Con subcontratación en Salud, riesgo de abuso a trabajadores: expertos

GUADALAJARA, JALISCO (06/JUL/2013).- Que la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) contrate una empresa externa para se haga cargo del pago a los trabajadores del Seguro Popular, es decir, se sume al esquema de subcontratación o tercerización de servicios conocido como ''outsourcing'', abonaría a un proceso de informalización del trabajo en México, que hace que las tareas laborales, de cualquier índole, sean menos dignificantes, opina el investigador en política económica, empleo y política social Luis Ignacio Román Morales, del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO).

El especialista habla así al referirse al caso del Seguro Popular en Jalisco, cuya decisión de subcontratar a partir de julio a sus empleados eventuales generó quejas que ayer llegaron a protestas públicas. La dependencia, por su cuenta, dice que se trata de un programa federal para conseguir ahorros.

Sin embargo, al recurrir a estas estrategias “lo único que estamos haciendo es desestructurar la economía y generar mayor polarización social”, insiste Ignacio Román, quien además calificó el caso de Jalisco como delicado, pues se hace creer a la población que los trabajadores eventuales del Seguro Popular se manifiestan por “berrinche”, cuando están haciendo valer su legítimo derecho, al no querer adherirse a un esquema laboral en el que no estaban.

Considera que, si el argumento de la SSJ para contratar a una empresa externa es para mejorar el proceso de pago a los empleados eventuales del Seguro Popular, lo que haría falta, entonces, es intentar una modificación a las reglas de operación del programa: “Habría que eficientar a nivel administrativo el tipo de vínculo que existe entre el Seguro Popular estatal y la lógica del funcionamiento federal”.

El que los trabajadores eventuales hayan estado laborando mediante contratos de tiempos cortos, en los que no se reconoce que su tarea es sustantiva para el funcionamiento del programa, es una violación a sus derechos laborales, manifestó el investigador.

Faltó socialización entre empleados

Por su parte, el académico de la Universidad de Guadalajara (UdeG) Jaime Arias Amaral, quien además es médico adscrito a la SSJ, señaló que, si los trabajadores tienen inconformidad, es porque hizo falta mucha socialización del cambio de esquema laboral en sus contratos.

“No se les dio la suficiente información a los trabajadores de que se iba a cambiar la forma de contratación; simplemente se les requirió, que ahora que terminaban su contrato, firmaran otro tipo de contrato, y se les daba un día o dos días para que lo firmaran; si no, quedaban fuera”.

Para el académico, lo que los trabajadores están buscando no es salir de la SSJ, sino volver al esquema anterior, en el que renovaban contrato cada seis meses. Eso, según el médico, daba más certidumbre a los empleados y podían seguir esperando una posible base en el futuro.

Resaltó que el viernes, cuando quitaron los tarjetones para checar a los trabajadores que no han firmado el contrato y, por ende, hicieron falta dentro del hospital, provocó un perjuicio sensible en los servicios. Tanto, que hubo la necesidad de derivar pacientes neonatos y adultos a hospitales privados.

SABER MÁS

Los quejosos

> La plantilla de la SSJ es de 20 mil empleados; tres mil 500 de ellos pertenecen al área del Seguro Popular. De ellos, cerca de mil 800 ofrecen directa al paciente; el resto son de nivel administrativo, como afiliadores y validadores.

> El Hospital “Zoquipan” tiene una plantilla de mil 500 trabajadores, de los cuales, 237 son trabajadores del Seguro Popular; 50 ya firmaron su contrato nuevo.

> A las protestas de ayer en el Hospital “Zoquipan” llegaron representantes del Sindicato de Trabajadores de la SSJ, quienes externaron su apoyo a los trabajadores eventuales afectados.

> Los inconformes anuncian una nueva manifestación el lunes. La SSJ advirtió que los empleados de base que se sumen y desatiendan sus actividades se harán acreedores a una sanción.

> Son varias las áreas afectadas por la falta de firma de los contratos y, al menos en Zoquipan, ayer hubo que enviar pacientes de cuidados intensivos neonatales a hospitales privados.

FRASE

"Si el Estado está violando la ley, la salida no es cambiarlos a otro esquema donde sea borrón y cuenta nueva de las violaciones anteriores y contratarlos en condiciones más precarias".

Luis Ignacio Román Morales, investigador del ITESO.

• EL PROGRAMA PODRÍA AHORRARSE 15 MDP ANUALES

El Seguro Popular garantiza nuevos beneficios laborales

El director de Seguro Popular en Jalisco, Antonio Cruces Mada, advirtió que el programa no puede afectar los servicios a sus beneficiarios, por lo que deberán sustituir a los empleados eventuales que no accedan a renovar su contrato, del cual se quejan porque ahora estarán contratados vía ''outsourcing'', por una empresa externa.

