Seguir a Cristo no garantiza éxito, pero sí la felicidad: Papa

CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Benedicto XVI reconoció hoy durante su habitual rezo del Ángelus dominical que quizá seguir a Cristo no garantiza el éxito en los términos en los que éste se concibe en la sociedad actual, pero sí asegura la paz y la felicidad.

"Para toda conciencia se hace necesaria una elección: ¿a quién quiero seguir? ¿A Dios, o al maligno? ¿La verdad o la mentira?. Elegir a Cristo no garantiza el éxito según los criterios del mundo, pero asegura la paz y la felicidad que sólo él puede dar" , dijo el Pontífice desde su balcón de la plaza de San Pedro del Vaticano.

"Lo demuestra en cada época la experiencia de muchos hombres y mujeres que, en nombre de Cristo, en nombre de la verdad y de la justicia, han sabido oponerse a las ilusiones de los poderes terrenales con sus distintas máscaras, hasta sellar con el martirio su fidelidad" , añadió.

El Papa recordó que en este último domingo del año litúrgico se celebra la solemnidad de Jesucristo como Rey del Universo, y expresó un "cordial saludo" para las comunidades religiosas de clausura, que ayer conmemoraron la jornada "pro orantibus" .

Benedicto XVI tuvo además unas palabras para sor María Alfonsina Danil Ghattas, nacida en Jerusalén en 1843 en el seno de una familia cristiana y cuya ceremonia de beatificación se celebra hoy en su ciudad natal.

"La beatificación de esta tan significativa figura de mujer es de particular conforto para la comunidad católica en Tierra Santa y es una invitación a confiarse siempre, con firme esperanza, a la Divina Providencia y a la protección maternal de María" , indicó el Pontífice.

"A ella le corresponde el mérito de fundar una congregación formada sólo por mujeres del lugar, con el objetivo de la enseñanza religiosa, para acabar con el analfabetismo y mejorar las condiciones de la mujer de ese tiempo en la tierra donde Jesús mismo exaltó la dignidad" , añadió.

Ya en español, el Papa saludó "con afecto" a los peregrinos de lengua hispana presentes en San Pedro, en particular a los fieles de las parroquias de Santo Tomás Apóstol y Santo Domingo Savio, de la Comunidad Valenciana ( España) .