La segunda pista y las obras de ampliación del Aeropuerto de Guadalajara no requieren de los terrenos del ejido El Zapote y “no existe ningún impedimento para la implementación del proyecto”, subrayó Miguel Alejandro Solís Rosales, vocero del Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP).Con relación al litigio que mantiene la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) con el ejido, el abogado insistió en que el Gobierno federal ya liquidó en su totalidad cualquier adeudo derivado del proceso de expropiación de los terrenos donde actualmente se ubica la terminal aérea. “De acuerdo con una sentencia firme e irrevocable emitida por el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Tercer Circuito, las 306 hectáreas son propiedad de la Nación”.Por ello, insistió en que la segunda pista está considerada dentro de esa poligonal vigente. Esa sentencia determina que ya no es posible restituir las tierras al ejido.Solís Rosales precisó que el único expediente que se mantiene en litigio es un incidente por el concepto de daños y perjuicios, que no tiene relación con el decreto de expropiación. “Es importante que los ejidatarios de El Zapote reactiven ante el Poder Judicial de la Federación el proceso de un eventual pago de daños y perjuicios para que, si fuera el caso y mediante la resolución de un juez, se fije un monto”. Eso, acentuó, permitiría sustentar jurídicamente cualquier pago pendiente por ese concepto a cargo de las autoridades federales.Agregó que el proyecto de ampliación de la terminal aérea, para la cual se contempla una inversión superior a los 12 mil millones de pesos, podría enfrentar un “sabotaje jurídico”, como el que afectó en su momento a la ampliación del Aeropuerto Felipe Ángeles que se construye en la Base Militar de Santa Lucía, en el Estado de México. “Hemos monitoreado la página del Poder Judicial y nos hemos percatado que el ejido ha presentado al menos 14 amparos buscando la suspensión de las obras. Si eso no es un sabotaje, no sé qué sea”.Dijo confiar en que el precedente de Santa Lucía, en donde fueron negadas las suspensiones concedidas en un inicio, aplique con la terminal aérea de Guadalajara, dado que los aeropuertos son áreas estratégicas de desarrollo económico.Se proyecta que la segunda pista esté lista en tres años, pero también se construirá un edificio de oficinas, un hotel, plantas de generación de energía solar y el nuevo estacionamiento, entre otros.Entre 1976 y 2007, el Gobierno federal realizó 10 pagos al Ejido El Zapote por la expropiación de las 306 hectáreas en las que se construyó el Aeropuerto Internacional de Guadalajara.El primero se realizó en junio de 1976 por 2.3 millones de viejos pesos; es decir, antes de que se cumpliera el primer año, luego que el Gobierno publicara el decreto presidencial (septiembre de 1975) mediante el cual se expropió esta superficie que se divide en cuatro polígonos.El último pago que realizaron las autoridades fue en 2007 por 40.1 millones. El cheque fue recibido por el líder ejidal Nicolás Vega durante un evento en el que estuvo el entonces Presidente Felipe Calderón, subrayó Miguel Alejandro Solís Rosales, vocero del Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP).El pasado 5 de febrero, Raúl Revuelta, director del Grupo Aeroportuario del Pacífico, reiteró que el Ejecutivo federal ya pagó por los terrenos expropiados. “El posicionamiento de la Suprema Corte es clarísimo, ya es inapelable, ya llegó a la última decisión. Los terrenos del Ejido El Zapote fueron pagados por el Gobierno federal”.En el Amparo en Revisión Principal 298/2015, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Tercer Circuito determinó también lo siguiente: “Se insiste en que, tales cuestiones, serán tomadas en cuenta, como fondo que es, al momento de proceder al estudio de la materia constitucional del juicio sujeto a revisión, a fin de garantizar, como preocupa a las autoridades recurrentes, que no exista un doble pago en perjuicio de la Federación”. Las autoridades federales se han comprometido a solucionar el conflicto a través de nuevos convenios con los ejidatarios. El último pago que el grupo ejidal puso sobre la mesa fue por alrededor de mil 300 millones de pesos.Montos realizados por el Gobierno federal por la expropiación de las 306 hectáreasEl vocero del GAP, Miguel Alejandro Solís Rosales, informó que aún no se determina el monto a pagar por un posible daño o perjuicio, debido a que es el propio Ejido El Zapote el que se ha encargado de interrumpir este proceso. “Esto ha provocado que se alargue la determinación del monto. En este momento no hay una cantidad específica, lo que ayudaría a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (para determinar la cantidad a pagar)”.Recordó que se han manejado varias cantidades. La última de la que tiene conocimiento es la ofrecida por parte del Gobierno federal por 67 millones de pesos. “Los del Ejido propusieron un peritaje totalmente desproporcionado, que no es conforme a lo que dijo el Colegiado, creo que está casi en los cuatro mil millones”.Aclaró que la cantidad a cubrir se cuantifica con base en la fecha de la afectación, como lo resolvió la Suprema Corte de Justicia de la Nación. “No puede ser con valores actuales, únicamente 1975 (fecha de la expropiación)”.El abogado aseguró que ese trabajo ya lo hizo la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu). “Ahorita no hay algo preciso hasta que no se determine por parte del juez competente y se desahoguen las periciales que necesita el juez para determinar, (es cuando ya) podremos hablar de un valor”.Insistió en el mensaje que brindó