Suplementos | Por: Juan Palomar Diario de un espectador jpalomar@informador.com.mx Por: EL INFORMADOR 19 de noviembre de 2011 - 02:32 hs GUADALAJARA, JALISCO (19/NOV/2011).- Atmosféricas. La curva de los años. El largo flujo del tiempo levantó primero una guía tímida y esbelta. Buscando la luz y el aire siguió la enredadera sus instintos acendrados, sus caminos inmemoriales. Sin cesar y sin prisa el jazmín convirtió el paso de los días en una red intrincada de llamados y esperas. Las sucesivas olas de sus flores fueron rompiendo, por todo lo alto, contra la claridad y la tormenta: iguales de algún modo a los afanes de las gentes que por aquí han pasado. Su persistencia a través de los decenios deja razón y seña de los callados cuidados de Prisciliano Encarnación. Ahora es la guía principal un considerable tronco, una curva precisa, parecida en su gesto a la elegancia del gato al subir por ella a la terraza. A quien pasa bajo su fronda, la enredadera obliga a hacer una reverencia, una curva que acaso rinde homenaje, también, al empeño, a la clara duración y a la gracia. ** Maravillas de Marvell. Va un ensayo de traducción de este deslumbrante poema, que es un ensayo también de homenaje a Octavio Paz, quien hiciera una -ésa sí- magistral traducción de Marvell en sus Versiones y diversiones, descubriendo de pasada para la generación de este espectador los portentos del gran poeta metafísico inglés del siglo XVII. La bella cantante (Andrew Marvell) Para hacer de mí final conquista, Amor compuso tan dulce enemigo, En el que ambas bellezas a mi muerte concurren, Uniéndose las dos en fatal armonía, Que mientras ella con sus ojos mi corazón ata, Ella con su voz cautivar puede mi mente. Podría apenas haber escapado de una: Mi alma liberada podría salvarse Rompiendo las rizadas crenchas de su pelo. ¿Pero cómo podría no ser esclavo, De quien con sutil arte invisible forjar puede Mis grilletes con el solo aire que aspiro? Fácil pudiera ser pelear en algún campo, Donde la Victoria pareja elección tuviera, Pero ante ella toda resistencia es vana, Que en ojos y en voz lleva ventaja, Y la suma toda de mis fuerzas se deshace, Habiendo ella ganado viento y Sol. ** De la conferencia de Alfonso Alfaro. Vale más que la pena entresacar, del reporte aparecido en este periódico (17/11/11), algunas de las cosas que el doctor Alfaro dijo esta semana en la Casa ITESO Clavigero, dentro del ciclo organizado por la muy meritoria Escuela de Conservación y Restauración de Occidente. El título de la disertación fue “Una memoria hacia el futuro”. Dijo Alfaro: “Borrar los objetos del pasado por considerarlos culpables del presente es la postura que marca la historia”. Hablando del Barroco: “Este arte daba testimonio de otro cosmos que rebasa al universo conocido. Estaba hecho para que los seres humanos pudieran evocar este cosmos no sólo de forma racional, sino de manera afectiva. Era un arte que estaba hecho para que los seres humanos tuvieran sensaciones y emociones, para que les hiciera percibir que la lógica que gobernaba el cosmos era la del amor, de la pasión, del exceso y de la redención, que es un exceso inimaginable. Cumplía con una función social extraordinariamente importante y muy difícil de calibrar: permitía a los indígenas y a los nobles, a los coras y a los habitantes de Flandes, Italia, las Filipinas o Roma, a todos, tener el mismo tipo de sensaciones y sentimientos”. Más adelante: “No hemos logrado reconstruir las elites desbaratadas en el siglo XVIII. Fue entonces cuando se rompieron los vínculos que ligaban a las elites intelectuales con las elites empresariales. Estos vínculos no han vuelto a ser reconstruidos en dos siglos. Somos un país que tiene un ciclo de renovación de las elites aceleradísimo, lo que vuelve imposible mantener una memoria del pasado”. “Las pérdidas del patrimonio siempre han sido obra de modernizadores que buscaban seguir la moda y que gastaron un dineral en destruir lo que sus padres habían dejado queriendo legar a sus hijos algo que no alcanzaron a legarles, y que a su vez quedó abandonado. Nos hemos acostumbrado a vivir entre ruinas”. ** Velada literario musical en honor del presbítero Alfredo R. Placencia (1873-1930). La antigua iglesia de Santa Teresa de Jesús, en la calle de Morelos del centro de la ciudad, ha venido en los últimos años atravesando una afortunada renovación. El arte sacro contemporáneo tiene raras oportunidades de manifestarse con propiedad y fuerza: las nuevas pinturas de esta iglesia se proponen como una alternativa válida. Se ha renovado el órgano, se han restaurado algunos de los agravios de la incuria y del tiempo. El padre Tomás de Híjar, capellán de Santa Teresa, invita ahora allí a un recital de poesía del padre Alfredo R. Placencia, acompañado por la interpretación de un programa musical que incluye obras de Haendel, Stanley y Bach. Esto será el próximo lunes 21 de noviembre a las ocho de la noche. Habrá que ir. ** The debt. Una película titulada en español Al filo de la mentira. Dirigida por John Madden y bien actuada por Helen Mirren, Sam Worthington y Tom Wilkinson. La deuda de que habla la cinta tiene que ver con la perturbadora revisión del pasado trágico y complejo que dejó la guerra: cualquier guerra, pudiera pensarse, las que hacen combatir a los países o las que solitarios atraviesan hombres y mujeres. La evocación del Berlín oriental de la guerra fría es precisa y alucinante. Una ciudad tomada y desmembrada por la sinrazón y el encono. Hay un elocuente y sobrio alegato a favor de la lucidez y de la verdad. Hay la descripción de la pérdida del amor, de la fragilidad de la memoria, de la abismal vacuidad del mal. Sucede en dos tiempos distintos, enlaza las historias con habilidad. Tiene garra y oficio. ** Leopoldo Marechal: Pero duermen los niños, de espaldas a la tierra/ o en la margen del gozo./ Conspiran bajo el sol de los herreros,/ para que tenga un alma la ciudad. Temas Tapatío Diario de un espectador Lee También El arte, un reflejo crítico de la sociedad contemporánea Tapatíos en busca de oro en California “Los peruanos somos como personajes de Rulfo”: Diego Trelles Paz José Meléndez, de ser estratega interino a poderse convertir en campeón con el Tapatío Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones