Al cierre de septiembre pasado, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reporta que se tienen registrados a un millón 046 mil 340 patrones, que representan una tasa de variación anual de 4.5%, ante la recuperación de la economía en el país.Con este registro, la variación mensual en septiembre fue de ocho mil 054 empleadores adicionales, mientras que en lo que va del año se han inscrito 45 mil 926 nuevos patrones, tras los efectos devastadores de la pandemia durante el año pasado.Por otra parte, se tienen registrados ante el IMSS a 20 millones 594 mil 919 puestos de trabajo formales; de éstos, 87% son permanentes y 13% son eventuales. La participación del empleo permanente es la tercera más alta de los últimos 11 años. En septiembre se registró un aumento mensual de 174 mil 096 puestos, equivalente a una tasa mensual de 0.9%. Este incremento es el más alto para un mes de septiembre desde que se tiene registro.Con lo anterior, la creación del empleo de enero a septiembre del presente año es de 821 mil 187 plazas. En este lapso, se incrementó en 931 mil 539 el empleo permanente y se redujo en 110 mil 352 el empleo eventual.Los sectores económicos con el mayor crecimiento porcentual anual en puestos de trabajo son el de transportes y comunicaciones con 10.7%, el extractivo con 7.6%, la transformación y la construcción con 6.7 por ciento.Por Entidad federativa, destacan Tabasco, Quintana Roo y Baja California Sur con crecimientos anuales por arriba del 11 por ciento.El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró el lunes pasado que México ya tiene más empleos en el sector formal que antes de la pandemia. “Es decir, ya nos recuperamos. Perdimos como un millón 400 mil empleos, pero ya los recuperamos en menos tiempo que otras crisis”.En febrero de 2020, antes del impacto de la pandemia en el país, el IMSS registraba más de 20.6 millones de puestos formales, aún superior a los 20.5 millones actuales.Aunque el IMSS es el principal indicador del trabajo formal en México, analistas advierten que presenta un retrato parcial de la crisis porque en el país cerca del 55% de la fuerza laboral es informal, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).DesempleoLa tasa de desempleo en México se sitúa en 4% de la Población Económicamente Activa en el primer semestre de 2021, similar a los niveles anteriores a la pandemia del nuevo coronavirus, aunque cerca de un millón de personas no se habían reincorporado a la fuerza laboral.En el paquete presupuestal 2022 del Gobierno federal se propone una reducción importante para la entrega de créditos a micro, pequeñas y medianas empresas productivas y competitivas.Se considera una bolsa de sólo 240.6 millones de pesos, frente a los tres mil 503 millones que se etiquetaron para este año.El Gobierno eliminó el Programa de Microcréditos para el Bienestar, el cual formaba parte de los 30 programas y proyectos prioritarios de la actual administración federal. A través de éste se buscaba apoyar a la población que, por diferentes causas, no accedió a los servicios que ofrece el sector financiero tradicional para iniciar un negocio o consolidar uno existente.En este año, ese programa tuvo una bolsa de mil 500 millones de pesos para otorgar financiamientos, así como asesorías y capacitación.Otro de los que se eliminaron fue el programa de Apoyo Financiero a Microempresas Familiares, el cual promueve el acceso a los créditos para ampliar el potencial productivo de las micro, pequeñas y medianas empresas, incluidos los negocios en comunidades marginadas. Este año tuvo una bolsa de mil 600 millones de pesos.La Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami) presentó un análisis del efecto del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro, en el que se destaca que, en promedio, los egresados de éste tienen el doble de probabilidad de encontrar trabajo comparado con aquellos que no están inscritos. Cinco de cada 10 jóvenes que pasan por el programa encontraron trabajo durante la pandemia. “Durante los meses en que se levantó la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2020, salieron del programa 139 mil 353 jóvenes, de los cuáles 64 mil 428 encontraron trabajo; es decir, encontraron empleo el 46.2 por ciento.En tanto, en el mismo periodo, se contabilizaron 14 millones 823 mil 203 jóvenes sin empleo en algún momento y que no participaron en el programa, de los cuales tres millones 493 mil 274 encontraron un puesto de trabajo (23.6%).