Domingo, 24 de Noviembre 2024
Internacional | Ricardo Martinelli (Veraguas, 1952) asumirá el miércoles la presidencia de Panamá

Para Ricardo Martinelli, ni la izquierda ni la derecha

Sin diplomacia ni intelectualidad, el millonario empresario se prepara para asumir el desafío para el cual dedicó muchos años y mucho dinero

Por: SUN

ASUNCIÓN, PANAMÁ.- Ricardo Martinelli (Veraguas, 1952) asumirá el miércoles la presidencia de Panamá. Sin diplomacia ni intelectualidad, el millonario empresario se prepara para asumir el desafío para el cual dedicó muchos años y mucho dinero. Tiene una retórica más bien básica y poco temor a irritar con sus palabras.

¿Por qué pide usted a los empresarios que se metan en política?

Para cualquiera en mi país, lo primero es trabajar para sacar de la pobreza a 40% de la población que la sufre. Son víctimas de la incapacidad de los políticos que llegan al poder con un discurso en favor de los pobres... Entran sin dinero al Gobierno y salen millonarios. Parece que hay un pacto entre los partidos tradicionales de alternarse en el poder sin mejorar nada en lo social.

¿Habla de populismo?

Los populistas no han hecho más que empobrecer a sus ciudadanos. Llegan con un discurso antisistema y en el poder sólo aplican un populismo barato. Por eso los gobiernos pasan y las cosas siguen igual, la misma inseguridad, paro, falta de sanidad…

¿Cuál será la prioridad de su Gobierno?

El Gobierno, cuando supo que perdería, dejó muchas cargas de profundidad para impedirnos hacer un buen Gobierno. Mediante decretos, han violado muchas leyes. Incluso para dificultar los nombramientos del nuevo gabinete. Pero el pueblo panameño nos dio un mandato claro con 61% de los votos para que hagamos un cambio real y efectivo; y usaremos todos los recursos legales para hacerlo.

A usted lo califican de derechista. ¿Cuál es su modelo?

Nos hace falta abrirnos más al mundo y que fluya la inversión extranjera. Hay que dejar de pensar que el Estado lo resuelve todo. Porque si se pone a resolver todo, tendrá que dejar de hacer carreteras y dar medicinas. Necesitamos dar confianza a los inversionistas.

Centroamérica y los Andes están copados de gobiernos de izquierda, salvo Costa Rica y Colombia. ¿Se le pueden complicar las relaciones con el vecindario?

Aquí no se trata de izquierdas ni derechas, sino voluntad. Compartimos religión, idioma y costumbres. Nuestra relación será debe tener altura para tratar de incrementar el comercio y el turismo y cultura regionales.

¿Qué imagen de Panamá quiere proyectar?

Quiero que nos vean como un país eficiente, justo y solidario.

¿Se unirá a Centroamérica para lograr el libre comercio con la Unión Europea (UE), o lo buscará por separado?

Creo que Panamá trató de negociarlo solo y se dio cuenta de que debía hacerlo con la comunidad centroamericana, de manera integrada. Vamos a esforzarnos para lograr este cometido cuanto antes. Estoy seguro de que cuando España presida la UE hará lo que esté en su mano para alcanzar un pacto de libre comercio UE-Centroamérica. Dicho esto, creo que el Parlamento Centroamericano (Parlacen) es ineficiente y costoso. Es una cueva para lograr inmunidad y delinquir. Voy a proponer que Panamá abandone el Parlamento regional. (El País)

Presidente electo

Ricardo Martinelli

Buscó por segunda vez la presidencia de Panamá luego de terminar en cuarto lugar en los comicios de 2004. En 2009 lo consiguió.

Ricardo Martinelli Berrocal, empresario de 57 años y candidato de la opositora Alianza por el Cambio que integran su partido Cambio Democrático, el Panameñista (el más grande de oposición), el Movimiento Liberal Republicano Nacionalista y Unión Patriotica, de líneas conservadora y de derecha.

Hijo de inmigrante italiano, Martinelli se graduó en mercadotecnia de la Universidad de Arkansas, Estados Unidos, y trabajó como oficial de crédito en el Citibank.
Martinelli, a quien lo inspira entre otros el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se declaró independiente y distinto a los políticos tradicionales, aunque sus opositores le achacan que fue funcionario en dos gobiernos distintos.

Nacido en la Ciudad de Panamá, Martinelli fue ministro del Canal de Panamá y presidente de la junta directiva de la autoridad del Canal de Panamá.
Es propietario de la mayor cadena de supermercados de Panamá.

El magnate, cuya canción favorita es la ranchera mexicana “El Rey”, aprovechó el apodo de “Loco” endilgado por la oposición para crear otro de los lemas favoritos de su campaña electoral: “Los locos somos más”, replicado en camisetas y demás parafernalia. (Agencias)

Frases

Aquí no se trata de izquierdas ni derechas, sino voluntad.

Nos hace falta abrirnos más al mundo y que fluya la inversión extranjera.

Ricardo Martinelli

presidente electo de Panamá.

Asunción

Larga lista de promesas espera al flamante mandatario panameño

PANAMÁ.- El empresario millonario de derecha, Ricardo Martinelli, asume el miércoles la presidencia de Panamá con el propósito de distribuir la riqueza entre los más pobres y concluir la ampliación del Canal en medio de la crisis.

Martinelli fue el vencedor de los comicios de mayo con más de 60% de los votos, con un mensaje de “cambio”.

“Ningún candidato en los 100 años de historia del país ha realizado tantas promesas electorales y ha generado tantas expectativas”, dijo Arístides Hernández, presidente de la agencia Latin Consulting.

En el contexto actual, este dueño de la cadena de supermercados más grande de Panamá, no tendrá fácil cumplir todas esas promesas, auguran los analistas.
El principal reto de Martinelli, dice Hernández, es “mantener el crecimiento económico por encima de 5% para mantener la demanda laboral” y advierte que si bien las finanzas panameñas “están sanas” son insuficientes “para atender las promesas electorales”.

Martinelli llega dispuesto a cambiar Panamá: ha prometido reformar el sistema tributario con la introducción de una tasa plana, el sistema sanitario y educativo, erradicar la creciente delincuencia, subirá el sueldo a la Policía, otorgará una pensión de 100 dólares para los mayores de 70 años no asegurados e implementará un ambicioso plan de inversiones en infraestructuras, como la construcción de un metro en la caótica capital panameña.

De cara al exterior, tendrá que limpiar la imagen de paraíso fiscal que sigue teniendo el país, pese a que ha salido de la lista negra de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

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