Según el diario The New York Post, los hechos ocurrieron el pasado 4 de diciembre, aunque transcendieron ahora a la prensa después de que la familia del menor interpusiera una demanda de 250 millones de dólares contra la ciudad y la Policía de Nueva York por esta reacción "exagerada". El niño hispano Wilson Reyes fue arrestado tras discutir con otro compañero en el patio del colegio, quien lo acusó de haberle robado 5 dólares que habían caído en el suelo. La familia relató que cuando los agentes llegaron a la escuela, esposaron al pequeño, lo retuvieron en una habitación durante cuatro horas y se lo llevaron a la comisaria, donde lo interrogaron otras seis horas. No obstante, fuentes policiales citadas por este diario aseguraron que Reyes fue tratado como cualquier otro joven sospechoso y no fue interrogado durante diez horas, sino que permaneció en la comisaria menos de cinco horas. Según los documentos aportados por la familia en la denuncia interpuesta, esta reacción policial fue "exagerada" porque trataron al pequeño como si fuera un asesino. "Fue esposado, abusado física y emocionalmente, intimidado, humillado, avergonzado y difamado", apuntaron. La madre de Reyes contó que cuando su hermana y ella fueron a la comisaría a recoger al pequeño, en un primer momento no les dejaron verlo y cuando lo pudieron ver, el niño estaba "asustado sentado en una silla en mal estado y con la muñeca izquierda esposada a la pared". Además, relató que el menor estaba llorando y muy asustado, por lo que tomaron una fotografía de la escena como prueba del supuesto abuso. Finalmente la policía no interpuso ningún cargo contra el menor y según señaló la familia de Reyes, otro compañero de colegio confesó posteriormente haber robado los 5 dólares.