Dolor en el pecho podría ser antecede de un infarto

GUADALAJARA, JALISCO.- El problema “pivote” de una afección cardíaca se presenta cuando una persona realiza un esfuerzo físico y éste desaparece cuando está en reposo. El malestar se caracteriza por ser un dolor torácico opresivo en el centro del pecho o hacia el lado izquierdo.

Si usted realiza cualquier actividad física y presenta dolor en el pecho, la sensación de que le falta aire, opresión en el cuello, molestia en la mandíbula o cualquier síntoma o sensación en la caja torácica que nunca antes haya experimentado, es necesario que acuda a revisión médica, porque se puede estar gestando un problema cardíaco que podría llevarlo a un infarto.

El cardiólogo Gabriel Arturo Ramos López explica que si una persona que todos los días sube cuatro pisos para llegar a su departamento, en alguna ocasión se detuvo en el tercer piso con la sensación de falta de aire, “hay que atenderse, son avisos del cuerpo que nos están diciendo que se puede estar gestando un problema muy serio en el corazón”. Advierte que “hay que hacerle caso al cuerpo” si se presentan estos síntomas; “lo mínimo” que se tiene que hacer es acudir al médico.

El infarto es una consecuencia final de un proceso en el cuerpo, que generalmente se presenta por la formación de una especie de sarro que se acumula en las arterias coronarias. Las coronarias, comenta: “son como mangueritas que le llevan sangre al músculo del corazón, al irse tapando le llega menos sangre”. A este proceso o enfermedad se le llama arteriosclerosis, que no es más que una formación de depósitos de colesterol y calcio en las arterias.

Avanzada la enfermedad, llega un momento en que la arteria se tapa completamente y la zona del corazón que debería ser irrigada se empieza a morir por falta de sangre.

¿Quiénes pueden padecer arteriosclerosis?

La arteriosclerosis se presenta en pacientes con diabetes, hipertensión, alteraciones de la grasa en la sangre y en algunos casos aislados en pacientes que tuvieron contacto con ciertas bacterias y la presencia de ciertas proteínas en la sangre.
También la herencia cuenta: estadísticamente hablando hay cierta predisposición a que si en la familia directa del paciente se presentó un infarto en edad temprana, automáticamente sus parientes en primer orden ya tienen un riesgo incrementado de padecer la enfermedad.

Los riesgos en hombres jóvenes

Existe la recurrencia en los infartos en hombres jóvenes que aún no cumplen los 50 años, y éstos sólo se pueden evitar cuando los adultos toman conciencia y trabajan directamente en los factores que propician este mal, como el tabaquismo, hipertensión arterial, colesterol alto, entre otros.

El hecho de que se presente más este padecimiento en hombres que en mujeres jóvenes (antes de los 50 años) se debe, según investigaciones que se han realizado, a que en las mujeres hay cierto efecto protector de las hormonas femeninas de la etapa de la pre-menopausia, que se presenta en la mujer entre los 50 ó 55 años.



Drogas

Existen otras causas de infarto aparte de la arteriosclerosis, como el uso de sustancias tóxicas como la cocaína, que puede producir un infarto en personas realmente jóvenes aunque sea la primera vez que la prueban.

La cocaína y la heroína atacan directamente las arterias coronarias, las obstruyen de una manera muy agresiva.

También existen otro tipo de enfermedades en las personas jóvenes como la arteritis, que es la inflamación de las arterias, lo que disminuye el paso de la sangre y el resultado es el mismo. Además de enfermedades reumáticas como el lupus eritematoso, artritis reumatoide, entre otras, son similares a la arteritis que ocasionan el mismo daño.

Lo importante del chequeo

La mejor manera de evitar un infarto es disminuir los factores de riesgo: por ejemplo, si usted acude a un chequeo médico y su doctor le dice que, según las respuestas de su cuestionario (tabla de riesgo), usted tiene 15% de probabilidades de que en diez años se pueda infartar, la recomendación es que vaya atrás y reduzca los factores de riesgo. Es decir, si usted fuma y deja de hacerlo, si tiene un nivel alto de colesterol y trabaja en ello, este riesgo de 15% puede bajar hasta un tres por ciento.
También debe adoptar una dieta sana y ejercicio, de esta forma el riesgo se reducirá.

Además, si sufre de diabetes o hipertensión debe de estar en contacto con su médico para que lo mantenga controlado.



Recomendaciones

Cuide sus niveles de colesterol.

Evite el cigarrillo. Fumar aumenta 2.5 veces el riesgo de un ataque cardíaco.

Nivel de la presión. Reduciendo la presión arterial directamente disminuye los factores para desarrollar problemas coronarios.

Haga ejercicio. La inactividad física es en realidad el cuarto contribuyente más peligroso al infarto. El riesgo disminuye radicalmente para los que realizan actividad física en forma regular.

No abuse de las bebidas alcohólicas. El alcohol en cantidades bajas parece ejercer un efecto favorable sobre el colesterol y también puede proteger contra la coagulación, pero las dosis más altas pueden elevar la presión arterial.

Coma saludablemente. Una dieta para un corazón sano debe ser alta en frutas y hortalizas frescas y fibra, baja en sodio y baja en grasa.

En cuanto a las mujeres, se ha mostrado que la terapia del reemplazo de estrógeno reduce el riesgo de ataques cardíacos en las mujeres post-menopáusicas en casi 50 por ciento.

No deje pasar mucho tiempo entre los chequeos generales que le realice su médico general.