serie 3.

Ingeniería genial

Para sostener lo que mejora estéticamente, BMW hace lo que mejor sabe para poner en la calle el nuevo Serie 3. La plataforma es nueva y también llegan nuevos motores. Uno de ellos tendrá cuatro cilindros, 2.0 litros y 245 caballos de fuerza. Esta máquina viene a sustituir el seis cilindros en línea de 3.0 litros y 218 caballos del 325. La entrega de potencia del turbo sencillo de doble entrada es muy lineal y apenas se percibe cuando entra en acción. En México, al respirar el aire que produce, su aumento de potencia se percibirá aún mayor que el real, ya que la máquina no tiene que lidiar con la escasez de oxígeno producida por la altura de muchas de las ciudades mexicanas. Para los que prefieren un seis cilindros, el 335 seguirá disponible.

Además de la mayor distancia entre ejes, que produce más suavidad de marcha, el nuevo Serie 3 cuenta con la misma caja automática de ocho cambios que usan los autos de las series 5 y 7. Suave y precisa, combinada con el modo “ECO”, que controla y limita la reacción del acelerador y hasta la potencia del aire acondicionado, es capaz de hacer que el 328 (como se va a llamar la versión con motor 2.0 litros) logre cifras de consumo de combustible de causar envidia a mucho subcompacto, por arriba de los 12 kilómetros por litro en ciudad. Además, todos los nuevos Serie 3 cuentan con motores con función “Start-Stop”, que los detienen cuando el auto se para, por ejemplo, en un semáforo y prenden automáticamente al quitar el pie del freno.

La mayor distancia entre ejes mejora la calidad de marcha, con que el auto es más cómodo que su antecesor. La dirección eléctrica es rápida, precisa y exige el esfuerzo adecuado para cualquier circunstancia, es decir, ligera en maniobras de estacionamiento y más firme en altas velocidades.

El lanzamiento del auto se hará en la misma fecha en todo el mundo (con excepción de China y Australia), que será el 11 de febrero próximo. Para México vamos a tener las dos versiones con motor de gasolina, es decir, 328 y 335. Europa, por supuesto, también contará con máquinas diesel. Más tarde vendrán sus variaciones y una de ellas tendrá un motor de cuatro cilindros, turbo, con 1.6 litros y 180 caballos de fuerza. Los precios aún no están definidos, pero en España, por ejemplo, son incluso más bajos que los de su antecesor, por lo que lo natural será que esperemos precios similares a los de hoy en México, pero sin los naturales descuentos que en este momento la marca otorga para los que compren lo que queda de su inventario.

Será, no nos queda ninguna duda, el lanzamiento más importante del año para BMW y para todo el segmento de lujo. El Serie 3 no sólo representa más de un tercio de la venta total de BMW en todo el mundo, también ratifica su estatus de mejor sedán de entrada al lujo, sólo que ahora, su distancia hacia los que vienen atrás, es aún mayor que la de antes.