México registra los mayores niveles inflacionarios de las últimas dos décadas, ubicándose en una tasa anual de 7.45%, muy por encima del objetivo del Banco de México (Banxico), que estimó 3 por ciento.Se trata del mayor nivel desde 2001, impulsado principalmente por los costos en los alimentos básicos, del sector agropecuario y los energéticos.“En la carnicería de mi casa, el centro de paloma subió mucho. Ya cuesta 200 pesos el kilo en promedio”, lamenta Karina Méndez, vecina de Mezquitán.“Antes comprábamos la tortilla en la tienda de la esquina, pero subió de 19 a 24 pesos entre diciembre y abril. Por eso mejor nos estamos organizando para ir directamente a las tortillerías más cercanas, donde los precios varían entre los 21 y 22 pesos”.Dentro de las mercancías, sobresale el alza de los alimentos, bebidas y tabaco del 10.08% en el promedio interanual.En términos generales, el aguacate, la cebolla, el jitomate, el huevo y la tortilla tuvieron los mayores incrementos en los precios en las últimas semanas, aunque siguen los altos costos en la carne de res y pollo.Por otra parte, se suman los impactos por la gasolina Magna, gas doméstico y electricidad. Son los productos y servicios que más se encarecieron.La Junta de Gobierno del Banxico advirtió ayer que las mayores presiones en los precios de alimentos tienen “altos costos sociales” y podrían afectar las expectativas de inflación.“Las mayores presiones en los precios podrían afectar las expectativas de inflación de las familias, lo cual aceleraría la dinámica inflacionaria aun si los precios del resto de las mercancías se comportaran mejor”. Relató que los aumentos en los costos de los alimentos a nivel global “han generado un sesgo negativo en la inflación del país”.El precio del aguacate estaba barato en enero y parte de febrero, “pero ya se disparó a más de 90 pesos. Los precios de la carne y el pollo también están por las nubes… entre 160 y 220 pesos en algunas carnicerías. Y la tortilla subió a más de 22 pesos el kilo”. Así resume la tapatía Claudia Arias los impactos de la inflación en las últimas semanas. “Cuándo bajarán los precios”, se pregunta la vecina de Oblatos. Irma Juárez, de la colonia Progreso, de Guadalajara, remarca que otra vez volvió a subir el precio del agua potable. “Ya cuesta 39 pesos el garrafón, hace una semana costaba 37 pesos, la aumentaron dos pesos en la última semana”. Agrega que el año pasado costaba 34 pesos, lo que significa cinco pesos en un año.Guadalajara presenta un incremento en los precios de 7.64% a tasa anual, una inflación récord de los últimos 21 años, según reportes del Inegi. Sin embargo, en Jalisco la mayor inflación se arrastra en Tepatitlán, que asciende a 8.18 por ciento.Destaca que los alimentos (pan, tortillas y cereales), las bebidas y el tabaco, en términos generales, tienen una inflación anual del 12.65% en la capital del Estado.Por ciudades, Guadalajara se posicionó en el lugar 37 de 55 ciudades con mayor inflación, mientras que Tepatitlán se ubicó en el sitio número 17. En lo que se refiere a la inflación por Entidad federativa, Jalisco se encuentra en el decimoctavo lugar de los Estados con mayor incremento en los precios con 7.78% en marzo, la cual es mayor a la del mes anterior de 7.41% además de ser mayor a la nacional de 7.45 por ciento.A nivel nacional fue de 7.45%, la cual se encuentra fuera del rango de 2% y 4% establecido por el Banco de México (Banxico) como objetivo inflacionario; la inflación fue mayor a la del mes anterior cuando se registró una tasa anual de 7.28% ligando 13 meses fuera de la banda de control del Banxico y siendo esta cifra la más alta registrada desde enero de 2001. La inflación anual más alta la documentó Fresnillo, Zacatecas, con 9.94%. La inflación más baja se observó en Toluca, Estado de México, con 6.03% anual. En este mes 37 ciudades tuvieron una inflación más alta a la nacional.Campeche fue la Entidad que registró el mayor incremento a tasa anual en los precios con 9.69 por ciento, mientras que la Ciudad de México es la que presentó la menor variación a tasa anual con 6.34 por ciento. EL DATOPanorama mundialEl economista en jefe para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, William Maloney, dijo que en el tema de la inflación, los problemas por el lado de los energéticos y agropecuarios, no van a desaparecer rápidamente.TELÓN DE FONDOEl Presidente Andrés Manuel López Obrador ha descartado que el conflicto entre Rusia y Ucrania pueda afectar el suministro de combustible y generar alzas de precios, y anunció que su gobierno trabaja en un plan de producción de alimentos para elevar la oferta de algunos bienes y controlar la inflación.A principios de marzo, para prevenir las posibles subidas, el Gobierno de México decretó un estímulo fiscal del 100% del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que pagan los consumidores por la gasolina Magna y el Diésel.Además, el pasado 31 de marzo, López Obrador, dijo: “Hemos podido controlar la inflación, que no se nos salga de control por completo por el manejo en los precios de los combustibles”.