Un grito tempranero

GUADALAJARA, JALISCO (15/SEP/2012).- En la Unidad Administrativa Gobernador Prisciliano Sánchez, el alcalde de Guadalajara, Francisco de Jesús Ayón López, dio el primero de los cuatro gritos por la patria que expresaría en su municipio alrededor de las 18:45 horas.

El alcalde llegó a las instalaciones donde apenas unas 200 personas comenzaban a congregarse para celebrar en familia el Grito de Independencia, entre juegos mecánicos que apenas arrancaban motores para funcionar envueltos por el olor de este día tradicional de la pasta de churros hirviendo en aceite, elotes cocidos, salchipulpos, pozole y enchiladas.

Un mariachi ya amenizaba la tarde al mismo tiempo que se repartían banderas mexicanas de papel y una decena de mujeres de la tercera edad lucían ataviadas de trajes tradicionales y coronas de reinas de la Independencia en una banca especial, junto a la banda de guerra del Escuadrón de Bomberos del Ayuntamiento tapatío.

El alcalde llegó y subió de inmediato al palco, se rindieron honores a la bandera y sonó una pequeña campana que se escuchó un poco más que los propios gritos de una niña exigiendo a su madre ya ir a los juegos mecánicos.

"Estamos reunidos para honrar a quienes nos dieron y heredaron libertad..", expresó el alcalde, quien comenzó por nombrar a "Miguel Hidalgo, Vicente Guerrero, Pedro Moreno, Allende, Rita Moreno, José Antonio Torres, Javier Mina", acompañados por un "Viva" que cerró con la voz quebrada de Ayón al mencionar a Guadalajara, Jalisco y "México, México, México".

El himno nacional se cantó acompañado por el Escuadrón de los Bomberos. El alcalde, quien estuvo acompañado por la administradora de la unidad, Griselda Rojas, y el jefe de unidades administrativas, Luis Fernando Galván, salió con una pequeña comitiva de manera casi inmediata para dirigirse a la unidad Administrativa San Andrés, en donde alrededor de las 19:00 horas había más convocatoria.

De ahí partió a la Hermosa Provincia y a la Glorieta Chapalita para repetir el acto de protocolo que envuelve el mejor pretexto para que miles de familias disfruten de un día entre antojitos mexicanos, música y juegos la convivencia familiar que es parte de la identidad nacional.