Rechaza Berlusconi debilitamiento de su gobierno pese a escándalos

ROMA, ITALIA.- El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, pidió hoy desoir rumores sobre la inestabilidad de su ejecutivo y eventual sustitución por el actual gobernador del Banco Central, Mario Draghi o por el ministro de Economía, Giulio Tremonti.  

'La estabilidad del gobierno no está en discusión; cada uno de nosotros debe hacer la parte que le corresponde y no hacer caso a rumores sobre Draghi y Tremonti, con quienes hay plena colaboración', dijo antes de partir a la cumbre de la Unión Europea en Bruselas.  

Afectado por un rosario de escándalos que parecen no tener fin, Il Cavaliere se encuentra a la defensiva y de facto impedido para gobernar, opinó el diario Il Riformista, según el cual en el horizonte se dibuja un escenario de parálisis institucional.  

El último golpe llegó la víspera, cuando el cotidiano Corriere della Sera reveló que la fiscalía de Bari (sur) indaga el presunto caso de mujeres que recibían dinero a cambio de participar en fiestas de Berlusconi en Roma o Cerdeña.  

La hipótesis sobre la que se investiga es la de inducción a la prostitución y la primera testigo, Patrizia D’Addario, confirmó al periódico haber recibido pagos por asistir a dos encuentros en el Palacio Grazzioli, la residencia en Roma del premier.  

La mujer, a la que algunos diarios calificaron como 'prostituta de alto bordo', entregó a la fiscalía de Bari las grabaciones que comprobarían su versión y las que, según fuentes judiciales, fueron puestas bajo llave para evitar fuga de noticias.  

Antonio Polito, director de Il Riformista, dijo que el nuevo caso es más grave que el 'Noemi-gate', la presunta relación de Berlusconi con la adolescente Noemi Letizia, salida a la luz a finales de abril cuando el premier asistió al cumpleaños número 18 de la muchacha.  

'Si la ‘signorina’ Patrizia D’Addario miente, por decisión suya o porque ha sido instigada, esta historia terminará pronto y le costará muy caro, pero si no miente estamos frente a un salto de calidad muy peligroso del velina-gate y el precio lo pagará Berlusconi', opinó.  

Polito recordó que mientras Noemi Letizia negó todo tipo de relación 'ilícita' con Il Cavaliere, la D’Addario dice lo contrario y afirma poderlo probar y documentar con grabaciones.  

El analista Stefano Folli, del diario Il Sole-24 Ore advirtió que el ejecutivo de Berlusconi sufre de un 'progresivo debilitamento' que podría llevar a su parálisis y, eventualmente, a su caída, poniendo fin a la aventura política de Il Cavaliere, iniciada en 1994.  

Los observadores se han referido, en ese sentido, a la posibilidad de un 'gobierno técnico' (no salido de las urnas) que sería encabezado por Draghi o por Tremonti, aunque la posibilidad por ahora es rechazada por los aliados de Berlusconi, electo (por tercera vez) hace un año con una amplia mayoría.  

Incluso Giuliano Ferrara, director del diario Il Foglio y cercano al primer ministro, escribió este día que 'el problema es que las armas afiladas de esta campaña (contra Il Cavaliere) provienen de Berlusconi en persona y de su entorno'.  

Entre tales 'armas' citó un estilo de vida expuesto al chantaje y una 'autodefensa risible'.  

Citó a su abogado Niccoló Ghedini, según el cual en caso de que fuera cierta la versión de D’Addario, Berlusconi no es perseguible penalmente porque sólo fue el 'utilizador final' (del cuerpo de la mujer).  

'Ahora le toca a él (a Berlusconi) salir de esta increíble condición de minoría civil en la que se ha metido y reaccionar con escrúpulo, inteligencia y fuerza de ánimo. La situación se ha vuelto grave y hasta seria', concluyó Ferrara.