“Y lo mismo vamos a hacer en el caso de los alimentos si se prolonga la inflación o si se mantiene alta la inflación, porque perjudica mucho el ingreso de los trabajadores, afecta mucho la carestía. Entonces, estamos pendientes de esto”, subrayó.Unos días después, el 4 de abril, el Presidente explicó que se está haciendo un “plan de producción de alimentos para que haya más oferta y podamos también con los alimentos controlar inflación”, especialmente en la canasta básica, y busca garantizar que no haya “carestía”.CLAVESPresión. La inflación en México se aceleró en marzo y alcanzó una tasa anualizada de 7.45%, la mayor en dos décadas, presionada por los aumentos de precios en el transporte aéreo, los servicios turísticos y algunos alimentos básicos de la dieta mexicana, como el aguacate.Récord. El Índice Nacional de Precios al Consumidor mostró en marzo un aumento de 0.99%, en comparación con el mes anterior, lo que llevó la tasa anualizada al mayor registro desde 2001, informó el jueves el estatal Instituto Nacional de Estadística y Geografía. En febrero la inflación anualizada había sido de 7.28 por ciento.Bienes. De igual forma, la inflación subyacente (considerada medular para la economía debido a que excluye los bienes y servicios de mayor volatilidad) reportó en marzo una tasa anualizada de 6.78%, con lo que acumula 16 meses seguidos de aumentos.Conflicto. La aceleración de los últimos meses en la inflación subyacente ha generado preocupación entre los analistas, que prevén que las presiones inflacionarias se intensifiquen por los aumentos de precios que han sufrido algunas materias primas como consecuencia de la guerra entre Rusia y Ucrania.Productos. En marzo se registraron incrementos de precios en productos como el aguacate, la cebolla, el tomate, el huevo y la tortilla, que forman parte de la dieta básica del mexicano, y en el transporte aéreo, los servicios turísticos, el gas doméstico y la gasolina de bajo octanaje, informó el Inegi.País. México enfrenta las presiones inflacionarias en medio de un estancamiento de su aparato productivo. Luego de las caídas consecutivas del tercer y cuarto trimestre de 2021, la economía nacional cerró el año con una activación de 5 por ciento.BANCO DE MÉXICOCANASTA DEL CONSUMIDOREl Banco Mundial (BM) ajustó su pronóstico de crecimiento para México, país en el que consideró se requiere un piso más parejo para aprovechar el enorme potencial de energía verde. Además, advirtió que México, al igual que América Latina y todo el mundo, seguirá padeciendo la alta inflación, sobre todo por el alza en precios energéticos y de alimentos, presiones que no desaparecerán a gran velocidad.“Estamos pronosticando 2.1% en 2022; y 2.1% en 2023 y 2% en 2024”, anunció el economista en jefe para América Latina y el Caribe del BM, William Maloney.Durante la conferencia de prensa posterior a la presentación del informe semestral “Consolidando la recuperación: aprovechando las oportunidades del crecimiento verde”, dio a conocer la actualización de las expectativas para la región.Para México la correspondiente al 2022 pasó de 3% que tenía en enero del presente año a 2.1%; para el siguiente, el nuevo pronóstico es 2.1% desde el 2.20% anterior y para el 2024 quedó en 2 por ciento.Maloney consideró como favorable las expectativas que tiene nuestro país para ser una economía verde.“La buena noticia es que México tiene un enorme potencial en fuentes de energía, especialmente solar y nitrógeno verde”.Pero hace falta una cancha más nivelada para éstas, manifestó. En su opinión, la infraestructura en energía con la que cuenta México puede ser utilizada para aprovechar el potencial.¿En cuál producto o servicio detecta la mayor alza en los precios?Participa en Twitter en el debate del día @informador