Se deben atacar finanzas de organizaciones criminales: ONU

CIUDAD DE MÉXICO (18/ABR/2012).- A 12 años del Protocolo contra el Tráfico Ilícito de Migrantes por Tierra, Mar y Aire, la UNODC llamó a cada nación a desarrollar un esquema de financiamiento para que parte de lo decomisado a los criminales se destine a luchar contra este mal.

Al dictar una conferencia magistral durante el cierre de la Conferencia Internacional sobre el Tráfico de Migrantes, Amado Philip de Andrés, representante de la ONU contra la Droga y el Delito en Panamá cubriendo América Central y el Caribe, destacó los retos globales que enmarcan este protocolo.

Subrayó que existen insuficientes políticas de prevencion, incluso en algunas regiones inexistentes acciones de sensibilización, además de carencia de base de datos e investigaciones sobre el fenómeno, ausencia de legislación, cooperación internacional deficiente, políticas públicas y de planificación inadecuadas.

Uno de los principales retos es atacar a las mafias "en donde más les duele que es financiación". La migración es un derecho de la persona y del ser humano; evidentemente, el protocolo de la Convención de Palermo no penaliza de ninguna forma la migración, anotó.

En este contexto, se refirió al volumen del flujo de migración ilícita desde América Latina hacia el norte, pasando por América Central y México y la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) estimó un flujo de más de siete mil millones de dólares.

Philip explicó que hay diferentes paquetes, el primero es el migrante que se va a convertir en emigrante ilícito, que como ya tiene su pasaporte paga la parte mínima, simplemente para traspasar fronteras, lo que representa cinco mil dólares.

Otro paquete más complejo, con documentos falsificados, más de 17 mil dólares; y tomando en cuenta a los migrantes ilícitos que cruzan las fronteras mensualmente ahí están los más de siete mil millones de dólares.

Respecto al protocolo, hoy en día hay 111 estados signatarios y 129 Estados parte. La entrada ilegal puede constituir delito en algunos países pero no se reconoce como una forma de delincuencia organizada como tal y por lo tanto se abstrae al ámbito de la convención de Palermo, este es el caso de algunos países, precisó.

Anotó que este fenómeno en Africa Occidental, en América Central, en México o en India, no es coordinado por grandes estructuras organizadas, sino por pequeños grupos vinculados a otras estructuras a su vez.

Tampoco se puede asegurar que existen grupos que exclusivamente se dedican al tráfico ilícito de migrantes, sino que tienen otras actividades lucrativas igualmente ilícitas y eso lo hace aún más complejo, puntualizó.