NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS (17/MAY/2017).- El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se reunió ayer a puerta cerrada para considerar un nuevo borrador de medidas para incrementar la presión sobre Corea del Norte tras su último disparo de misil balístico.La embajadora estadounidense Nikki Haley dijo que Washington trabaja con China, principal aliado de Pyongyang, sobre un nuevo proyecto de sanciones y que todos los miembros de la organización deben incrementar las acciones contra Corea del Norte o enfrentar las consecuencias.“Todos tenemos que enviar una señal a Corea del Norte y ésta es basta, no es tiempo de jugar, esto es serio, estas amenazas no son bienvenidas”, dijo Haley a los periodistas antes de la reunión del Consejo.“Si un país abastece o apoya a Corea del Norte, tomaremos medidas”, advirtió. “Nos aseguraremos de que todos lo sepan y dirigiremos esas sanciones también hacia ese país”.La embajadora estadounidense también evocó la posibilidad de conversaciones directas con Corea del Norte si pone fin a los lanzamientos de misiles y pruebas nucleares.Sin embargo, durante la reunión a puerta cerrada, China no mencionó la existencia de un proyecto con nuevas sanciones y reiteró su llamado al diálogo, señalaron diplomáticos luego del encuentro.Estados Unidos, Japón y Corea del Sur convocaron a la reunión de emergencia en respuesta a la prueba de misil realizada por Norcorea y para apoyar demandas internacionales de que el país asiático desmantele sus programas balístico y nuclear.
