Aunque es difícil tener una certeza absoluta de por qué un equipo de futbol vive determinado momento, esto por el desconocimiento que existe sobre las dinámicas internas de cada club, mismas que son de máxima confidencialidad, sí es posible poner el foco y analizar lo que está a la vista de todos: sus acciones y resultados.En el presente Apertura 2021, después de seis fechas disputadas, las Chivas han sufrido no sólo una modesta colecta de puntos, con 6 de 18 posibles, sino también para encontrar a su equipo ideal.Prácticamente en todos los partidos del Guadalajara este semestre, su entrenador, Víctor Manuel Vucetich, se ha quebrado la cabeza en la búsqueda de los jugadores y el esquema que le ayuden a salir del bache en el que se encuentra y le permitan todavía pensar en clasificar a la Liguilla.Ante la interrogante de por qué si se modifica, los malos resultados se mantienen, hoy te explicamos, tras un análisis especializado realizado por el D.T. Eduardo Macías, que más allá de los nombres y el posicionamiento en el terreno de juego, el problema del Guadalajara radica en los constantes comportamientos que limitan su juego en las fases de ataque, defensa, transición ataque-defensa y transición defensa-ataque, algo que está a simple vista, pero que se debe poner mucha atención para identificarlo.En el último duelo de Liga ante el Monterrey, las Chivas de Víctor Manuel Vucetich apostaron por un posicionamiento 1-4-4-2 de arranque: Raúl Gudiño en la portería; Jesús Sánchez, lateral por derecha; Antonio Briseño, central por derecha; Luis Olivas, central por izquierda; Miguel Ponce, lateral por izquierda; Alan Torres y Jesús Molina en la doble contención; Jesús Angulo, volante por izquierda; Isaac Brizuela, volante por derecha; Ángel Zaldívar, centro delantero y Alexis Vega, segundo punta.En el caso de Vega, éste constantemente descendía para convertirse en mediapunta -o enganche-, al igual que intercambiaba posición constantemente con Angulo, quien dejaba el extremo del campo para conertirse en un volante interior.Considerando todos los elementos rojiblancos con acción en el presente torneo, en posesión del balón, las Chivas utilizan un ataque directo hacia las bandas, pero principalmente con pases largos hacia su centro delantero, Ángel Zaldívar, que posee una gran habilidad para jugar de espaldas a la portería rival, más fina que la que posee Jesús Godínez.Normalmente los pases hacia el sector ofensivo del Guadalajara provienen desde los defensas centrales y contenciones, siendo más precisos los pases a ras de cancha de Luis Olivas, mientras que los envíos largos elevados tienden a ser más efectivos en los pies de Alan Torres, Fernando Beltrán y Jesús Molina.Aquí empieza uno de los principales inconvenientes del Guadalajara en su accionar. Al atacar, Chivas presenta un posicionamiento fragmentado, con una gran acumulación de jugadores en las inmediaciones del área rival y otro grupo de jugadores en propio campo, dejando una enorme distancia entre sus líneas, algo que impide que cuando Zaldívar, Vega u otro atacante reciba el balón, pueda descargar con un compañero para dar continuación a la jugada. De igual forma, esto provoca que en caso de perder la pelota, los rivales dispongan de tiempo y espacio para montar su ataque ante una línea defensiva del Guadalajara en desventaja, pues con frecuencia sus laterales proyectan y dejan en inferioridad numérica a la zaga.Al momento de perder la pelota, y debido a los espacios que deja libre el Guadalajara, en el centro del campo y detrás de su línea defensiva, los jugadores más cercanos a la pelota tienden a presionar para retardar el ataque rival, mientras que el resto del equipo repliega a propio campo. De los elementos más destacados para presionar al rival tras pérdida es Ángel Zaldívar, Carlos Cisneros, Jesús Angulo, Fernado Beltrán, Alexis Vega e Isaac Brizuela, éste último siempre y cuando se ubique en el centro del campo o como lateral, pues cuando se posiciona como extremo derecho, su voluntad defensiva disminuye.Otro punto débil del Guadalajara, y que nuevamente es derivado de su fractura entre líneas es cuando presiona desde la salida rival, especialmente cuando en el mediocampo se ubican Alan Torres, Sergio Flores o Jesús Molina, ya que son elementos que permanecen profundos, es decir, fijos en el centro del campo y no acompañan la presión de los delanteros. Además, detrás de los extremos también hay grandes espacios de manera constante, ya que su distancia entre ellos y los laterales es muy amplia.Respecto a la zaga defensiva, ésta tiende a verse muy vulnerada ante la constante persecución que tienen sobre los atacantes sin que exista una cobertura continua de sus compañeros próximos, es decir, salen a presionar al rival y dejan un nuevo espacio a su espalda.Posicionados en su medio campo, sin el dominio del balón, el Guadalajara es un tanto más sólido al estar más compacto, pero aún así sus rivales pueden encontrar un espacio, de nueva cuenta, en el área ubicada detrás de los extremos y al lado de los contenciones, ya que tanto Vega, Angulo, Brizuela y Antuna no acompañan el recorrido defensivo de la línea de mediocapistas, dejando en soledad a los contenciones. Por otro lado, los defensas laterales del Guadalajara, con excepción del “Chapito” Sánchez, suelen permitir el centro o el disparo de los atacantes rivales, pues si bien los logran retardar y perfilarlos hacia uno u otro sector del campo, con frecuencia no buscan puntear la pelota para robarla, dando tiempo y espacio para la ejecución del contrario.Una vez que el Guadalajara logra recuperar la pelota, normalmente con más frecuencia en su propio campo, la reconversión al ataque se lleva de manera muy aislada. Esto se debe a que rápidamente se busca el pase largo hacia Zaldívar, Vega o Godínez, con o sin circulación previa, pero al no tener ningún compañero en quien apoyarse, pierden la pelota de nueva cuenta.Por su parte, elementos como Antuna, Mayorga, Sánchez y Brizuela tienen el hábito de conducir el balón de manera individual hacia el área rival para posteriormente tirar a puerta, siendo el caso más efectivo el gol del “Cone” ante el Puebla, cuando recuperó el balón en media cancha y lo llevó hasta las inmediaciones del área camotera para posteriormente disparar a gol.Una alternativa de alineación que podría ser efectiva en el Guadalajara es la siguiente: Gudiño en la portería, al responder con un cero en puerta en el partido ante Monterrey; Olivas, con sus pases firmes y buena conducción, junto a Briseño en la zaga central; en las laterales, Mayorga y Sánchez, con su voluntad defensiva y constante incorporación al ataque por el centro del campo; Beltrán como único contención, pues es quien mejor distribución da al equipo desde el medio campo; Angulo y Brizuela como volantes interiores por su capacidad de conducir, dar continuidad a la posesión y tirar a puerta; en los extremos Vega y Antuna, quienes mejor desbordan y centran (Cisneros podría también suplir a Antuna); y Ángel Zaldívar en el frente de ataque, con su velocidad de definición y sacrificio defensivo.Si quieres tener más contenido, más imágenes y aún más noticias, entonces descarga INFORMAPlus, la aplicación digital de EL INFORMADOR, donde tenemos materiales exclusivos para ti.Descarga la aplicación y pruébala GRATIS por treinta días.Para iOS: https://apple.co/35jaVgb Para Android: https://bit.ly/3gwVSEVSi eres suscriptor de EL INFORMADOR tu acceso está incluido, solicítalo al 33 3678-7777.
