México necesitará 86 nuevas ciudades para 2030

GUADALAJARA, JALISCO (30/OCT/2011).- Aunque la economía mundial vive una desaceleración en varias industrias, incluida la inmobiliaria, la situación no permanecerá así por mucho tiempo. Para dar cabida al desarrollo inmobiliario de 2030 habrá que crear en México 75 ciudades con más de 100 mil habitantes y 11 para un millón de personas, apunta el presidente de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI), Germán Ahumada, lo que significa que este sector será una de las principales palancas para el desarrollo de la nación en los próximos años.

Es necesario planear las acciones y sentar las bases para los próximos 20 años, pues habrá 130 millones de mexicanos, explica Ahumada.

Detalla que para 2030, el país requerirá por lo menos de 16.2 millones de viviendas y que para cubrir la demanda de empleo se necesitarán más de seis mil edificios de oficinas, más de 62 mil tiendas en centros comerciales y 170 parques industriales.

El también directivo de Casas Ara, añadió que será necesario construir 431 mil nuevos cuartos de hotel, 178% más de los actuales, para que México sea la quinta potencia turística a nivel mundial.

Y para lograr este objetivo, el financiamiento es vital. La banca de desarrollo es una de las fuentes de recursos más importante para impulsar diversos sectores de la economía mexicana, según afirma el secretario de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña.

Al participar en la Décima Reunión Nacional de Consejeros Consultivos de Nafin y Bancomext, expuso que el Gobierno federal ha financiado proyectos que han modificado la vida de las generaciones de hoy y del mañana.

Meade Kuribreña sostuvo que la banca de desarrollo debe cumplir su función de palanca para el desarrollo de la economía, servir de brazo financiero de la política económica y ser instrumento para promover el desarrollo de los mercados financieros.

Indicó que la reforma estructural a la banca de desarrollo impulsada hace 11 años fue positiva, ya que a septiembre de 2011 la cartera al sector empresarial ascendió a 235 mil millones de pesos, 139% más en términos reales que lo que valía al cierre de 2006.