El motivo del cambio es una estrategia federal para propiciar ahorros en las secretarías de Salud en los estados, señala Cruces Mada; al menos en la dependencia de Jalisco, que una empresa maneje la nómina de los empleados representaría un ahorro de cerca de 15 millones de pesos anuales, que serían aprovechados en otros servicios. La empresa que hará las contrataciones, dijo, fue elegida en un proceso de licitación en la Secretaría de Planeación.

“Las personas que no accedan, por gusto o interés propio, ese espacio lo va a ocupar otra persona, porque hay que garantizarle al ciudadano la salud”, indicó Cruces Mada, quien defendió las bondades del cambio: “Este contrato le da continuidad al seguimiento de mes por mes, se le genera la relación laboral, van a tener ventajas y tienen beneficios; anteriormente, el trabajador no tenía absolutamente ninguna prestación, porque así son las reglas de operación federal”.

Cruces Mada acudió ayer al Hospital “Zoquipan” y, en entrevista, señaló que la diferencia entre los nuevos contratos y los anteriores es positiva, pues los empleados ganarían seguro de vida, seguro de gastos médicos y acceso a créditos personales, prestaciones que no tenían. Sus sueldos seguirían iguales y su antigüedad quedará intacta, aseveró.

Hasta el momento, de los tres mil 500 trabajadores, alrededor de 50% ya renovó su contrato, y el Seguro Popular espera que el resto también lo haga cuanto antes: “Estamos esperando a que todos firmen; si no quieren trabajar, nosotros qué podemos hacer”.

Aseguró que la información sobre el cambio en la contratación fue expuesta con tiempo a los empleados.

No se renovará contrato a 50

Según el director, existen intereses particulares de algunos trabajadores: “En la administración anterior hubo favoritismo o privilegiaron a tanto a funcionarios como a personal sindicalizado, para garantizar la entrada a familiares”.

Por otro lado, dijo que unos 50 empleados, entre afiliadores y gestores médicos, no tendrán la oportunidad de renovar contrato, porque se encontraron irregularidades en su actuar, luego de la evaluación del personal que se hizo con el cambio de administración. La causa: posible vinculación con el tema de falsificación o duplicación de expedientes de afiliados al Seguro Popular, denunciada hace un par de meses, y por lo cual la Contraloría del Estado del realiza una investigación.

FRASES

"No hubo socialización donde les presentaran este nuevo contrato; eso de cambiar de (contratos) de seis a tres meses obviamente genera inestabilidad".

Jaime Arias Amaral, académico y médico adscrito a la SSJ.

"Se buscaron estrategias que vienen pactadas desde la Federación, son modelos que funcionan en otros estados; el caso típico es el de San Luis Potosí, que tiene un año".

Antonio Cruces Mada, director del Seguro Popular en Jalisco.

TELÓN DE FONDO

La clave, falta de regulación

En Jalisco, hasta 5% de la población con un trabajo formal está contratada mediante ''outsourcing'', un modelo de subcontratación que, según sus defensores, permite a las empresas invertir sus recursos en actividades productivas y despreocuparse de la “carga” del manejo de la nómina, pero que, según analistas, representa también un peligro para los derechos de los trabajadores y hasta para el sistema recaudatorio del país.

El año pasado, el presidente de la Coparmex Jalisco, Óscar Benavides Reyes, estimó que en el Estado trabajan cinco mil 697 empresas que funcionan con este modelo; sólo 26 (0.45%) estaban afiliadas a esa organización patronal. Cinco meses antes, el mismo organismo había calculado dos mil 500 empresas de este tipo en Jalisco, y había advertido del aumento de conflictos legales y sociales generados por el esquema.

Por su cuenta, el Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal) advirtió (EL INFORMADOR, 01/MAY/2012) que en Jalisco hay al menos 60 agencias operadoras de ''outsourcing'', el cual, como alternativa de manejo de recursos humanos “permea a toda la economía de Jalisco, incluso para puestos gerenciales”, según declaró Felipe Burgueño, integrante de ese organismo jalisciense de análisis sobre derecho laboral.

Según el Cereal, el ''outsourcing'' representa problemas para que se asegure el cumplimiento de prestaciones legales de los trabajadores, desde el monto correspondiente en indemnizaciones, los aguinaldos y pensiones en algunos casos; “se ha prestado para actos de simulación que escatiman derechos del trabajador, como en la falta de reconocimiento del tiempo trabajado en una empresa”, estableció Burgueño, al advertir que se requieren marcos legales específicos para regularlo.