GUADALAJARA, JALISCO (12/NOV/2016).- Al pensar en automóviles italianos, lo primero que podría venir a la cabeza sería deportividad, lujo y cantidades exorbitantes de dinero... Sí, tal vez piense en un Ferrari. No obstante, Fiat nos muestra una cara más “mundana” de uno de sus coches del país de la bota. Fiat Qubo, un vehículo listo para trabajar.La cara exterior de este automotor no pasa desapercibido, y es que además de conjuntar diversos elementos de su casa productora, da un cierto aire al famoso Multipla, no muy aceptado por muchos. El cofre genera una línea saliente hacia la frontal, misma que es integrada por unos amplios faros y una parrilla dispuesta en una posición inferior. La fascia delantera es prominente y dan lugar a una parrilla secundaria y a faros de niebla convencionales.Los costados son resaltados por una baja moldura en color gris; espejos laterales largos y una portezuela que se abre tipo van. La parte trasera es “plana”, pues no hay relieves importantes. Domina una amplia portezuela y una diminuta defensa, aunada a calaveras de corte sencillo.El interior no cuenta con grandes lujos, pero se equipa con tecnología imprescindible en la actualidad. Los asientos son en tela y los plásticos alrededor de la cabina son de tacto duro, pero cuenta con una pequeña pantalla de infoentretenimiento; controles de audio al volante; aire acondicionado; controles eléctricos y medidores análogos.Al enfocarse en el traslado de mercancía o de personas, este automóvil no tiene potencia vasta entre su lista de virtudes. En Europa se vende con una motorización a gasolina y dos a diesel.La primera de ellas es un bloque de 1.4 litros y cuatro cilindros, con potencia de 77 caballos de fuerza. Ambas opciones alternativas a diesel son Multijet, una de 80 y otra de 95 caballos. Todos lo motores son acoplados a una caja manual de cinco cambios.Italiano no es necesariamente sinónimo de deportividad y así lo deja en manifiesto este modesto vehículo dedicado a trabajar, el cual dará sus primeros pasos próximamente.