Rector de la UNAM ve acciones 'desintegradas' en combate a pobreza

CIUDAD DE MÉXICO (12/MAR/2014).- El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, José Narro Robles, dijo que es momento de "hacer algo, urge" para atender el analfabetismo, la pobreza extrema y las condiciones de desempleo, faltas de oportunidades y hasta muertes en la que sobreviven 50 millones de personas, esto a pesar de que en los últimos tres lustros se han invertido 2.8 billones de pesos para atender esos rezagos en acciones "desintegradas y parceladas".

El rector de la UNAM afirmó que México tienen problemas de orden social.

Advirtió que el tema no puede tomarse para ser "políticamente correcto. No puede ser un asunto que esté de moda y debiera dejarlo cuando lo resolvamos y no parece que estamos encaminándonos a la solución".

El rector aseguró que "estamos acostumbrados a echarle la culpa a la falta de recursos, al no hay dinero, al no hay presupuesto pero cuando uno revisa lo que ha pasado desde el año 2000 a la actualidad, es que México ha destinado 2.8 billones de pesos a los programas de combate a la pobreza. No es pues una falta de recursos".

Al inaugurar el congreso Política Social y sociedad civil: retos para alcanzar la equidad y la justicia social, el rector explicó que hay una serie de condiciones que explican la pobreza, la desigualdad y la exclusión social y elementos que permiten advertir de que el país no ha sido capaz de resolver estos asuntos.

Confió que en la actual administración hay "hay una mayor preocupación y acercamiento de las autoridades que tienen que ver con política social. No es un asunto de orden ideológico en su cercanía con la UNAM, nos han buscado más".

Aseguro que esa cercanía no cambia el discurso. "Estamos participando más y estamos diciendo lo mismo".

Ante académicos, estudiantes y representantes de organizaciones sociales agregó que las acciones que son "más de orden asistencial" deben ser cuestionadas para atender la situación de desigualdad que nos convierte en una nación de las más desiguales.

Refirió que al interior de nuestro país convive un equivalente a cinco millones de personas que no saben leer no escribir, una cantidad semejante. Uruguay o de los países de Centroamérica; también de 11 millones de personas en situación de pobreza extrema, algo similar a más del número de habitantes de Bulgaria.

Así como 50 millones de ciudadanos que "sobreviven en condiciones precarias, con muchas deficiencias, con necesidades sociales, con problemas en la educación, en la vivienda, en el empleo, el ingreso en la dotación de servicios que viven en condiciones de pobreza.

"Hay que hacer algo, urge y no estoy diciendo no se ha hecho nada, pero no estamos siendo tan eficientes como debiéramos serlo".

Estos problemas, agregó, tiene consecuencias sobre la vida de las personas. "Hay gente que muere de problemas derivado de esto. Hay millones que no tienen la calidad de vida".
Los problemas de México, de orden social, son de ignorancia, exclusión y de pobreza.

Reitero que ser joven, mujer e indígena implica tener riesgos superiores a los que tiene la población fuera de esa condición. Pero la situación puede agravarse si se combina al ser mujer, joven e indígena.

El rector de la UNAM definió que junto a los imperativos sociales, a las consecuencias económicas, se puede hablar de productividad. No se puede aspirar a un papel de competitividad internacional mientras no se resuelva antes los rezagos en materia social.

"No podemos quedarnos cruzados de brazos, hay un imperativo ético".

En un balance dijo que han sido varios los programas desde los años 70, se han destinado recursos y "no lo hemos resulto".

El piso básico es garantizar salud, educación, mejor alimentación y empleo productivo, pero también debe haber participación de la sociedad, consideró.