La Unión Africana llama a un alto al fuego en Burundi

ADIS ABEBA, ETIOPÍA (14/MAY/2015).- La Unión Africana (UA) llamó a un alto el fuego a las partes enfrentadas en Burundi para iniciar negociaciones de paz, tras lo que calificó de un "intento" de golpe de Estado contra el presidente, Pierre Nkurunziza.

"El Consejo de Paz y Seguridad (de la UA) condena cualquier intento de tomar el poder a través de la violencia (...). Urge a todas las partes a un alto el fuego tan pronto como sea posible para iniciar el camino a las negociaciones", dijo la jefa de este órgano, la nigerina Diallo Amina Djibo, en una rueda de prensa en Adis Abeba.

Burundi, sumida en el caos por las protestas que desencadenó la decisión de Nkurunziza de buscar un tercer mandato en contra de la Constitución, vive otra jornada de violencia y confusión en la que distintas facciones del Ejército, divido entre golpistas y leales al Gobierno, se han enfrentado en la capital.

El Consejo de Paz y Seguridad (CPS), órgano supremo de la UA, se reunió de urgencia en su sede en la capital etíope para abordar la crisis, un día después de que un general anunciara que Nkurunziza había sido depuesto, circunstancia que el Gobierno ha negado hasta el momento.

"El CPS ha estado observando la situación en Burundi de cerca y ha hecho esfuerzos para resolver la situación", dijo Djibo, embajadora de Níger ante la UA y jefa de turno de este órgano, tras una reunión a puerta cerrada que concluyó sin ninguna medida sancionadora para Nkurunziza ni los golpistas.

La UA desplegará una misión humanitaria de forma urgente en Burundi y se reunirá con expertos jurídicos para evaluar la situación sobre el terreno y determinar su curso de acción.

La representante africana dijo que el encuentro se hizo eco de "todas las resoluciones anteriores de la UA", que apoyan el retraso de las elecciones.
Recientemente la UA advirtió de que la situación de tensión en Burundi no aconseja celebrar los comicios de acuerdo con el calendario previsto, que fijaba la primera vuelta de las presidenciales para finales de junio.

Djibo no se pronunció sobre si Nkurunziza debería abandonar el poder o retirar su candidatura, como le han exigido miles de burundeses en multitudinarias protestas desde finales de abril.

Durante las últimas dos semanas, al menos 20 personas han muerto en las protestas contra las aspiraciones del presidente de presentarse a un tercer mandato, algo que, según la oposición, prohíbe la Constitución burundesa.

La candidatura de Nkurunziza ha suscitado el temor entre grandes sectores de la población burundesa, que apenas hace una década salió de una guerra civil (1993-2005) que hundió al país y todavía afecta a la sociedad.