recientemente el Presidente Andrés Manuel López Obrador con relación al tema, quien aseguró que si por justicia les corresponde un pago, se tiene que realizar; de lo contrario, no se puede exigir algo que no sea justo.La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) ofreció 150 millones de pesos a los ejidatarios de El Zapote como finiquito de las 306 hectáreas que les fueron expropiadas para la construcción del Aeropuerto de Guadalajara. También ofreció hasta 800 millones de pesos a los ejidatarios en caso de que les vendieran el resto de sus tierras que actualmente poseen en los alrededores de la terminal aérea.Nicolás Vega, uno de los líderes de los comuneros, aseguró que este ofrecimiento se hizo en la reunión realizada el pasado miércoles en la Ciudad de México, pero lo rechazaron.Aseguró que la Suprema Corte de Justicia de la Nación abrió el cumplimiento sustituto para llegar a un acuerdo definitivo sobre el finiquito de las tierras. “Yo les enseño con documentos donde dice la Suprema Corte: páguese los daños y perjuicios… y abrase el incidente de cumplimiento sustituto”.Para la construcción de la segunda pista, indicó, se requieren los terrenos que actualmente son de su propiedad, los cuales no están dispuestos a vender si no se llega a un acuerdo primero sobre el finiquito de las 306 hectáreas que les expropiaron inicialmente. “En el proyecto están 187 hectáreas que corresponden al Ejido El Zapote. Todos los proyectos están dentro de lo que es de nosotros”.Explicó que también existe una disputa legal en las 106 hectáreas que vendió el Ejido de Santa Cruz del Valle, ya que seis hectáreas pertenecen a El Zapote. “Por eso nosotros presentamos otras demandas y tenemos otras suspensiones porque vendieron terrenos que nos corresponden. El ejido no vende ningún metro, que paguen primero”.En los últimos cinco años, los ejidatarios de El Zapote han tomado en nueve ocasiones el estacionamiento del aeropuerto, lo que provocó pérdidas por 66.7 millones de pesos al Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP).La última manifestación, desarrollada entre el 17 de noviembre de 2019 y el 12 de febrero de 2020, representó daños por 37.1 millones. Esta fue la última cifra otorgada por las autoridades del aeropuerto.A través de un comunicado de prensa, el GAP aseguró que los inconformes fueron desalojados de manera pacífica y ordenada por la Guardia Nacional. “Se informa que han sido restablecidos los seguros de protección a los vehículos, se reactivó la energía eléctrica, el suministro de agua potable, los servicios de apoyo en caso de ponchadura de llantas, teléfono de emergencia, sistema de reconocimiento de matrículas y el resto de los servicios pensados para mejorar la experiencia del pasajero y los usuarios”.A pesar de que el grupo consideraba que con estas acciones se podrían iniciar las obras de ampliación y modernización del aeropuerto, esto no ha sido posible porque los ejidatarios impiden el ingreso del personal responsable de la construcción de la segunda pista y de la nueva terminal aérea, entre otros trabajos.De acuerdo con la resolución emitida por el Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa sobre la queja 20/2018, se aclara que la suspensión previamente otorgada al grupo ejidal, “no los faculta para ocupar superficie alguna en la que existan construcciones e instalaciones del Aeropuerto Internacional de Guadalajara, necesarias para el funcionamiento y operación de dicha terminal aérea, incluyendo servicios complementarios; como tampoco los faculta para impedir u obstaculizar los servicios respectivos”.Según el Artículo 55 del Reglamento de la Ley de Aeropuertos, los servicios comprenden “los estacionamientos: para automóviles y para los vehículos de los servicios de transporte terrestre al público…”.En 2016, cuando los ejidatarios realizaron dos tomas del aeropuerto, el GAP estimaba que las manifestaciones realizadas en distintas ocasiones ya habían dejado pérdidas acumuladas por alrededor de 15 millones de pesos.GUÍACLAVESSectores. Los organismos empresariales de Jalisco coincidieron en que la ampliación y remodelación del Aeropuerto de Guadalajara traerá beneficios para varios sectores, como el exportador, turismo, agroindustrial y de la construcción.Apuesta. Miguel Ángel Landeros, presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior de Occidente, remarcó que este sector “le apostó mucho a este proyecto”. “Estamos muy contentos que el GAP lo anuncie como una realidad. Guadalajara y la Región de Occidente se merece un aeropuerto de ese nivel para toda la Región”.Alternativa. Mauro Garza Marín, presidente del Centro Empresarial de Jalisco (Coparmex), subrayó que con la ampliación, Guadalajara tomará una parte importante de la cancelación del aeropuerto de Texcoco, en la capital del país. “Sabemos que el Aeropuerto de Santa Lucía no estará a tiempo… y si llegara a estar, no dará los resultados esperados. El Aeropuerto de Guadalajara puede venir a solucionar y ser un espacio de oportunidad para la atracción del turismo y la carga”.Obras. Por su parte, Xavier Orendáin, presidente de la Cámara de Comercio de Guadalajara, agregó que la ampliación de las terminales aéreas de Guadalajara y Puerto Vallarta son “muy necesarias”. “Es muy oportuno y justo que se reconozca la importancia de Jalisco en los hechos y en las inversiones. Estamos esperando el inicio de las obras y estaremos sumados como sector privado para coadyuvar a que se materialice lo antes posible”.Sigue: #DebateInformador¿Qué opina de la inversión millonaria para ampliar el Aeropuerto tapatío?Participa en Twitter en el debate del día @informador
