BEIRUT, LÍBANO (29/SEP/2016).- Fuerzas oficialistas bombardearon ayer Alepo, impactando un centro de distribución de pan y dos hospitales, dijeron médicos y activistas. Siete personas murieron y una de las instalaciones médicas quedó fuera de servicio.El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas fue criticado duramente por no ser capaz de implementar una resolución que proteja las instalaciones y el personal médico en zonas de conflicto, sea Siria, Yemen o Afganistán.El organismo sostuvo una reunión sobre atención médica en conflictos armados que por coincidencia empezó apenas horas después de que dos hospitales de Alepo fueran bombardeados, lo que subraya la inacción para protegerlos.Joanne Liu, presidenta de Médicos sin fronteras, destacó la inacción a la “falta de voluntad política de los países que luchan en coaliciones, y de los que los apoyan”. Dijo que dicha inacción es evidente en los ataques contra hospitales que han dejado a los civiles envueltos por la guerra con “menos, si acaso alguno, acceso a atención médica”.“Muchos ataques... se desdeñan al calificarlos como errores”, dijo Liu. “Nosotros rechazamos la palabra ‘error’. Condenamos que de manera deliberada y sistémica los países no eviten atacar hospitales y controlar apropiadamente su conducta de hostilidades”.