Verdad o mentira

Es indispensable contar con la alta tecnología para detectar cuando una persona dice mentiras o está sosteniendo la verdad. Existe una serie de televisión que se llama “Lie to me”, que revela cómo las microexpresiones de la cara denuncian cuando una persona está mintiendo. Es una serie fascinante, por la manera en que se resuelven muchos casos, en donde los métodos tradicionales de investigación no alcanzan a detectar la verdad de las cosas. La aplicación de la justicia debe ya de contar con métodos científicos mucho más modernos para resolver los casos en que la realidad debe aparecer, a pesar de que la gente esté acostumbrada a ser un experto en el arte de las mentiras.

Es cierto que mentir es una práctica muy común, a pesar de que se ha señalado tanto lo trascendente que es educar en la verdad. Pero los hechos marcan otra tendencia, la gente miente con mucha facilidad y hace parecer como verdadero lo que en realidad es falso.

Conozco casos judiciales que con mentiras y falsos testigos, se puede acusar a una persona de algo que nunca hizo, y además convencer a los agentes del Ministerio Público y a los jueces de que la mentira es una verdad. Si tuviéramos estos procedimientos de investigación, otra sería la manera de llevar los asuntos. No perderíamos tanto tiempo y recursos avalando las mentiras y dando crédito a la gente falsa.

Las microexpresiones de la cara revelan lo que realmente está pensando la persona. La ventaja de estudiar el lenguaje corporal radica en que es mucho más universal que cualquier otro idioma; la cara de ira, de frustración, de repugnancia o de violencia es igual en todas las razas y culturas del mundo. Además, muchos de los miles de rasgos que se pueden manifestar en el rostro, prácticamente no se pueden simular ni fingir, a pesar de que la persona sea un perfecto actor. Simplemente porque la mentira acaba aflorando y se hará presente en algún gesto o conducta que lo denunciará, tarde que temprano.

La ventaja es que en la medida en que nos acerquemos a la ciencia y acudamos a sus avances, la objetividad y la verdad serán mucho más sólidas y firmes, en un mundo que aún se regodea en la mentira.

Tan sólo imaginemos cómo sería un mundo en donde la mentira se detectara de inmediato y no fuera fácil eludir las consecuencias ¿Cómo se comportarían los políticos, los comunicadores, los delincuentes, los infieles, los calumniadores y en fin, todo el que ahora cuenta con la creencia de que puede disfrazar la verdad de lo que ha sucedido y ocultarla sin el temor de ser atrapado?

Pienso que debemos de hacer todo lo posible para que la verdad triunfe sobre la mentira y pronto contemos con la ciencia de la certeza humana, para abatir a tantos mentirosos, falsificadores y simuladores.

Puede ser el inicio de un mundo diferente, en donde todavía los mentirosos se salen con la suya.