BRUSELAS, BÉLGICA (16/ENE/2017).- Los dirigentes europeos, Angela Merkel y François Hollande, apelaron ayer a la “unidad” y a tomar el destino “en mano”, ante las críticas contra la UE y la OTAN hechas por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump —que el viernes llegará a la Casa Blanca—, publicadas en los diarios Bild (Alemania) y Times (Reino Unido).“Los europeos tenemos nuestro destino en nuestras propias manos. Voy a continuar comprometiéndome para que los 27 Estados miembros (sin contar ya al Reino Unido) trabajen juntos mirando al futuro”, dijo la jefa del Gobierno alemán, criticada por Trump por su política migratoria, aunque prefirió no hablar de ese tema.El presidente francés, Hollande, agregó que la Unión Europea “no necesita consejos externos para decirle lo que tiene que hacer” y advirtió que “Europa estará siempre dispuesta a continuar con la cooperación transatlántica, pero ésta será determinada en función de sus intereses y de sus valores”.Para el ex primer ministro francés, Manuel Valls, las declaraciones de Trump —quien vaticina el fin del bloque comunitario— “son una provocación, una declaración de guerra a Europa”.Consultado sobre las polémicas delcaraciones del magnate, el secretario de Estado estadounidense saliente, John Kerry, defendió a la Unión Europea y la política de refugiados de Merkel: “Pienso, francamente, que fue inapropiado para un presidente electo inmiscuirse en los asuntos de otros países de manera tan directa”. NO HAY BREXIT 'A LA CARTA'Piden garantizar las libertades europeasBERLÍN, ALEMANIA.- La canciller alemana, Angela Merkel, envió nuevamente un mensaje a Reino Unido, prácticamente listo para dejar la Unión Europea (UE), y le aseguró que si no garantiza las cuatro libertades europeas —circulación de personas, mercancías, servicios y capitales—, no tendrá acceso pleno al mercado interior.En un discurso ante la Cámara de Industria y Comercio de Colonia, ecomo antesala a la presentación del plan de negociación con la UE que hará hoy la primera ministra británica, Theresa May, la canciller insistió en que no se puede elegir “a la carta”.Dejar que el Reino Unido lo haga, advirtió, pondría en peligro el mercado interior, ya que otros países socios podrían plantear también una participación selectiva en el proyecto europeo.Indicó que no obstante que hay buenas relaciones con Londres, “un acceso completo al mercado interior sólo puede garantizarse si están garantizadas la cuatro libertades”.EFE