“El programa también sirvió como una red mínima para proteger a las familias de los jóvenes más vulnerables durante la pandemia en 2020, ya que aseguró ingresos para los jóvenes, brindó acceso a los servicios de salud y redujo la probabilidad de que un hogar con algún beneficiario del programa se quedara sin comer”, se puntualiza.Los beneficiarios tuvieron ingresos por ocho mil 222 pesos trimestrales ( dos mil 741 mensuales) adicionales respecto a los jóvenes que no estudian ni trabajan.En el análisis se subraya también que el programa tuvo un impacto significativo en el acceso a la salud, pues los jóvenes registrados en el mismo tuvieron 20.1% más probabilidad de acceso a la salud que si no hubieran sido beneficiarios del programa. “Cuando se compara la situación de los jóvenes beneficiarios contra los que se encontraban trabajando durante la pandemia, el nivel de bienestar e ingreso del hogar es mejor, por lo que el programa además logró sostener familias de jóvenes en condiciones similares a las que no perdieron su trabajo. En promedio, los hogares con Jóvenes Construyendo el Futuro tuvieron un nivel de vida muy cercano al que tuvieron hogares donde tenían jóvenes empleados”, se añade.GUÍASABER MÁSPara el próximo año se espera un restablecimiento casi total de la actividad económica, derivado del avance y conclusión de la campaña de vacunación de la población contra el nuevo coronavirus, la reanudación de las actividades escolares y la gradual reasignación de recursos hacia sectores que están experimentando un crecimiento, entre otros factores, según se destaca en los “Pre-criterios 2022” del Gobierno federal.Lo anterior se complementará con la política de fortalecimiento de los salarios, los esfuerzos en materia de inclusión y profundización financiera, el impulso a la inversión pública y privada por parte de la Secretaría de Hacienda y el fomento al comercio exterior y a la Inversión Extranjera Directa (IED), que está brindando el T-MEC.Esto permite actualizar la cifra de crecimiento para el próximo año usada en las proyecciones de las finanzas públicas de 2.6% a 3.6%, con un rango de 2.6% a 4.6 por ciento.TELÓN DE FONDOJalisco logró superar en el segundo trimestre de este año el nivel de ocupación laboral que se tenía previo al inicio de la pandemia por el nuevo coronavirus, pero la recuperación es lenta en algunos grupos de la población, siendo los jóvenes de entre 20 y 29 años de edad los más afectados.Según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, se puede observar que durante el primer trimestre del año pasado, se registraron 936 mil 418 jóvenes de esas edades con algún tipo de empleo, ya sea formal e informal, pero el rezago actual es de 50 mil 045 plazas frente a esa cifra, pues al cierre de junio pasado sólo 886 mil 373 se encontraban laborando.Es la recuperación más débil desde que inició la pandemia. Los únicos grupos de edad que han mostrado un aumento en materia de ocupación son los dos sectores que van de los 40 a 49 y 50 a los 59 años. El resto aún presenta déficit.Durante su Primer Informe de Gobierno, el Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que ningún joven del país se quedaría fuera del mercado laboral. La meta se pretendía alcanzar en este año con la ayuda del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro, pero no se logró. “Antes eran discriminados y tratados como ‘ninis’ porque ni estudian, ni trabajan… así los siguen describiendo algunos hasta hace poco, de manera despectiva. El próximo año ningún joven se quedará fuera del trabajo o del estudio”, subrayó en septiembre de 2019.El mes pasado, la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos presentó un análisis del efecto de este programa durante la pandemia, en el que se destaca que los egresados del programa “tienen el doble de probabilidad de encontrar trabajo, comparado con aquellos que no están en el programa (46.2% contra 23.6%)”.En el documento se subraya que, aunque se aplicó la medición durante la pandemia, “los objetivos del programa tuvieron un impacto positivo en la posibilidad de obtener un empleo”.