Autoridades relegan estudios que avalan la Villa Panamericana

A dos meses de que comience la construcción de la Villa Panamericana en las inmediaciones del Parque Morelos, el Ayuntamiento de Guadalajara aún no cuenta con los estudios de mecánica de suelo e impacto ambiental que avalen el complejo inmobiliario.

Juan Palomar Verea, vocal ejecutivo de la Comisión de Planeación Urbana (Coplaur), reconoció que el municipio únicamente posee los resultados preliminares del subsuelo en los alrededores del parque, los cuales arrojan que los mantos freáticos se encuentran a ocho metros de profundidad, por lo que es factible la construcción de un estacionamiento subterráneo en la zona para atender la demanda del parque vehicular.
Sin embargo, indicó que todavía no están concluidos los estudios de mecánica de suelo, que evaluarán cada una de las superficies donde se derribarán fincas para levantar edificios.

“Adentro de las fincas todavía no se tiene un muestreo, pero evidentemente lo que sucede afuera de las viviendas es muy parecido, o hay una alta probabilidad de que el suelo se comporte de la misma manera”.

Ante la posibilidad de que el subsuelo no soporte las edificaciones que se tienen previstas en la zona, Palomar Verea respondió que apelarán a las técnicas de la ingeniería moderna para adaptar los proyectos.

“La ingeniería moderna tiene multitud de recursos para poder hacer frente a cualquier contingencia que se presente en esos términos”.

El funcionario descartó que esta situación pueda considerarse como un “factor de riesgo”, o un “error de planeación”, pues consideró que desde el comienzo se contaba con información suficiente que mostraba indicios de que el complejo inmobiliario era viable en torno al Parque Morelos.

“Como en cualquier proyecto, se parte de los datos que se puedan allegar o de los datos existentes, y se va profundizando conforme avancen los estudios”.

Existe un precedente por no contemplar el estudio de mecánica de suelo: durante la administración tapatía de Fernando Garza Martínez, se proyectó la remodelación del Mercado Mexicaltzingo. Los estudios de mecánica de suelo arrojaron que los trabajos de construcción no eran viables, debido a que no se tomaron en cuenta los mantos freáticos que existían en la zona. Esto provocó que el costo de la remodelación se duplicara, al pasar de 34 a 62 millones de pesos.